Only nine months

O N C E

La cesárea ya había acabado.
Ya habían pasado muchas horas de su finalización y desde ese momento no volvieron a ver a sus hijos.
Ambos ya estaban al tanto de la situación de Jungkook como la de sus bebés.

Jungkook tenía prohibido hablar durante un día completo, debía evitar toser, o estornudar, además de hacer cualquier tipo de movimiento brusco que pueda llegar a abrir su herida y generar una hemorragia o infección.

Mientras, sus hijos, estaban en cuidados intensivos.
Ambos estaban en incubadoras ya que habían nacido prematuros.
Uno de ellos estaba sano, después de todo.
Pero el problema era con el otro bebé, el que ni Jungkook, ni Jimin, pudieron conocer. Este bebé, el que no había llegado a desarrollarse hacia un mes, el que cuando Jimin les hablaba al estómago era el que menos se movía, ese pequeño, se encontraba entre la vida y la muerte.

Por sus problemas de desarrollo tenía problemas en su corazón. Apenas dos minutos después de haber nacido, tuvo un paro cardíaco, el cual casi termina con su corta vida. Ese pequeño bebé, no sólo tenía problemas en el corazón, sino también auditivos. Ese pequeño inocente había nacido sin la posibilidad de escuchar la dulce voz de su padre Jungkook, sin la posibilidad de escuchar a su padre Jimin reír, sin la posibilidad de poder compartir secretos con su hermano. Ese pequeño bebé, había nacido sordo.