Nuestro Secreto - Chriserick (Primera Parte)

Capítulo 34

- Llevamos casi diez minutos aquí y siguen sin decir nada.

- Pero si ya nos viste, que caso tiene que te lo expliquemos - respondió Christopher.

- Vélez ponte serio - pidió.

- ¿Tendremos problemas por esto? - al fin pude hablar, los nervios no me dejaban hacerlo.

- Depende.

- Como que depende - no estaba entendiendo nada.

- ¿Ustedes son algo o anduvieron de curiosos solamente?

- Renato no tenemos nada - mintió y eso lo sentí como un golpe bajo - como vamos a tener algo, solo fue curiosidad y nos encontraste. Ya está.

- Ustedes leyeron perfectamente sus contratos, no voy a entrar a explicarlo de nuevo porque sería perder tiempo.

- ¿Entonces? - hablé.

- Yo no diré nada de esto, se quedará entre nosotros. Si tu Erick quieres contarle a tu madre está en tus manos, yo no me meteré en eso, los chicos tampoco sabrán y mucho menos la gente que trabaja con ustedes. Solo con una condición - pidió.

- ¿Cuál? - dijimos ambos al mismo tiempo.

- Que esto no vuelva a ocurrir, que si tienen o tuvieron algo quede totalmente atrás. Están arriesgando mucho. No los obligaré a nada, ustedes deciden.

- Claro que sí, dalo por seguro al menos de mi parte - respondió. Levanté mi mirada y la posé en él totalmente confundido, ¿así de fácil iba a dejar todo?

- ¿Erick?

Levantó su mirada para verme, hizo un intento de gesto disimulado para que responda que sí. Aún no podía creer que todo esté terminando así.

- Sí, claro no volverá a pasar - terminé por ceder.

- Claramente las cosas cambiarán para ustedes, los tendré muy bien vigilados eso ténganlo claro.

Estaba callado sin decir nada. Christopher se veía bastante tranquilo y si estaba fingiendo lo estaba haciendo bastante bien.

- Cuando salgan cierren bien, supongo que quieren hablar - tomó su chamarra y salió.

Hubo un silencio bastante incómodo, no era para menos con esto que acababa de pasar. No sé si me dolía más que nos hayan encontrado o que para Christopher terminar con esto era tan fácil mientras yo por dentro estaba ahogado con los sentimientos.

- Erick... - intentó tomar mis mejillas pero lo quité.

- No sé como pude perder mi tiempo contigo - dije con algo de rabia y pena.

- No me digas eso - pidió.

- Huiste - fije mi mirada en él - huiste y no te importó que era lo que pensaba yo, siempre pensando en ti, en lo que a Christopher Vélez le conviene - me puse de pie para intentar relajarme.

- Nos conviene, nosotros vivimos de esto y es lo que nos gusta hacer - intentó acercarse - siempre luchamos por esto, para nuestras familias.

- Pero podíamos seguir fingiendo o al menos pudiste interesarte en lo que yo quería también.

- Yo siempre te voy a querer Erick - me abrazó sin yo corresponder a su abrazo - siempre serás mi primer y único hombre en la vida.

- Te creía más valiente, que pena que todo haya terminado así - lo aparté de mi para intentar salir pero lo impidió - no te dejaré de querer así como así, pero ahora solo seremos amigos o al menos intentar serlo por el bien de todos.

- ¿Puedo darte un último beso? Por favor es lo único que te pido y te dejo ir.

Asentí con algo de pena. Se acercó a mi algo tímido pegando su frente con la mía, sentir su respiración aceleraba mis latidos, sus manos recorrían mis mejillas. Esto estaba siendo bastante difícil.

Juntamos nuestros labios deseosos el uno del otro, sería quizás la última vez que estemos en una instancia así, ahora ya no éramos nada y a medida que avanzaba el beso me dolía más dejarlo.

Terminamos el beso hasta que nos faltó el aire, lo miré a los ojos y le di una pequeña sonrisa para irme, todo había acabado.