Mi muerte #27

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Mi muerte #27

Cuando me vaya dejaré la puerta abierta, para que mis secretos salgan sin necesitar una llave porque en mi habitación la libertad será inmediata junto a la esperanza.

Correré las cortinas, para que el sol ilumine la habitación y las sombras de mis miedos al fin despejen mi zona segura, deshaciendo así el nudo firme que me amarraba a la incertidumbre y me impedía hacer lo que amaba.

Mis libretas quedarán en la mesa, llenas de gritos silenciosos, cuyos poemas sentenciarán lo que siempre pensaba, pero nunca hablaba, y los subrayadores estarán secos, por todo el tiempo que marqué en mi lista de sueños, los sueños de los demás antes de los míos.

Puede que mi computadora se encuentre descargada, pero si alguien es tan valiente, el cargador estará en una caja, para que la conecten y a mi cabeza entren.

Mis libros estarán en google docs, probablemente encuentren mis cartas oscuras, mis lágrimas plasmadas en documentos sin nombre, pero con su identidad marcada, enlazada a palabras de noches decadentes e interminables.

Puede que mi silla me extrañe, teniendo en cuenta que es quien me abrazaba en las madrugadas asfixiantes y sostenía mi cuerpo cuando los espasmos lograban desequilibrarme.

Seguro mis almohadas se pondrán frías, pero no extrañaran la humedad de mis lágrimas, ni las risas vacías, ni las historias que inventaba antes de dormir, solo para no sentirme vacía.

Puede que mi lámpara inhale extrañada y exhale libertad, la pobre al fin descansará de mis madrugadas en vela.

Mis post-its estarán llenos de garabatos sin sentido, así como mi vida a lo largo de los años, así como mi paso por el terreno deseado.

Mis esmaltes negros quedarán olvidados y se secaran en unos meses, pero recordarán cuando me subieron el ánimo con su color, aunque dijeran que estos eran la ausencia del mismo, siempre ayudaron a que sintiera menos la ausencia de mi alma.

No estaré en mi habitación, lo sé, será extraño, y es probable que pasen unos años hasta que mi dolor escape del cuarto.

Podría abrir mis ventanas, aunque el polvo dañará mis cosas, pero no de la misma manera en que su amor dañó mi vida, mi querer y mis entrañas.

Seguro mi parlante no volverá a encenderse, seguro mi teléfono se olvidará en mi mochila, pero es relativo y determinante, pensar en cómo podré sobrevivir y de qué forma se me recordará. No será por ser la más alegre, algunos dirán que les era extraña, aunque seguro mis amigas me recordarán por las bromas sin sentido. Tal vez mis historias sigan en wattpad, tal vez me convierta en una desconocida, seguro no será por algo tan brillante, no como lo que descubrieron los Drs. Osis y Haraldsson en lo que vieron a la hora de la muerte, porque ellos buscaron respuestas y yo siempre lo supe, porque la muerte acompañó mi vida hasta que decidí tomar su mano, así que yo nunca sería un caso de supervivencia.

Pensándolo bien, creo que no dejaré la puerta abierta.

50 cosas que todos hemos sentidoOnde histórias criam vida. Descubra agora