24. Confronted

320K 44.6K 17.2K
                                    

"La dominación de la naturaleza conduce a la dominación de la naturaleza humana."

-Edward Abbey.

✣Capítulo XXIV✣

Mi cabeza palpita dolorosamente cuando me despierto, mis extremidades se siente débiles y frágiles, estoy atontada y confundida.

Abro los ojos lentamente pero solo veo oscuridad, tengo una venda sobre mis ojos. Trato de mover mis manos pero las encuentro inmovilizadas. Estoy sentada con la espalda contra una pared. El metal frío muerde la piel de mis muñecas y tobillos, estoy encadenada a la pared, no puedo moverme mucho y me duele todo el cuerpo. Se que estoy demasiado débil, necesito alimentarme.

Olfateo y arrugo mi nariz con disgusto. El lugar huele a madera vieja y excremento de ratas. Afortunadamente, no siento a nadie a mi alrededor. Recuerdo la pelea, Aidan, mi desmayo.

Necesito salir de aquí.

Concentro mi fuerza restante en quitar las cadenas, pero no funciona. Su metal es grueso y fuerte.

—¡Maldita sea!— La impotencia corre libre a través de mí. Se supone que soy el purificador del mundo y no puedo con unas simples cadenas. 

Me quedo quieta cuando una presencia entra en la habitación. Tan pronto como su aroma toca mi nariz, dejo de respirar. Conozco muy bien ese olor.

—Veo que estás despierta,— su voz es tranquila, ligeramente teñida de diversión, como de costumbre.

—Byron.— su nombre deja mis labios en un susurro.

—Hola, Morgan. Ha pasado tanto tiempo.

—¿Qué diablos quieres?— Pregunto con franqueza, tratando de ocultar mi miedo, él me aterra, Byron es peligroso y yo estoy vulnerable.

—Sabes, sabía que eras diferente,— hace una pausa, acercándose, —Pero nunca pensé que fueras el Purificador,— suelta una risa, —Pensé que eso era un mito, ya sabes, historias que cuentan para asustarte cuando estás creciendo, 'Se bueno o morirás en la Purificación'— Trago nerviosamente, esto no es bueno ¿Cómo sabe lo que soy?

—¿Vas a matarme?

—¿Matarte?— pregunta y luego se ríe, —No, matarte no es suficiente.

—Entonces, ¿Qué quieres de mí?— él está más cerca, puedo sentirlo, mis cadenas hacen ruido cuando trato de alejarme.

—Esa es una pregunta muy importante, ¿no crees?— Su mano acaricia mi rostro suavemente. Giro la cabeza para evitar el contacto. —Eres muy buscada, Morgan. ¿Tienes idea de cuántos Purasangre intentan encontrarte?— No respondo, su fría mano agarra mi barbilla y gira mi cabeza hacia él, —Tú vas a conseguirme todo el poder que necesito para convertirme en un conocido vampiro de Purasangre. Voy a ser reconocido y respetado como el Purasangre que encontró y entregó el Purificador.— su aliento está sobre mi cara —Además, te extrañé.— su mano libre acaricia mi brazo.

—No me toques.— espeto con amargura.

—¿Qué acabas de decir?— él me agarra del pelo, obligándome a levantarme, y me estampa contra la pared, retengo mis lágrimas. Él no me verá llorar... no de nuevo. Siento sus labios en mi cuello; su lengua lame mi piel, —¿Y si terminamos lo que comenzamos la otra noche? ¿Eh?— Sus dedos trazan la piel desnuda de mis muslos. Me hace sentir enferma.

—No...— Lucho contra mis cadenas, no dejaré que me haga daño de nuevo, aún tengo pesadillas sobre la noche en la que me atacó y me dejó mordidas por todo el cuerpo.

La Revelación (Almas Perdidas I) [En librerías]✔️Where stories live. Discover now