06: elementos y colores.

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Aún no era tan tarde, se podía dar el gusto de quedarse más tiempo y justo Jungwoo despertó, estirando su cola con espinos en la punta y las alas al expandirse, crearon una ligera briza, sin duda se notaba majestuoso.

Doyoung estaba alegre, porque había logrado su primer cometido, el hacer que Jungwoo controlara su poder de transformación y ahora solo era cuestión de que lo intentase mas veces y practicara para dominarlo al cien, pero antes, necesitaba aclarar más cosas.

 —Lo hiciste bien— le comentó gentilmente y el gran reptil cerró y abrió sus ojos brillosos en señal de clara complacencia. Después de todo, hacer que Doyoung se enorgulleciera era una de sus metas, siempre—. Me gustaría intentar algo— prosiguió el chico cuando le ponía en frente del rostro una página del libro, claramente fue simbólico porque no esperaba que Jungwoo pudiese leer— ¿Será que puedas?— ambos se miraron, como si Jungwoo tratara de informarle a Doyoung algo pero fue complicado de entender ese intercambio de miradas.

Luego, Jungwoo se alejó un poco, hacia donde no hubiese tantos árboles obstruyendo el paso y sus largas extremidades posicionadas en en su longeva espalda se abrieron paso, las agitó como nunca había hecho, dado que al estar en lugares muy pequeños no tuvo la oportunidad o simplemente no le interesaba hacerlo. Arriba y a bajo al unísono, parecía implementar mucha fuerza para que el movimiento fuese poderoso y certero. Doyoung tomó distancia para su propia seguridad y para no obstruir el paso y tuvo la posibilidad de ver con total detalle, el primer intento de tomar el vuelo de un dragón. Jungwoo tenía gran tamaño pero al mismo tiempo gozaba de un cuerpo esbelto y delgado, aunque el niño se imaginó que las extensiones debían ser mil veces más resistentes para conseguir aguantar la masa. 

Un aleteo, luego varios y ninguno supo con certeza, cuántos minutos se elevó Jungwoo. No fue tanta la altura, unos dos metros, que fueron recortados al momento de una caída abrupta, como una manzana madura, liberándose del agarre del árbol y siendo atraída por la gravedad, al igual que todo lo que se eleva. Jungwoo cayó sin nada de cuidado, con un estruendoso golpe en la espalda, dio varias vueltas sobre sí mismo, seguro quejándose del inminente dolor. En parte parecía una escena graciosa, por que giraba como un niño pequeño cuando hace rabietas por un dulce, sin embargo Doyoung sostuvo la risa y fue en seguida a consolar su amigo. Su típico color beige estaba a punto de cambiar, hasta que sintió el toque de Doyoung sobre su nuca. 

 —Creo que mejor dejamos eso para después. Podríamos buscar un espacio más amplio— Jungwoo temía por haber quedado mal con Doyoung, pero al contrario el niño tenía una sonrisa sincera y toda era para Jungwoo. El dragón sintió el calor y tranquilizó sus nervios.

—No nos queda mucho tiempo, quisiera que probemos una cosa más— levantó el dedo indice para profundizar sus palabras —. Este libro explica que cada dragón, sin importar su proveniencia nace con una dote proveniente de la naturaleza— explicó—, así que debemos descubrir cuál es tu elemento, Jungwoo— se le iluminaban los ojos y su voz se tornó un tanto chillona por la emoción. 

From a shooting star ᵈᵒʷᵒᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora