Reencuentro

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Pov Alejandra 

—¿Donde esta korra?—  ya hace un buen rato que desapareció y para colmo su ex la siguió. No hay que ser muy inteligente para saber sumar uno mas uno. "Dioses esto duele tanto pero así debe ser", solo soy el mal tercio y...  —Oye, se que es difícil de aceptar pero en algún momento también estuve en tus zapatos y si bien no había tantos sentimientos involucrados como es tu caso para mi también fue difícil dejarla ir— Nunca pensé que Azula podría hacer una expresión tan seria, me estaba demostrando que realmente sufrió algo similar —Sabes, nunca me había enamorado pero siempre supe que korra no era del todo mía y cuando las vi en su casa frente a frente y esas miradas cargadas de sentimientos supe enseguida que mi presencia era innecesaria, realmente no se ni porque me mantengo aun aquí— su risa hizo eco incluso con el volumen de la música, me sentí ofendida y la mire con cara de pocos amigos —¿que te causa risa acaso no sabes respetar? — dije molesta —sabes Alejandra, me impresiona lo idiota que puedes ser— se giro con una sonrisa sarcástica mientras yo no podía controlar la cólera que ya comenzaba a brotar —¿a quien le dice idio... —shhh— su dedo sobre mis labios impidió que continuara gritando, sus ojos penetrantes me pedían que la escuchara —lo que haces aquí es independiente de korra o de quien sea, si estas aquí es porque quisiste y de todo lo que hacemos aprendemos algo. Según se, estas aquí por trabajo entonces sigue creciendo y cumple tu palabra ya que dijiste que no estabas aquí por perseguir a korra sino por tu carrera profesional. Así que supéralo y mantente firme, conoce gente, sal de fiesta, estudia y disfruta. Pudiste vivir sin ella antes puedes hacerlo de nuevo— sin palabras, solo cayeron un par de lagrimas que amablemente limpio para mi —vamos a bailar — me levanté pero —¿ y Opal?          — tranquila ella ya desapareció con su novio, creo que lo llamo antes de venir aquí, entonces que dices ¿bailamos?—  atrape su mano y termine de limpiar mi rostro.

Pov Autor

—Bumi, ¿me das la llave de la sala de descanso?— el dueño del local la vio con la ceja alzada alternando entre ella y Asami, observando sus manos entrelazadas salio del trance extendiendo la mano con unas llaves. —Tienes dos horas, hasta que termine el evento ya que luego debo guardar mercadería ahí,¿si?— dijo sonriendo y dando un pequeño golpe en el hombro de korra — gracias Bumi te las dejare en la barra amigo — Asami mantenía la cabeza baja aun avergonzada, se sentía como una adolescente a punto de hacer algo indebido con su novia pero este no era el caso. Caminaba aferrada a la mano de la morena subiendo unas escaleras y parando es seco en un pequeño pasillo korra hablo. —Se que no es un lugar al que te llevaría normalmente pero eres libre de decidir si seguir o marcharte no te obligare a na...— fue interrumpida por un beso ansioso lleno de deseo —¿desde cuando evades un momento intimo como este, has cambiado mucho verdad?— korra jadeo por el beso pero recompuso su postura de forma inmediata. —Nunca he evadido nada solo quiero ser considerada contigo pero si lo quieres así...— dijo con aire autosuficiente tomándola por la cintura con rudeza sin lastimarle. — Ahora haré valer mi propuesta indecente—

