Dolorosa Libertad (Korra X Asami)

La mala de la pelicula

Helloooo ha pasado mucho tiempo espero aun sigan mi historia, volveré a ponerle empeño y bueno al final de este capitulo explico un poco mi ausencia ... gracias a todos :)

Llegamos a mi consulta en absoluto silencio, Asami abrió su cartera y saco algunas cosas que coloco sobre mi escritorio mientras yo en absoluta tranquilidad la observaba detenidamente. Todos sus gestos, sus movimientos y su respiración medianamente agitada, conocía todo de ella y sabia perfectamente lo molesta que se encontraba. – Amm Asami yo ... –. Se levanto de golpe y se paro frente a mi, tomo mi mano y me jalo para quedar a su altura. – Siéntate sobre el escritorio, si estas a mi altura podre maquillarte mejor –.

.....

Me encontraba sobre el escritorio y Asami con suma delicadeza estaba intentando tapar los moretones con algo de maquillaje, después de unos minutos en los que me quede literalmente ensimismada observándole me comencé a dar cuenta que Asami no solo estaba de pie maquillándome sino que poco a poco había comenzado a avanzar y se encontraba entre mis piernas y yo por inercia la tenia tomada de la cintura. Bajé mis manos lo mas rápido que pude y Asami se aparto de mi de forma brusca. – Lo siento mucho, realmente no me di cuenta solo ... mmm estaba concentrada en lo que estabas haciendo –. Estaba tan nerviosa pero no era la única Asami estaba igual o peor que yo. – Tranquila yo ... tampoco me di cuenta de que estaba tan, tan ... cerca. Creo que ya termine al menos no se notan los golpes y bueno mañana también te puedo ayudar en casa si ... ehh lo necesitas –.

– Te lo agradecería mucho Asami –.

– korra ¿te encuentras bien? Digo además de estos golpes por lo que recuerdo ese imbécil también te dio una patada.

– Bueno eso... si me golpeo bastante duro pero no es nada grave solo una fisura así que si evito hacer fuerzas de más no debería haber problema –. Podía sentir la preocupación real que profesaba por mi, esto era extraño me hacia sentir bien y mal ya que no quería que se preocupara pero algo dentro de mi me decía que su preocupación no era solo cortesía. – korra, siento mucho lo que paso anoche se que fue mi culpa el que te expusieras así y agradezco de todo corazón que fueses en mi ayuda, realmente no se que habría pasado si no hubieses llegado... yo... me siento muy apenada –.

– Eyy tranquila Asami independiente de nuestro rompimiento tu sabes muy bien que jamas te dejaría sola además yo te a... yo te, te quiero mucho ahora eres mi... mi amiga y bueno jamas podría darte la espalda y tu sabes que con un par de golpes no me mandaran al suelo jajaja –. Casi, casi digo algo que no se bien ni porque quiso salir de mi boca, me estoy sofocando, su cercanía y todos esos gestos de vulnerabilidad me están matando ¿pero que demonios me pasa? Se supone que debería estar pensando en disfrutar mi soltería y desenamorándome de ella. Eso fue lo que planee pero ¿Por qué después de tantos años comienzo a sentir como niña de quince? – Gracias se que no me dejarías sola. Bien debo irme mi hora de almuerzo casi acaba y creo que tu ya estas presentable para trabajar, creo que te veré en la noche o ¿iras a la fiesta de tu nueva amiga? –. Wooow hace mucho que no escuchaba ese tono de celos en Asami y realmente me ha gustado, que debo hacer, quizás pueda probar algo con esto. – Bueno la verdad es que no conoceré a nadie ahí y quizás me aburra –. Asami sonreía triunfante. – Pero, ya que Azula se tomo la molestia de invitarme aun sin conocerme además que con muy buena voluntad había aceptado ayudarme a disimular los moretones creo que no debo hacerle ese desaire ¿no crees? –. Ahí estaba, su sonrisa cambio a una mueca que asemejaba ser una sonrisa y su ceño levemente fruncido demostraban lo mucho que estaba conteniéndose, se estaba esforzando para no lanzarme algo por la cabeza. – Claaaro sería de mala educación no aceptar una invitación tan bien intencionada, bien korra que lo pases bien. Quizás nos vemos o quizás no –. La puerta hizo vibrar las ventanas por el golpe que la azoto, ¿será que Asami aún siente algo por mi? O ¿solo será un acto egoísta de no dejarme ir? ...