U N O

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Primer mes.

Jungkook se encontraba muy nervioso caminando de un lado para el otro dentro del baño mientras frotaba sus manos o mordía sus labios en un intento fallido de tranquilizar sus nervios.

Cuando ya habían pasado los 10 minutos de espera necesarios fijó su vista en aquellos dos aparatos que lo mantenían nervioso desde que entró a la farmacia en busca de ellos.
Al tenerlos sobre sus manos suspira con los ojos cerrados, sentía su corazón latir fuerte sobre su pecho y como su piel tenía la sensación de arder donde éstos se encontraban. Poco a poco baja su mirada a esos test que decían nada más ni nada menos que positivo.

Abre sus ojos y su vista se pone borrosa debido a las crecientes lágrimas que de ellos salían, salta un chillido y del otro lado de la puerta escucha como la golpean.

– ¡Por favor, Jungkook~ necesito pasar!

El nombrado abre la puerta y salta a los brazos de su pareja.

– ¿Te encuentras bien? ¿Por qué lloras?– olvidándose de su emergencia abraza preocupado a su pareja consolandola.

– Jimin yo...– las manos del menor se aferraban en la camiseta del mayor y las lágrimas dejaban salpicada la tela– Jiminnie, tengo-tengo algo aquí– se aleja de su oreja y toma una de sus manos llevándola sobre su estómago.

– ¿Algo? ¿Te duele?– levanta la camiseta que el azabache llevaba para poder colar una de sus manos y acaricia la zona que creía que le dolía.

– N-no, no. No es un algo... es un alguien– sonríe con lagrimitas volviéndose a crear en sus ojos– estoy embarazado, amor.

Jimin asombrado se queda en blanco unos largos segundos procesando la noticia pero cuando reacciona abraza fuerte a Jungkook hundiendo su cabeza en el cuello del menor.

Eran pareja desde hace seis años y saber ahora que tendrán un hijo era realmente un sueño al imaginarse un pequeño corriendo lado a lado balbuceando cosas inentendibles. Un pequeño que sería parecido a Jungkook pero a la vez parecido a él.
Estaba exitado y eufórico. No lo podía creer.

Sin poder soportarlo su vista se nubló y sintió como si el piso tuviese un gran imán y su cuerpo fuese la carga que necesitaba para pegarse a él.
Sentía como su mente daba vueltas y se perdía, una punzada se hizo presente en su sien y la masajeó levemente. Tenía la sensación de que su cuerpo se movía de lado a lado, como si estuviese por desmayarse pero intentó mantener la calma por lo que sosteniéndose de los hombros de su novio respiró profundo volviendo a ver todo nítido como antes.

Y fue ahí, justo en ese momento en el que volvía a ver todo con claridad, cuando logró darse cuenta de las risitas que Jungkook soltaba al ver su reacción. Pero claro, cuando observó los oscuros ojos del pelinegro se podía ver claramente la alegría y el terror.

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Okay, hi!
Hace, MUCHO que no escribo algo, y sé que había prometido volver, he subido historias más las he vuelto a borrar y, no sé, no me siento bien con lo que consigo como resultado, pero no importa eso.
Hoy no puedo dormir, y para distraerme un poco terminaré esta historia que tengo guardada desde hace bastante.

No les aseguro que sea genial, pero un día de estos la editaré para que quede mejor, mientras, espero que les guste de todas formas :3

Las quiero, personitas <3

Only nine monthsWhere stories live. Discover now