PROHIBIDO | Lesbian © (TERMINADA)

#60 Paratimia

Rose's POV

Voy a 80 Mph por la salida de WeiBull, y sigo acelerando, siento que mi corazón ya no está latiendo y me congelo lentamente con el aire frío.

Cualquier cosa, un bache, un pequeño hueco en la carretera, un perro, una diminuta piedra podría aparecer en mi camino y lanzarme a la mierda, pero deseo dejar de ver ese bosque de pinos lo más pronto posible.

No quiero recordar la calidez del frío porque muero lentamente, ya no tengo nada.

Llego a la autopista en tiempo récord, me detengo para respirar, quiero llorar, sinceramente tengo un nudo en mi garganta, me duelen las manos, mi cuerpo está adormecido y me encantaría gritar, respiro agitadamente sobre la moto, abro la boca porque el aire por mi nariz ya no es suficiente, me la tapo ya que es demasiado incontrolable, no sé porque las lágrimas no salen aunque me siento terriblemente triste.

Me arden los ojos, vuelvo a cerrar la boca pero en el acto me muerdo la mano, me arde, siento que estoy teniendo un colapso, una crisis mental.

¿Qué me sucede? No lo entiendo, me duele la cabeza... Entonces cierro los ojos y me intento calmar, vuelvo a respirar por la nariz ¿Que fue eso?

Apoyo mi frente en la direccional de la moto durante unos minutos mientras me tranquilizo, hasta que siento como el tablero de kilómetraje me deja una marca no levanto el rostro.

Vuelvo a arrancar, que diablos pasa conmigo, parece que en cualquier momento fuera a enloquecer.

Conduzco por la ruta, había estimado que llegaría a California pasado mañana pero al ritmo que voy y con el dolor de cabeza que me va a matar no sé si lo lograré.

Me encantaría decir que ya todo está solucionado pero mi único pensamiento es Skyler, me siento tan espantosamente mal, ¿Que he hecho? ¿Que sucede conmigo? Vuelvo a preguntarme, pero sigo sin poder llorar, no lo entiendo, no entiendo lo que me pasa.

Cada vez que acelero, cada curva que doy siento como si mi cuerpo progresivamente intentara tomar control sobre mi mente, como si ya no me pertenecieran mis articulaciones, lo único que puedo sentir aparte de que soy una estúpida es miedo a morir literalmente.

Entonces veo una gasolinera, decido determe, entro a la calzada y por alguna razón olvido meter el embrague entonces mi moto se apaga, me siento estúpida, vuelvo a intentar encerderla pero no muevo el cambio entonces da un brinco... Malditasea, conduzco desde que me conozco y ahora no sé usar el puto embrague.

Entonces vuelvo a hacer todo el debido proceso y la moto ya no enciende, me dan ganas de tirarlo todo a la mierda, pero sólo me quito el casco y vuelvo a pasarme las manos por la cara para calmarme.

— ¿Necesitas ayuda? — casi doy un salto espatada cuando escucho la voz de Howard.

Miro hacia esa dirección, de repente me entran muchísimos nervios, sí es él, en un camioneta de dos cabinas muy larga también dentro de la calsada, ¿Acaso me estaba siguiendo?

— ¿Que haces aquí? — pregunto acusadora.

— También voy a California — usa un tono poco sugerente.

— No te pedí que me hicieras compañía.

Ya le había contado sobre esto.

— Tranquila, conservo distancia, no notarás mi presencia — dice y conduce hasta el suministro de gasolina.

Pongo los ojos en blanco, llevo rodando mi moto hasta la pequeña tiendita, entro a ella y busco mentas y alguna pastilla para la migraña.

Cuando estoy pagando escucho nuevamente a Howard cerca mío.