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|Jung Kook|

—Fue divertido —dice, Yongsun dejándose caer sobre el sofá.

—Si. Creo que no me había divertido tanto en mi vida —respondo, repitiendo su acto.

—Mentiroso. Seguramente antes hacías otras cosas que te divertían más.

Sé perfectamente a lo que se refiere.

—Pasado pisado, Linda —digo, acercándome a ella— No hay nada más divertido que estar contigo.

Uno al fin mis labios a los contrarios en un beso lento, que poco a poco se vuelve más intenso.

Ella abre sus labios dejándome introducir mi lengua en su cavidad bucal, mientras que mis manos dan suaves caricias a sus muslos.

—Ju-Jungkook —gime.

Y aquel pequeño detalle hace que actúe desesperado por más.

Sin pensarlo subo su cuerpo sobre mi regazo y paso mis manos por bajo de su falda llegando a su trasero.

—Jung-Jungkook...

—¿Quieres que me detenga? —pregunto, intentando recuperar el aire— Anda nena, solo dilo —susurro, sobre su cuello.

—N-No. No te detengas.

Le regalo una sonrisa y ahora llevo mis manos a su cinturón, el cual a los segundos termina en algún lugar de la estancia. Continuo deshaciéndome de su ropa superior hasta dejarla solo en sujetador.

Demasiado sexy para un rostro tan adorable.

Joder, incluso en un momento como este ella luce inocente.

Tomo sus labios entre los mios nuevamente y me pongo de pie con ella sobre mi. Camino con mucho cuidado hacia las escaleras y subo también de la misma manera.

Cuando entramos a mi habitación, ella toma mi rostro entre su manos y continua besándome, solo que esta vez de una manera que ni yo mismo puedo explicar. Algo así como lento, excitante, pero a la vez tierno.

Dejo que su espalda choque contra el colchón y permanezco sobre ella para luego comenzar a repartir besos desde sus labios hasta su abdomen.

—Es-Espera... —habla, con voz agitada— Eso... no bajes más, es... es penoso.

No presto atención a sus palabras y continúo repartiendo besos en el mismo lugar.

Su piel se siente bastante suave, muy suave, tiene un perfume único que estoy seguro atraparía a cualquiera, y sus senos... ni siquiera he quitado el sujetador y puedo asegurar a que son perfectos.

Me quito mi camiseta y la lanzo al suelo, seguido subo sobre ella poniendo mis manos a sus costados para no hacer peso, y vuelvo a capturar sus labios.

Intento mantenerme con una sola mano y bajo lentamente la otra a la cremallera de su falda. Me deshago de esta y también de las demás prendas para luego apreciar su cuerpo.

—No me mires así —pide.

Claro, como si fuese a cumplir su petición.

Con tal belleza frente a mi, por supuesto que no cumpliré.

—Pides algo imposible —respondo, adueñándome de sus labios una vez más.

Entre besos y caricias, comienzo a tocar su intimidad causando que pequeños gemidos escapen de sus labios. Suficientes para que una erección crezca dentro de mi pantalón.

Me aparto un momento para quitarme rápidamente el pantalón junto con el bóxer y vuelvo a lo que estaba.

—Jungk- ah~ —antes de que pudiese decir palabra yo ya me encontraba acariciando sus senos.

Save Me ; jeon jungkookWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu