Efecto Mariposa - Dramione

03.Hermione 01

Todos los personajes y la historia pertenecen a JK Rowling

POV HERMIONE GRANGER 01

Iba de compartimento a compartimento buscando a Trevor, la mascota-sapo de Neville. No había tenido suerte en encontrar a Trevor. Entré en un compartimento con cuatro chicos.

—Se arrepentirán de repudiar mi oferta. Esos cabezas huecas reci...—estaba diciendo un chico con el cabello oscuro al estilo mohicano.

—¿Alguien ha visto un sapo? Neville perdió uno. —interrumpí al chico del pelo al estilo mohicano.

—¿Sapo?¿Neville?. —oí como tartamudeaba un chico con el pelo rubio platino.

—Ah, lo siento. Dejad que me explique hay un chico que se llama Neville Longbottom que ha perdido a su mascota. Un sapo que se llama Trevor, y estoy ayudándole a buscarlo por el tren.—expliqué.

—Pues no está por aquí. —contestó el rubio. —Pero si quieres te ayudo a encontrarlo.—

—Estaría bien. Muchas gracias .—le sonreí y esto hizo que se ruborizara.

Se estaba levantando el rubio cuando fue sujetado por el chico con el cabello oscuro al estilo mohicano. 

—Un momento, estás siendo muy descortés viniendo aquí sin presentarte y pidiendo a mi hermano que te ayude a encontrar la mascota de ese traidor a la sangre. —me miró frunciendo el ceño.

¿Hermano? No se parecían en nada, la verdad. Aunque antes he visto a los gemelos Potter y tampoco se parecían mucho. ¿Traidor a la sangre? Nunca había escuchado ese término.

—Claro, claro. Donde están mis modales. Me llamo Hermione Granger. Encantada de conoceros. —dije extendiendo la mano

—Yo soy Draco Malfoy. —dijo el rubio apretándome la mano. 

Con su tacto sentí una pequeña chispa que hizo que apartara la mano asustada de esa sensación. Me pregunto si el chico habrá sentido lo mismo.

—Él es mi hermano Taurus Malfoy y ellos son Vincent Crabbe y Gregory Goyle. —dijo el rubio apartando la mirada.

—Encantado. —contestaron a la vez los niños gorditos mientras devoraban unas papas.

—Mmm, Granger... —dijo el hermano de Draco, Taurus. —No recuerdo ese apellido. ¿Donde trabajan tus padres?. —me miró con curiosidad el pelinegro.

—Mis padres son dentistas. —respondí. Ante la mirada de extrañeza de los cuatro continué con la explicación. —Soy hija de muggles.—

Esas palabras provocaron una reacción simultánea en los cuatro chicos. Crabbe y Goyle dejaron de comer y tenían la boca muy abierta, Taurus puso una mueca desagradable y escupió al suelo y Draco tenía los ojos tan abiertos como platos. Me estaba muriendo de vergüenza, ¿tan raro era que hubiera hijos de muggles en Hogwarts? El silencio era muy incómodo. Después de unos segundos que me parecieron horas decidí volver a hablar.

—Mmm bueno ... me voy. —dije mirando a Draco esperando que me acompañara pero seguía petrificado.

—Sí, será mejor que te vayas. —replicó Taurus mientras volvía a escupir al suelo.

Sentí una punzada en el pecho al ver que Draco no me seguía para buscar a Trevor como me había prometido, pero reanudé mi búsqueda dejando a los cuatro chicos atrás.