Please, Don't Forget (Link Y Tu) One-shots ||CANCELADO||

Por favor, dame una oportunidad...

Pd: básicamente es como maratón por la casi 8K! ¡Disfrutenlo!

Ganondorf, el cataclismo, acababa de despertar. Corrias rapimente detras de Link y Zelda, cuidando que ningun guardian los siguiera. Hace unos momentos tu amigos, el resto de los campeones, habian ido corriendo hacia las bestias divinas para tratar de luchar contra ganon.

Pero... lamentablemente habian sido derrotados por la furia de este. Ninguno de ellos habia sobrevivido...

Escuchaste un resbalon y notaste que Zelda se habia resbalado, no era sorpresa para ti ya que estaba lloviendo, te acercaste rapidamente a ella.

-Todo mi entrenamiento... todo para lo que he estudiado... ¡¿no ha sido para nada?! Mis amigos... todos... les falle...

Sin pensarlo dos veces, abrazaste a tu amiga mientras observabas a Link con cierta tristeza, a pesar de que el chico frente a ti siguiera tan callado como siempre. Notaste en sus ojos una pizca de preocupacion, y sabias por quien era, a quien le pertenecia.

Abarazaste a tu amiga, consolándote a ti misma en aquel abrazo también, tu corazón dolía por lo sentimientos que creías que el héroe sentía por esta. Aunque debías sentirte alegre, ¿cierto? Tu amiga seria feliz de saber que sus sentimientos serian correspondidos, entonces.... ¿porque te dolía tanto el pecho?

No podías pensar en eso, tenían que correr, escapar de regreso al castillo donde estarían seguros.

-¡Rápido, llévatela, yo tratare de de detener a los guardias lo mas que pueda!

Ya no te sorprendiste cuando Link tomo la mano Zelda y hecho a correr con ella, pero aun así el dolor no se disipo. Sujetaste algunas de las flechas ancestrales que traías en tu karkaj y apuntaste directo al ojo de la criatura extraña que se acercaba con rapidez.

Una vez terminado tu trabajo recogiste lo que pudiste para crear mas y saliste corriendo en la misma dirección que Link y Zelda. Tenias que alcanzarlos, pues el solo tenia la espada maestra y con eso no podría hacerles mucho.

-Mas si la princesa es básicamente una carga.

Te de tuviste un momento, no solo por tu comentario si no también por los monstruos que aparecieron de la nada rodeándote. Debido al enojo que tenias contigo misma de haber llamado así a tu amiga, a la cual habías visto esforzarse tanto por tanto tiempo, que mataste a todos los monstruos rápidamente y seguiste con tu camino, alcanzando a ambos.

Con lo que no contaste fue que aparecieras tres guardianes alistando sus rayos para atacarlos, sin pensarlo dos veces te pusiste en medio usando tus espadas para desviar los rayos. Mas eso no fue suficiente, tu fuerza no era suficiente, cuando te diste cuenta ya habías sido atravesada.

La sangre salia a borbotones de una gran herida en tu costado izquierdo. Cayendo de rodillas al suelo, sin embargo no te rendiste, con tus ultimas fuerzas apuntaste tres flechas que dieron en sus respectivos blanco, ganando algo de tiempo.

El grito desgarrador de Zelda aun sonaba en tu oídos, su llanto, sus lágrimas cayendo en tu rostro. Ella lloraba pero no solo por ti, Link también estaba cansado y no faltaba mucho para que el también sucumbiera ante sus heridas.

Link cayo, moribundo, lanzaste un grito y te arrastraste donde el ignorando la potente luz que emanaba detrás de ti. Te apoyaste contra el tratando de moverlo, de mantenerlo despierto.

-Tranquila, ______, esta bien. Siento mucho, no haber podido pasar tiempo contigo.

Sonreíste con tristeza, esta vez eras tu la que llorabas.

-No te... Preocupes... Vi en tus ojos lo que sentías...

Dijiste con dolor, el pareció no entenderte, Zelda por su parte no paraba de hablar con los sheikas.

-Vi como... La miras... Y no sabes cuanto dolía... Se lo que sentía Mipha por ti... Ya que yo... Sentía lo mismo...

Dijiste con dificultad te estabas desangrando.

-¿De que... Hablas? _____, creo... Que te equivocas...

Sonreiste mientras negabas, trajeron unas camillas para poder llevarlos a los santuarios.

-Te amo... Link, aun cuando... Tu nunca lo harás...

Link estiro su mano, queriendo decir algo, pero ya era tarde para eso. Te habías desmayado...

Siempre te amare, Link, así que por favor. Cuando nos volvamos a encontrar, dame una oportunidad.