The proposal [Johnkun]

Parte 3

Corrió de un lugar a otro, llevando papeles hablando por teléfono, contestando los insistentes mensajes de su familia y buscando a Johnny por cada parte que se metía. Paro de correr cuando uno de los jefes lo llamó pidiendo ver a Johnny, alzó  ambas cejas pensando en lo que los jefes querían con su jefe, se encogió de hombros restándole importancia antes de salir a buscarlo.

—BaekHyun, ya me habías dicho que si lo harías, no puedes venir... —Kun llegó justo cuando hablaba por teléfono, Johnny lo miro alzando ambas cejas sin despegar su teléfono de su oreja. — Lo necesitan los jefes hyung —Johnny corto la llamada a los segundos para alzarse sin sentir miedo en ningún momento, caminando con paso decidido siendo seguido por su asistente hasta la puerta de los jefes.

— ¿Me llamaron? —Preguntó con toda la personalidad avasalladora que tenía, sonriendo casi imperceptiblemente a sus jefes.

— Si bueno, Johnny ¿Recuerdas que debías arreglar tu asunto de la visa?¿Que no tenías que ir a la conferencia en Japón el fin de semana pasado? ¿Qué tenías que quedarte en casa? —Johnny asintió a cada una de las preguntas sintiendo de repente el pánico llegarle a la punta de los dedos, Kun por su parte miraba todo curioso sin entender bien de qué hablaban sus superiores. Por lo que él sabía Johnny era de Canadá y sí tenía una visa por trabajo en China, pero siempre la renovaba sin retraso.—Bueno vino el tipo encargado, porque se te quito la visa y deberás volver a Canadá dentro de una semana, sabes que no queremos perderte pero hablamos sobre esto Johnny, tenías que quedarte aqu...

— ¡Señor! Pero si no iba, perderíamos uno de los reportajes más importantes ¿No hay nada que pueda hacer? Por favor —Kun abrió su boca asombrado al escuchar como Johnny pedía por favor haciendo que un pequeño sonido saliera de su boca, debía estar muy desesperado para recurrir a eso. Johnny estaba nervioso, no quería irse, tenía que buscar la forma de quedarse y al escuchar a su pequeño asistente giro su rostro con una sonrisa tan grande como nunca ninguno de ahí había visto.— Señor con Kun nos vamos a casar, no puede ser posible que yo me vaya.

—Kun, chico... ¿Eso es real? —El hombre mayor miro a Kun que terminó frunciendo el ceño al no encontrar lógica a lo que decía Johnny, miro al hombre asintiendo con suavidad como si al decir que no le llegarán los peores castigos de su vida, a los segundos sintió los aplausos de ambos jefes ahí.— Genial ¡Felicidades! Ahora no perderemos al mejor editor del lugar y tendremos una boda.