IN MY MIND - 『명열』 ❥ MYUNGYEOL

F I F T E E N T H

▁▁▁▁▁▁▁▁▁▁▁▁

Psicosis - 2° Fase

DÉCIMO QUINTO

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— ¿Cómo está? — preguntó cuando Sung Kyu llegó a la sala de espera. Myung Soo estaba sorbiendo por la nariz, sólo había conseguido dejar de llorar hace poco. Su cuerpo aún temblaba ligeramente y eso fue observado por el psiquiatra.

— Tuvo una hemorragia nasal, algo grave. — dijo serio, sentándose e invitando a Myung Soo a hacer lo mismo. — Tuvieron que cauterizarle la nariz y hacerle dos transfusiones. Ahora está mejor, estable, pero aún débil... Perdió mucha sangre.

— Fue mi culpa. Le hice perder el tiempo... Yo. Casi no lo consigo. — admitió, escondiendo el rostro entre sus manos y volviendo a llorar.

Sung Kyu pasó la mano por la espalda de Myung Soo, dejando que éste llorara, dejando que derramara su dolor.

— Sé que es difícil, pero tienes que aguantar, Myung Soo. Él lo está aguantando por nosotros, tú también tienes que hacer.

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Myung Soo se acercó a la cama, sentándose al lado de un Sung Yeol pálido. El chico estaba acostado en la cama, con los ojos cerrados y un semblante triste.

— Nunca seré famoso. — comenzó.

— ¿Ah?

— Seguiré vivo, pero nunca seré famoso, mi cara nunca estará impresa en revistas. Y tal vez nunca sea rico. Creo que tampoco haré un gran descubrimiento para ser recordado por generaciones y generaciones.

Sung Yeol se mantuvo en silencio, él sabía sobre lo que el otro estaba hablando. Tenía lógica, pero los pacientes terminales no pensaban de esa manera, ellos siempre terminaban volviendo a los sueños que tuvieron durante su infancia.

— Es sólo un deseo tonto de una lista vieja. — comentó sin humor.

— Pero sé que tal vez aún lo piensas. Creo que es difícil hablar directamente sobre eso contigo, pero creo que tengo que hacerlo. Yeol, la vida no es lo que nosotros queremos... No es de la forma que deseamos.

— No tienes que hablarme de eso, ya tuve suficientes pruebas de que el mundo no es una fábrica de conceder deseos.

Sung Yeol realmente no estaba de humor, y no culpaba a Myung Soo por lo de antes. Sólo estaba desanimado por haber arruinado un momento perfecto.

— Yo... Yo sólo quiero decirte que no es necesario que pienses en el si hubieras tenido una oportunidad, podrías hacer la diferencia en el mundo. Yo nunca lo haré, seguiré viviendo en esta mierda... — su voz comenzó a temblar sin querer, y sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas. —Seguiré viviendo y no haré nada... Ni siquiera voy a tenerte.

Myung Soo comenzó a llorar más, arrojando parte de su cuerpo en el regazo de Sung Yeol. Estaba siendo débil, en aquel momento él estaba siendo débil frente al otro.

— Si pudiera, te juro que daría mi vida por ti. Juro que...

— Shhh. — Sung Yeol le pidió silencio, le pidió a Myung Soo que dejara de llorar y lo abrazó. Era hora de apoyarlo, no hora de caer de nuevo. Ya había caído tantas veces y se había levantado, no podía dejar que el otro cayera también.

Tenía que estar bien.

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