ERES MÍA, PRECIOSA. (I)

En la boca del lobo.

#Mía.

- ¡Eh! Mía te presento a Emma- dice Lili. Por fin conozco a la tal Emma, todos la han mencionado esta noche. No me extraña, es guapa, un poco más hippie que Lili y que yo, pero muy guapa.

- Encantada, Lili me ha hablado mucho de ti.

- ¿Sí? Espero que sea bueno. - Emma se ríe.

- Oye, ¿me acompañáis a por otra copa? - Dice Lili entusiasmada. Creo que está feliz, no sé si porque acaba de bailar con Ryan o porque por fin a encontrado a Emma pero me alegro de verla así.

- Voy contigo- dice Emma.

- Yo necesito ir al baño, ahora vuelvo. - Ambas asienten sonrientes. Vaya que chicas tan simpáticas, a mi madre le encantaría ver que ya tengo amigas y que se comportan como señoritas.

- ¡Te esperamos en la barra Mía! - grita Lili sobre la música. Levantó el pulgar en su dirección y las pierdo de vista. Intento avanzar entre la gente. Madre mía ¿En qué momento se ha llenado tanto este sitio? ¿Es que la gente no se lava?

Decido alejarme hacía los baños cuando veo la cola tan grande que había. De repente veo salir del baño a la rubia con la que había visto antes a Marcos. Ha salido limpiándose la boca con las manos y algo despeinada, pero no le doy importancia. No se la doy hasta que veo a Marcos salir un poco después algo agitado, y entonces lo entiendo todo. Le observo, pero él no me ve a mí, por suerte. Como si supiera lo que estoy pensando se gira y me ve, la atracción que siento por él es como un imán. ¡Oh Dios mío!¡Se está acercando!

-Hola, Mía ¿verdad? - me dice y yo me pongo algo nerviosa.

- Sí, esa soy yo. - Dios, ¿pero es que no tienes algo más tonto que decirle Mía?

-Emm... ¿Eres la novia de Dani?

- ¿Dani? ¿El chico de la bicicleta? - él asiente. - ¡No! Quiero decir, es un chico muy simpático, pero no es de mi estilo ¿sabes?

- ¿Y cómo son los de tu estilo? - Dios mío que no se me acerque más, que no se acerque más. Venga va Mía, es tu momento, solo es un tío.

-Me gustan más altos- le susurro sobre los labios y me voy contoneando las caderas. Todos me miran, espero que él también lo esté haciendo.

-Joder con la niña- le escucho decir y sonrío sin que me vea.

-Oye Lili, ¿Qué hay de ese chico? - le digo mientras bailamos.

- ¿Quién? ¿Marcos? - asiento. - Es guapo ¿eh? - ella ríe. - pero es un cabrón, se ha tirado a medio campus, y es normal. Quiero decir, el tipo sabe moverse bien en la cama. - me guiña un ojo. Sonrío por fuera, pero por dentro le tengo mucha envidia, lo cual es paranoico porque yo acabo de llegar a un campus donde él lleva mínimo cuatro años.

- ¿Te lo has tirado? ¿Te gusta? - No puedo evitar preguntarlo.

-Sí y no. Él no es un tío de relaciones serias ni nada de eso Mía, así que del sexo no pasó lo nuestro. ¿Por qué tanta pregunta? No me digas que te gusta.

-No, no sé. - Lili levanta una ceja- Es guapo, guapísimo.... pero mis padres me matarían si saliera con alguien como él.

- Y lo harían con toda la razón del mundo Mía. Te saca cuatro o casi cinco años, apenas se habla con su familia, ninguna tía acaba bien con él.

- ¿Por qué?

- Porque siempre se ha metido en problemas...

Llegamos las cinco de la madrugada a la habitación después de haber hecho mil locuras para que no nos pillara ningún rector ni nada por el estilo... Emma se había dormido de la borrachera y Lili no paraba de contarme lo bien que se lo había pasado con Ryan en los baños. Dios, estas chicas no se cortan ni un pelo. Y yo, yo...

- ¡Ay, Mía!¡No me puedo creer que Tomás te besara! ¡Es uno de los tíos más calientes que conozco! - Lili chillaba tanto al hablar que no sabía cómo Emma seguía dormida.

-Sí...es...guapo.

- ¿Guapo? ¿Estás de coña?

-Está bien, no me lo esperaba, pero estuvo bien. - En realidad casi no me doy cuenta ni de que me estaba besando, yo estaba tan inmersa bailando con él mientras miraba a Marcos que dejé de prestarle atención al chico cuando vi a Marcos marcharse y fue ahí cuando me besó.

-Si hubieras visto la cara de Dani. - dice Lili mientras se ríe. - Es que casi le pega y todo.

-Bueno, vamos a dormir ya ¿no? - Mierda, he sonado cortante. Lili no tiene la culpa de que yo esté hecha un lío.

- Oye, ¿Qué te pasa? Acabas de entrar en la universidad y tienes a dos de los tíos más guapos detrás de ti.

Tenía razón. Me estaba comportando como una cría.

-Ya, pero es que...

- ¿Qué pasa Mía? ¿Tienes novio y no lo has dicho o qué?

- ¿Crees que Marcos se podría fijar en alguien como yo? - Ya está. Ya se lo he dicho.

- ¡Ay! Mía... cualquiera se fijaría en ti. Eres muy guapa y tienes un buen cuerpo, además de que tu personalidad es superior a la de cualquier tía a la que él se tire. El problema es que él nunca ha estado con gente más pequeña que él... Es como una estúpida idea que ha tenido desde siempre en la cabeza, que alguien menor que él iba a ser incapaz de darle lo que quiere.

-Pero sí estuvo contigo que tienes mi edad...- ella asiente.

-Ya, pero lo nuestro fue hace mucho y ni duró. Marcos ha cambiado, ahora no sale con mujeres más pequeñas que él. En realidad, nunca lo ha hecho. Creo que yo fui la excepción porque siempre le pillaba en el momento y en el sitio oportuno. -suspira- Mira Mía, creo que, aunque ahora mismo seamos amigos, en su momento me utilizó. Y yo a él, no te voy a mentir. A día de hoy... ninguna mujer se debería sentir como un juguete.

-Pues yo quiero que se fije en mí- le digo convencida.

-Te vas a meter en la boca del lobo... pero tú misma. Yo seguiré estando aquí- Le sonrío.

-Gracias Li.