MI ESCLAVA ||Jelsa||

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Te encontré pequeña esclava.- dijo el peliplateado con una sonrisa sádica, mientras agarraba el brazo de Elsa quien lloraba y pedía perdón mientras que aquél hombre con sus manos ensangrentadas, pone un dedo en aquellos labios rojos para callar a su pequeña esclava.- shhh no llores, ella no me dejaba encontrarte y tuve que matar a todo aquel que se pudiera en medio.- empezó a reírse mientras ahorcaba a la señorita Elsa quien poco poco se desmayó.

Narra Elsa

Me levanté de la cama casi gritando mientras mi respiración estaba muy agitada y gotas de sudor caían hacia las sábanas blancas, aquel sueño parecía tan real, tan horrible, ¿Quién es Jack Frost? Realmente jamás llegue a conocerlo, solo conocía el 3% de el.

Hiccup abrió la puerta y yo solo lo mire mientras lloraba.

Que pasa Elsa?.- dijo asustado y después se acercó a la cama.- estás sudando ¿Acaso tienes calentura?.- puso su mano en mi frente y después negó y yo solo sonreí aunque mis lágrimas no paraban de salir.

Tuve una pesadilla.- dije mientras limpiaba mis lágrimas.- solo eso.- lo mire y después me arme de valor, está vez quería saber quién era el.- sé que son las puras madrugadas pero ¡Háblame de Jack!

Te diré una cosa pero esto se quedará entre nosotros.- bajo la mirada.- Jack es mi medio hermano. Lo escuché por accidente cuando mi madre estaba en una llamada, escuché que fue violada y el rostro de Jack le recordaba aquél hombre que le desgracio la vida.- se levanta de la cama y se va dejándome en mi habitación.
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Narradora
Muchos Años atrás

Una hermosa peliblanca estaba agotada después del parto natural de uno de sus hijos.
Su cabello era blanco y sus ojos eran tan azules y hermosos sin embargo aquella madre lo rechazó al instante que lo vió, por que ella había sido violada y ese hijo no llevaba la sangre Frost si no de otra persona...
Ella jamás dijo nada por qué sabrían el secreto que guardaba.
Aquella señora no era pura e inocente como la gente lo imaginaba, si no que era una señora que le gustaba estar con hombre tras hombre, ya que el típico matrimonio empezó a estar en la cuerda floja.
Ella para sentirse satisfecha consigo mismo lo hacía cada vez que su esposo se iba a trabajar y ella quedaba sola con su hijo primero Hiccup Frost que tan solo era un bebé y no había tanto problema de que se enterará pero cuando ella rechazó por primera vez a un hombre tan apuesto, fue su perdición.

Era alto, su cabello era platinado y con unos ojos tan encantadores que hacía que cualquier mujer se rindiera a primera vista pero ella jamás tuvo interés de acostarse con aquel hombre, quien siempre se decía que aquel hombre platinado siempre conseguía a cualquiera que le interesara pero el era un caso serio, cuando terminaba de violarla las mataba de una manera horrible. Era llamado Norte por aquellos rumores, el jamás embarazada a ninguna mujer solo una vez dejo embarazada a la señorita Haddock (esposa del señor Frost) quien tras violarla de una manera brutalmente, la dejo vivir pero si se atrevía a decir una palabra su teatro de chica buena se iría abajo.

Cuando tuvo a Jack ella lo negaba, lo odiaba, el era un error. Cuando paso el tiempo aquella mujer decidió acercarse a su hijo menor Jack pero cuando lo miraba era como si viera aquel hombre que le desgracio la vida, ella aguantaba, incluso finjia  que Jack era un Frost y todo para guardar el secreto de que ella se acostaba con cualquiera.

Jack empezó a crecer, sin embargo no tenía tanta comunicación con su madre o con su hermano Hiccup ya que ella odiaba que ambos hermanos estuvieran juntos.

Jack jamás odio a su madre hasta que un suceso le rompió el corazón de este chico.

Mira hijo.- señaló el piano que estaba en un una habitación blanca.- vez ese piano? Sabes antes a quien le gustaba tocarlo.- dijo la mujer peliblanca mientras le decía a su hijo menor.- a tu padre.- dijo y hizo los ojos en blanco sin que el niño de ojos azules lo viera.-  quieres intentar tocar para tus padres.- sonrió pero por dentro ella quería acabar con la vida de ese niño.

Jack empezó a crecer, el pensaba que su madre ya no lo rechazaba y que por fin lo quería, le dio una oportunidad ya que era su madre, la madre quien le había dado la vida

madre.- dijo con una inmensa sonrisa.- quiero que escuches estas notas.- el niño empezó a tocar sin embargo la madre al escuchar la música abrió los ojos como plato, al escuchar la canción de boda de ella y el señor frost.

Quién te dijo que esa fue la canción de mi boda.- gritó mientras se levantaba de golpe.

Mi padre me dijo que esa canción te alegraba así que quería tocarla para ti, para que me sonrieras como lo haces con hiccup.- bajo la mirada y la madre avanza hacia el y le da una fuerte bofetada haciendo que el niño caiga.

Tu no tienes el derecho de tocar la canción de mi boda!!!.- gritó mientras se apretaba la mano.- tú nunca debiste de haber nacido!!! Nunca me gustaba escucharte tocar el piano! Eres un desgraciado! Eres igual que tú... Ojalá no fueras mi hijo!.- se dio la vuelta.- tú no eres un Frost y por eso no debo darte mis sonrisas hacia un niño vulgar.

La señora frost salió enojada, sin embargo Jack quien estaba tirado golpeó el piso y rápidamente empezó a tirar aquellas hojas que traían unas notas musicales con unas hermosas canciones y todas hechas para su madre y para Rapunzel una de las chica que se había enamorado en su colegio.

Los días pasaron muy rápido sin embargo Jack quedó atrapado en el tiempo, sus manecillas se habían detenido a la hora de que su madre le dijo aquellas palabras hiriente, el prefería que su madre lo golpeara a que le dijera esas cosas horribles.

"Los golpes duelen unos minutos y desaparecen pero unas palabras hieren toda la vida"