Capítulo 6 : Indiferencia

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Miguel

-Las 8:00, no sé por qué me levanto tan temprano en fin de semana...-No sé el motivo por el cual me levanto siempre tan temprano cuando no hay instituto, en fin, me iré a dormir... ¡Mierda, hoy no es fin de semana, es jueves!

Salí corriendo de la cama rumbo hacia la cocina. Ya me vestiré luego, lo importante es que desayune rápido, total solo tengo que ponerme el uniforme. Cuando llegué a la cocina estaba mi hermana, oh bien ahora que me acuerdo, Sandra no iba a dejar las cosas así, no después de lo que pasó ayer.

-Oh, contigo quería hablar yo.

-¿Conmigo? esto... yo tengo prisa y tal así que... ¡Tengo que irme!- cogí las tostadas un vaso de agua y subí a mi cuarto, al parecer eso de llevar las tostadas en la boca, estaba ocurriendo con demasiada frecuencia. Mientras subía oía a mi hermana gritándome cosas como, "esto no quedará así, cuando vuelvas hablaremos señorito" y tal. Me da igual pienso evadirla todo lo posible. No quiero hablar de eso.

Terminé de comer y me vestí. Bajé con cuidado las escaleras, no quería encontrarme con mi hermana, por suerte no estaba en la cocina, dejé las cosas, cogí mi mochila y me fui a casa de Ángela. 

Llamé al timbre y esperé a que saliera, pero no salió ella, salió su madre.

-Hola, ¿está Ángela?

-Ah, hola Miguel, lo siento pero Ángela esta enferma y no podrá ir hoy al instituto. 

-Ah... bueno, le traeré los apuntes de hoy, dígale de mi parte que se mejore- lo dije con una sonrisa sincera. 

-Muchas gracias, Ángela ha tenido suerte de conocerte- me devolvió la sonrisa y me fui.

Cuando llegué al instituto, vi a Paula con Alejandro, bien creo que hoy estaré sólo. Ya lo pasé bastante mal en el pasado por ese motivo. La verdad es que la soledad puede llegar a ser amargante y frustrante. Sé que sólo será hasta que se cure Ángela, pero tengo miedo de volver a pasar por lo mismo.

En fin, me dirigí a la puerta y entré en clase lo más rápido que pude, cuanto antes entre antes saldré, o eso espero...

No pude prestar demasiada atención a la clase de matemáticas, estar sólo me afligía por dentro y lo único que podía hacer para distraerme era dibujar, aunque se me diera fatal, pero incluso cinco palitos y un círculo te ayuda a despejarte.

A segunda hora tocaba Inglés, bueno, en esta asignatura tengo bastante nivel, no creo que pase nada por seguir dibujando. Cuando ya estaba terminándolo, vi que al lado mía se sentó alguien. Cuando alcé la cabeza, no me esperaba verla a mi lado.

-¿Miriam?

-¿Tan extraño es que me siente al lado tuyo?

-La verdad, sí.

-Bueno si te pones así me iré...

-No, no... da igual siéntate- no quería quedarme sólo otra vez.

-Por cierto... cuéntame sobre lo de ayer.

Al decir eso, me puse tan nervioso que me salí del borde. Pobre perro, ahora tiene una cicatriz en la cara.

-¿Qué es lo que pasó ayer que te tuviese que contar?

-No lo sé, por eso pregunto.

-No paso nada del otro mundo.

-Ah, ¿seguro? pues me he enterado de que engañaste al bobo de mi hermano para que te "salvara del agua". No sé cómo lo hiciste, pero te felicito, ojalá hubiera estado para verlo- y dicho esto nos empezamos a reír.

If only (yaoi/gay)Where stories live. Discover now