Chapter 8

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Disclaimer: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen, son propiedad de J.K. Rowling. La historia tampoco me pertenece, esta pertenece a thecellarfloor y esta historia fue beteada por AliciaBlackM.

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—¿Te importaría explicarme que hacías a estas horas en el Área Restringida?

Hermione se puso tensa ante sus palabras. Caminaban juntos hacia la habitación de los Premios Anuales. Harry tenía su varita alzada, con una suave luz saliendo de la punta de esta. Hermione apresuró el paso, inconscientemente tratando de evadir su pregunta.

—Malfoy vino a la sala de Premios Anuales, sabes —escuchó la voz de Harry detrás de ella—. Le dije que no estabas allí y salió corriendo rápidamente cuando accidentalmente le dije que estabas en la biblioteca.

Entonces así fue como me encontró. Se dijo a sí misma.

Harry aceleró su paso y le bloqueó el camino.

—¿Y bien? —murmuró irritado.

Hermione cerró los ojos e inspiró profundamente. Lo mejor era decirle que era lo que había estado haciendo. Abrió sus ojos.

—Estaba investigando sobre el veneno Moonseed —dijo con calma.

Ni bien las palabras salieron de su boca, la expresión de Harry cambio a una de incredulidad.

—¿Otra vez con eso? — pregunto irritado—. ¡Déjalo ya, Hermione!

—¡No, Harry! ¡No lo voy a dejar! —gritó furiosa, ya había tenido suficiente—. No puedo simplemente dejarlo. ¡No voy a hacerlo!

Remarcó cada palabra para enfatizar su objetivo. Su agitada respiración hacía eco en el silencioso pasillo. Buscó las anotaciones que había hecho antes, de ser interrumpida por los Slytherin, sobre el Moonseed y prácticamente se los arrojó en la cara. Harry la miraba estupefacto.

Se inclinó para recoger los papeles casi al mismo tiempo en que Hermione pasaba por su lado, sin importarle si el chico los leía o no. Pero podía escuchar los pasos de Harry siguiéndola. Podía sentir las lágrimas asomándose en sus ojos nuevamente. No quería llorar frente a él. Ahora no, Hermione. Ahora no.

—¡Hermione, espera! —escuchó a Harry. La castaña se detuvo y se giró hacia él, incapaz de seguir controlando la ira.

—¿Qué? —Le dio un empujón en el pecho, pero su amigo solo se movió unos pocos centímetros. Volvió a empujarlo con más fuerza—. ¿Vas a volver a decirme que necesito descansar? ¿Vas a volver a decirme que termine con esto?

Harry la miraba ansioso, pero no dijo nada.

—¡No puedo olvidarlo Harry! ¡No puedo dormir! ¡No puedo cerrar mis ojos sin ver su rostro diciéndome lo mucho que me quería, lo mucho que nos quería! —Su visión se nubló por las lágrimas, ya no podía retenerlas. Sintió los brazos de Harry rodearla, sosteniéndola fuertemente.

—Solo desearía que todo esto fuera un sueño, ¡pero no lo es! ¡Es real! ¡Ya no está! Ya no- —Ni siquiera había notado que había estado golpeando su pecho, sacando todo afuera. Dejo que la frustración y la pena la consumieran.

No podía dejar de llorar.

—Lo escucho decir que nos quiere, ¡una y otra vez! Para luego volver a morir frente a mis ojos. ¡Y ni siquiera puedo hacer nada! —Se aferró con fuerza a la túnica de Harry cuando sintió sus piernas colapsar lentamente. Harry la alzó en brazos y eso solo la hizo sentirse enfadada consigo misma; por permitirse debilidad.

Sus hermosos y aterradores ojosTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon