Save by Jisoos (JIHAN)

Fin

Luego de todo aquello, Joshua le parecía uno de los hombres más varoniles y geniales que había conocido, pues, a pesar de parecer un niño de iglesia, aquel hombre se hirió los nudillos golpeando a los chicos malos que se metieron con su actual pareja. Nunca se lo habría imaginado.

- Déjame mimarte, bebe – Con suavidad paso sus manos por las hebras negras de su amante, acariciando con sus pulgares las orejas de este, quien algo avergonzado asintió. Joshua se quito de encima de Jeonghan para quedarse sentado en la orilla de la cama, observando atentamente los movimientos del otro.

El castaño, si bien podía dejarse dominar por ese hombre que siempre superaba sus expectativas, tenia ganas de tenerlo bajo su merced. Jisoo es alguien que siempre se encarga de ayudar y hacer felices a otros, pero suele ser atentando contra sus propios intereses o salud. Al fin alguien se encargaría de cuidarlo y darle amor como se debe, sin restricciones. Ahora era el turno de Joshua para relajarse y dejarse querer.

Se puso de pie para desabotonar su camisa y quitarse la corbata ya media desajustada, para finalmente centrarse en su pareja que esperaba sentado, comiéndoselo con la mirada.

Con lentitud se acerco para tomarlo por sus mejillas y besar esos hermosos labios de tal manera que su lengua acariciara cada parte. Con una mano, empezó a desabotonar la camisa gris del americano, en donde al poco rato ya se la estaba quitando. Las grandes manos contrarias lo tomaron de la cadera, invitándolo a sentarse sobre él, pero se alejo ante aquello.

- No, bebe, se paciente – Murmuro sobre los labios ajenos, los cuales soltaron un gemido ante la presión que el castaño hizo con su rodilla en la entrepierna del otro.

Luego de un profundo y largo beso, Jeonghan se agacho para desabrochar el cierre y con la ayuda del otro, quitarle el pantalón que le hacía ver tan bien. Para no dejar solo al americano en ropa interior, empezó a quitarse en su totalidad lo que aun vestía, bajo los hambrientos ojos felinos del americano, quedando al final en las mismas condiciones.

- Eres tan perfecto que pareces irreal – Susurro con fascinación y excitación Jisoo, recibiendo a cambio una divertida sonrisa. El castaño deslizo unos dedos por sobre la tela de la ropa interior del contrario, notando como temblaba bajo su tacto esa erección, sumado a un ahogado jadeo de Joshua.

- Eres tan dulce... - La lujuria se reflejaba en su tono de voz. Sin más, tomo la orilla de la ropa interior para empezar a quitarla, a lo que medio avergonzado, cedió el otro, hasta finalmente quedar como dios los creo.

Nuevamente se agacho para estar de frente a ese erecto miembro, el cual empezó a masturbar con su mano en un inicio de forma lenta y tortuosa para luego a una más rápida, bombeando aquella cálida extensión. Al poco rato al notar e liquido pre seminal, uso su propia boca, pasando su lengua a lo largo de toda la extensión y dejando una suave mordida en el glande, sacándole un fuerte gemido al americano. Sintió como la mano de su pareja se apoyaba en su cabeza para empujarlo al ritmo que este quería.

Noto cuan errática estaba la respiración del pelinegro, quien entre jadeos parecía querer hablar pero la excitación le impedía, pero Jeonghan comprendía que tenía intención de decirle, así que no se sorprendió cuando se corrió en su boca. Le incomodo un poco y le demoro tragarse todo, pero no le había disgustado.

- L-Lo siento Hannie – Murmuro apenado además de avergonzado el que seguía sentado en la cama, ocultando su cara con sus manos, causándole total ternura al coreano. A pesar de aquel destello de ternura, la lujuria era mayor, así que rápidamente se quitó su propia ropa interior para luego empujar por lo hombros a Jisoo para que quedara recostado en la cama, con Jeonghan sobre él.