Capítulo 1. Órden del Fenix

7.3K 353 29
                                    

Al día siguiente, Harry y yo nos levantamos los primeros y bajamos a la cocina a prepararle el desayuno a mis tíos, como todos los días
-Harry mira, es una carta- me agaché y cogí la carta del suelo- Desde el Ministerio de Magia les informamos a la señorita y al señor Potter que han usado la magia fuera de Hogwarts, por lo tanto tendrán su respectivo juicio para decidir si están fuera de Hogwarts o no. Vengan dentro de tres días al Ministerio y sabrán que haremos con ustedes. El ministro de magia- leí lo que ponía en la carta. Miré a Harry, el cual estaba en shock- Harry, qué haremos? No nos pueden echar
-Si nos echan estarán perdidos, así que por el bien del mundo mágico no nos expulsarán, no te preocupes- me sonrió de una manera tranquilizadora y cogió la carta entre sus manos. La guardó en la parte trasera de su pantalón justo antes de que tío Vernon bajara

Era por la noche, y Harry y yo estábamos en nuestra habitación
-____, escuchas esos ruidos?- preguntó Harry. Me asomé a la ventana y vi a Alastor, a Lupin y a unos cuantos más
-Chicos, bajad, os sacaremos de aquí- sonreí y miré a Harry
-Nos vamos de aquí- él también sonrió. Cogimos nuestros baúles, nuestras lechuzas y nuestras varitas y salimos por la ventana
-Lupin! Me alegra volver a verte- dije contenta. Él me sonrió de vuelta, nos montamos en las escobas con las que habían llegado aquí y pusimos rumbo a donde quisiera que nos llevaran

Llegamos a un edificio que estaba abandonado. Bajamos de las escobas y vimos que nuestros baúles ya habían llegado, al igual que nuestras lechuzas
-Para qué nos traéis aquí? No íbamos a la Madriguera de los Weasley?- pregunté curiosa
-Eres igual de curiosa que tu madre- dijo Lupin. Sonreí y esperé a que Alastor abriera la puerta para entrar. Estaba todo destrozado, pero se escuchaban voces al fondo del pasillo
-Podéis pasar, hay alguien que quiere veros- dijo Moody detrás nuestra. Harry y yo nos miramos y empezamos a caminar hacia aquella puerta. Podía distinguir las voces de Molly y de Arthur, pero había una tercera que no lograba recordar
-Sirius?- susurró Harry para sí mismo, pero aún así lo alcancé a oír. Sin pensármelo dos veces, abrí la puerta y sonreí ampliamente
-Sirius!- grité emocionada. Corrí hacia él y le di un gran abrazo, al igual que Harry
-Estáis tan mayores... y sois tan parecidos a vuestros padres...- dijo él sonriendo. Me dirigí hacia Molly y Arthur y les di otro gran abrazo
-Los chicos están arriba, subid. No os esperan aún- miré a Harry y este asintió con una sonrisa. Subimos haciendo el menor ruido posible y abrimos la primera puerta que vimos
-Chicos!- gritó Hermione emocionada. Nos abrazó a los dos tan fuerte que casi nos quedamos sin respiración
-Hermione, necesitamos respirar- dijo Harry. Hermione rió y nos soltó
-Ron... menos mal que te has cortado el pelo- reí y me tiré, literalmente, a abrazarlo. Él me recibió con gusto y noté como todas las miradas se posaban en nosotros. Me sonrojé al instante
-Y a mí no me saludas?- dijo Ginny haciéndose la ofendida. Me separé de Ron y abracé a mi amiga pelirroja
-Y a nosotros? No éramos tus gemelos favoritos?- dijeron Fred y George a la vez
-Y lo seguís siendo- me separé de Ginny y abracé a los dos gemelos
-Oye, prometisteis que íbais a escribir todas las semanas, pero solo nos llegó una carta. Por qué no volvisteis a escribir?- preguntó Harry con el ceño fruncido
-Lo explicamos en la carta. Los Mortífagos andan por ahí y no podíamos escribir mucho. No leíste la carta Harry?- dijo Hermione cruzando los brazos
-Harry estaba demasiado enfadado con vosotros como para leer nada que viniera de vosotros- contesté yo por Harry
-____, tú la leíste?- preguntó Ron
-Estaba preparando la comida para mis tíos y en el momento en el que vi la carta por debajo de la puerta me lancé literalmente a por ella- contesté riendo

-No va a funcionar- dijo Hermione viendo como Fred bajaba la oreja de goma hasta la puerta

-Tenemos que decírselo, ya no son unos niños- dijo Sirius

-Para mí siguen siendo unos niños, así que no se lo diremos- añadió Molly

-Si lo saben podrán protegerse, pero si no lo saben será muy difícil que lo logren- dijo esta vez Alastor
-Hermione, tu gato se está comiendo la oreja- dijo Ron riendo. Hermione bajó a regañarle a su gato y Harry y yo nos miramos
-Hay que decírselo a los demás- dije. Mi hermano asintió y miramos a nuestros amigos
-Venid con nosotros- dijo Harry. Bajamos y entramos a la sala en la que estaban los demás. Todos posaron sus ojos sobre nosotros
-Tenemos que hablar- dije mirando a Harry. Él sacó la carta del ministerio de su pantalón y la puso sobre la mesa. Sirius la leyó y nos miró
-Tenemos que decírselo Molly- la señora Weasley asintió y salió de la sala. Sirius nos pasó un periódico y Harry y yo lo leímos
-Por qué el ministro no se cree que haya vuelto?- pregunté
-Los Potter y Dumbledore mentirosos? Por qué nadie nos cree?- preguntó Harry, tratando de comprender todo
-El ministro tiene demasiado miedo como para asumir que quien ya sabéis haya vuelto, entonces os tacha de mentirosos- explicó Arthur
-En tres días iréis al Ministerio con Dumbledore y se aclarará todo, no os preocupéis- dijo Sirius dándonos un cálido abrazo

Subimos a la habitación junto a nuestros amigos
-Hermione, Ginny y ____ dormiréis en la habitación de al lado. Fred, George, Ron y Harry en esta, y sin rechistar- dijo Molly. Cogí mi baúl y me dirigí a la habitación que la señora Weasley había dicho junto a Hermione y Ginny. Dejé el baúl apartado, metí a la lechuza en su jaula y me puse mi pijama calentito
-Juntamos las camas?- preguntó Hermione
-Obvio Granger, eso ni se pregunta- contesté con una sonrisa. Ginny y yo juntamos nuestras camas a la de Hermione y nos tumbamos en estas
-Buenas noches Potter- dijeron Ginny y Hermione a la vez
-Buenas noches Weasley y Granger- dije provocando una pequeña risa por su parte. Me tapé con las mantas, cogí el medallón entre mis manos y me quedé profundamente dormida a los pocos minutos

La hermana de Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora