Nuevα mαnαdα ☆ | ¡kooktae! [EN CORRECCIÓN]

•¿Un lobo negro?•

Narra Taehyung

Bip Bip Bip.

Como odio ese maldito momento en que la alarma del móvil suena para anunciar un nuevo día. Otro día más en un lugar que no conozco, ya que no tengo un sitio en donde vivir o estar, hace unos años vivía con mi familia pero eso de la noche a la mañana cambió.

Cuando un hombre asesinó a toda mi familia, no se por qué, ni quién era aquel hombre, pero en aquel momento lo único que pude hacer era correr por salvar mi vida.

Desde ese día soy un lobo solitario, literalmente.

Soy el hijo del Alfa de la manada de los lobos Blancos, mi manada se llamaba La luna blanca de cristal. Ahora solo soy un lobo sin nadie, toda la manada fue masacrada y yo fui el único sobreviviente.

Mi nombre es Kim Taehyung, tengo diecisiete años, mido un metro setenta, cabello castaño claro, ojos marrones oscuros, piel morena.

Buena hora de irse de este sitio moribundo.

Tomé mis cosas que la verdad, no son muchas, al salir a la fría calle dirigí mi mirada a mi alrededor, no hay mucha cosa ya que estoy a mitad de la nada y dormí en una casucha media destrozada.

Voy por un camino, ¿Dirección?, no tengo idea, pero no me importa, a algún sitio llegaré.

(...)

Llevo unas tres horas caminando más o menos y solo hay árboles y más árboles, sigo caminando.

Miro en mi mochila, en la cual tengo algo de carne seca y un poco de pan seco y duro. No tengo de otra, es eso o no como nada y creo que mi estómago ya ha tomado una decisión por mi porque ruge como un león, no me lo pienso dos veces y empiezo a comer.

A mi alrededor puedo escuchar a los pájaros cantar y el andar de un pequeño riachuelo, eso me relaja un poco.

Después de unos minutos pude seguir con mi camino, por mi cabeza pasó la idea de ir en busca de ese riachuelo por un poco de agua.

Camino observando todo lo que me rodea, una vez en el riachuelo, bebo un poco de agua y me siento debajo de un árbol buscando un tiempo para poder relajarme, poco a poco con toda la tranquilidad que hay, me voy durmiendo.

(...)

Bip Bip Bip.

Ese sonido me despierta, toco mi bolsillo y tomo mi móvil que me esta avisando que sólo tiene un 5% de bateria y que en nada se apagará, miro la hora, son las 5 de la tarde ya, justo en ese momento, el móvil se apaga, genial, necesito un lugar donde dormir y algo para cenar.

Al girar mi cabeza a lo lejos puedo divisar un lobo, un lobo totalmente negro, no me doy cuenta cuando ya estoy caminando hacia él. Soy sigiloso, sé perfectamente que si me ve me atacaría por invadir su territorio, pero es un lobo, y negro, he oído hablar de estos maravillosos lobos, mi madre siempre decía que son increíbles y muy diferentes a nosotros, los blancos.

Sin darme cuenta ya estaba casi tocando al lobo, cuando otro lobo se me tiró arriba, eso quería decir que no estaba solo y los lobos van en manadas, lo cual era malo para mi, estoy en territorio enemigo y solo.

Ellos son seguro guerreros y están en manada.

El lobo se me puso a gruñir, eso no era nada bueno, me estaba avisando de su ataque, como si nada se lanzo a atacar, como pude lo esquivé. Otro lobo mucho mas grande que el que me atacó se puso frente a mi.

—¿Puedes oírme?—pude escuchar en mi cabeza.

—¿Qué mierda?—el lobo me estaba hablando o era imaginación mía.

—¿Puedes oírme?, ¿Sí o no?—escuché en mi cabeza nuevamente.

—Dios, debo de estar enloqueciendo, oigo voces en mi cabeza ya—sin querer solté en voz alta.

El lobo que se puso delante de mi y como si nada volvió a su forma original, mostrándose como un hombre de unos 40 años.

—No estás loco, si puedes oírme en tu cabeza significa que eres un ser sobrenatural, ahora solo dime quién eres.

—Yo...¿por qué demonios debería hablar contigo de lo que soy o dejo de ser?—no pude evitar decir esas palabras.

—Bueno, estás en mi territorio y estás rodeado por mi manada—ese hombre era un Alfa, estaba más que claro.

—Así que eres el Alfa de esta manada, hace mucho no veo una.

El hombre se acercó más a mi.
—Dime de una maldita vez quién eres, ¿Y que pretendías hacerle a mi hijo?— así que el lobo de antes es el hijo del Alfa.

—La verdad nunca había visto un lobo negro y no quería hacerle nada solo quería verlo de cerca—le contesté con la verdad.

—¿Quién eres?—su voz me dice que
esta comenzando a cansarse.

De los árboles mas lejanos salió una mujer, una anciana mejor dicho.

El hombre enfrente a mi al verla dio un paso atrás y se dirigió a ella, los demás no dejaron de mirarme.

—Mya, Qué haces aquí?

—Hiroki, yo seguía la energía mágica blanca del aire y me trajo hasta aquí—explicó la mujer.

Ella me miró y se acercó, con el hombre a su lado, el lobo al que seguí se puso a su lado también y se transformo en un chico aparentemente de mi edad.

—Abuela, no debes salir sola—le dijo el chico a la mujer.

Ella no les hizo caso y si acercó más a mi—Dime joven, ¿Cómo te llamas?—me preguntó muy amablemente.

—Mi nombre es Taehyung—respondí.

—Y dime Taehyung, ¿Eres un brujo?, estás rodeado de magia blanca y pura muchacho—me dijo con la misma voz dulce de antes.

—No soy un brujo y lo de la magia es porque soy un lobo blanco, mejor dicho el último de mi manada.

La anciana me miró y con temor me preguntó:—¿Cuál era tu manada?

—Ya que usted ha sido la única en hablarme así, le diré que mi manada se hacía llamar ...—todos me miraron con atención—se llamaba la Luna Blanca de Cristal—la anciana se sorprendió mucho y me miro con mucha atención.

—No eres un lobo común.

—Supongo.

—Dime, ¿Corre sangre de Beta por tu cuerpo?

—No soy descendiente de ningún beta, pero si soy hijo del Alfa.

—Dios eres Kim Taehyung, tu padre era un gran hombre, tu madre era una mujer muy sabia y poseía el don de la luz.

No tengo ni la mas mínima idea de que es eso de el don de la luz.

—Abuela, ¿Qué es ese don?—preguntó el chico con curiosidad.

—Es el don de la luz, lo que significa que podía curar a los demás con solo tocarles, era una de las mujeres más importantes de su generación Jungkook.

El tal Jungkook solo asintió con la cabeza.

La anciana me cogió de las manos.

—Me gustaría que pasaras la noche en nuestra aldea Taehyung, es tarde y en seguida anochecerá, por las noches de invierno estos bosques son muy fríos.

No le contesté ya que ella empezó andar hacia los arboles por donde había venido.

El tal Hiroki le decía a la anciana que eso no podía ser pero una vez más la anciana no le hizo caso y el tal Jungkook solo miraba a la mujer sorprendido.

Habíamos caminado unos 20 minutos y ya podía ver a lo lejos un pequeño pueblo.

Lo que me esperaba...