Aquel pasillo era testigo de como se fundieron en un beso carnal y deseoso, a paso torpe sin parar de besarse llegaron a la puerta dueña de las llaves que korra mantenía aun en su mano, sin detenerse tan solo para tomar bocanadas de aire pudo abrir la puerta. Ya no había razón ni juicio, el deseo y la pasión eran mayores para ambas. La habitación estaba fría, una mesita con algunas bebidas estaba en el centro de la habitación a un lado de  un cómodo sofá que albergaba a las bandas invitadas en ocasiones, solo la luz de la calle daba un poco de visibilidad la que consideraron justa para poder verse a los ojos y no detener el reencuentro que se avecinaba. Aun de pie korra no paraba de acariciar el rostro de su mujer, con un suave vaivén mantenía sus cuerpos pegados sintiendo que aunque la ropa era escasa solamente sobraba en aquella oportunidad. Desatando el nudo sobre el ombligo dio libre movilidad a sus manos bajo la camisa roja de Asami, sus manos heladas lograron erizar la piel de su amante quien con un pequeño estremecimiento logro dar a entender no debía parar. Los dedos morenos viajaban por la espalda blanquecina moviéndose delicadamente mientras sus labios ya habían descendido por el cuello de su victima, los jadeos provenientes de los labios rojos la alentaban a seguir moviéndose mientras sus cortos cabellos eran tomados con fuerzas y era empujada a adentrarse mas en los atributos de la bella mujer. Las piernas comenzaron a fallar, korra al percatarse la tomo por ambos muslos dándole el impulso a aferrarse en su cintura, Asami obediente se enredo en el cuerpo de la morena que caminaba alzándola del suelo sin parar un solo segundo de besar su cuello y hombros que ahora despejados aumentaban la libido de su propio cuerpo. La habitación ya no era fría para ninguna y ambas descansaban en el dichoso sofá que para esta ocasión nunca tuvo otro uso que no fuese el ser testigo de dicho reencuentro. Los besos no paraban y las prendas abandonaban a sus dueñas en una danza de caricias, las manos de Asami se colaron bajo la camisa de korra tocando con desesperación su cintura y abdomen, aquel que tanto le gustaba con músculos marcados similares a una barra de chocolate, apetitoso, embriagador y adictivo — korra quiero mas, mucho mas— dijo Asami con voz quebradiza — tus deseos son ordenes— emitió con dificultad sobre los labios carmesí levantándose sin bajar del cuerpo de quien la miraba con sus verdes ojos oscurecidos de placer. Se quito la camisa en un movimiento rápido y a la vez el brasier dejando a la vista unos grandes pechos morenos, redondos y evidentemente suaves. La pálida mujer extendió sus manos dándoles un masaje eufórico, apretando su pezones oscuros y sin poder contenerse elevo su torso para quedar a la misma altura depositando uno de los pechos en su boca, succiono, lamió y beso sin dejar de masajear el que no tenia atención para luego intercambiarlos en su boca —ahh ... Asami— gemía korra con los ojos cerrados mientras un suave hilo de saliva caía por su abdomen producto del trabajo realizado por la pelinegra la cual bajo su boca abandonando sus redondos y jugosos pechos para bajar con su lengua limpiando es derroche de saliva que escurría. Sin resistir mucho mas korra se separo abruptamente empujándole nuevamente de espaldas en el sofá dejando a una Asami un tanto preocupada —¿estas bi...— no alcanzo a terminar la pregunta cuando vio como su camisa era abierta haciendo saltar algunos botones, su brasier fue subido con rapidez y los labios de su ahora amante daban leves lamidas y mordiscos en sus blancos y suaves pechos. No lograba articular palabras ya que sus labios que aunque abiertos no emitían mas que leves gemidos de placer. Las manos de korra bajaron por sus glúteos mientras seguía el juego sensual sobre el abdomen de  Asami, aquellas manos bajaron por sus piernas y la morena cuanto agradecía aquel mini short. Encontró en botón y cierre de la prenda dejando entrar su mano que a estas alturas estaba caliente tanto o mas que ella misma. Sin mucho preámbulo entro directo bajo la ropa interior de la que ahora se retorcía de placer. Korra levanto la mirada logrando evidenciar la excitación de su compañera entregándole una sonrisa de medio lado mientras aun jugaba con su mano entre sus pliegues —estas muy húmeda, creo que puedo hacer de ti un rio— Asami no podía articular palabras aun pero con un gran esfuerzo detuvo la mano traviesa —espera... un poco...— dijo entrecortadamente alejándose del calor de la bella morena, levantándose con dificultad se quito lo que quedaba de sus prendas exponiéndose totalmente desnuda frente a los ojos atónitos y lujuriosos de aquella castaña que le hacia perder la cabeza, camino lentamente posando levemente su cuerpo sobre korra tomando los botones de sus jeans para bajarlos y quitarlos por completo. Ambas se admiraron de la otra para nuevamente fundirse en un beso ansioso, korra la acomodo sobre su cuerpo con las piernas abiertas mientras ella descansaba su espalda en el respaldo del sofá. Besos, mordiscos, lenguas danzantes por donde hubiese piel, el sudor que perlaba ambos cuerpos desnudos y finalmente los dedos de korra que se hicieron camino hasta en interior de su musa, un dedo, dos dedos y finalmente tres dedos que se hundían en embestidas suaves, profundas y aveces violentas, Asami aferrada a sus hombros escondiendo su cabeza en el cuello de korra, los jugos de la pelinegra bañaban los dedos de la otra y los jadeos se convertían en pequeños gritos pidiendo mas — Ko... ahhh... mas rápido ... ahhh— korra hacía caso y le daba embestidas firmes y rápidas mientras sus dedos eran succionados por las cálidas y suaves paredes del interior, sentía que en cualquier momento vendría el orgasmo pero quería que fuese algo especial. Bajando solo un poco la intensidad levanto el mentón de Asami con su mano libre —mírame, quiero que termines mirándome— fue casi una orden pero a la vez era una suplica, Asami obedeció mirando aquellos azules ojos que adoraba, la morena complacida continuo su trabajo con mas entusiasmo observando las expresiones de placer, como contraía el ceño e intentaba no cerrar sus ojos, las contracciones llegaron, los labios de Asami se separaron para dar un largo grito con el nombre de su amante en el, pero los labios de la morena se lo prohibieron llegando al orgasmo en medio de un beso desenfrenado donde solo se escuchaba la música de fondo en el local y un suave murmullo que se podía percibir solo entre ambas protagonistas de un reencuentro tan esperado — korra... te... te amo— desplomándose en los fuertes y cálidos brazos de su tal vez novia nuevamente....

Continuara...

Uyyy ya salio uno mas... cariños @CViteri y @MayraAVargas

Dolorosa Libertad (Korra X Asami)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora