021: Esto es el paraíso.

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Capítulo 21.

(PDV de Justin.)

-Deja que la nana haga su trabajo gordo... -me dijo Alice mientras me abrazaba por los hombros haciéndome "Masaje", nada Relajante.

Santo dios, es tan empalagosa.

Empalagosa... La que es empalagosa y hermosa es Spencer.

Me encanta cuando me da besos en la mejilla y abrazos no esperados, es muy lindo, ella es muy linda. Trabajo cuesta saber que este sola y sin pareja.

Cuando vi al Rubio la primera vez, al novio de Olive, me quería morir, sentía ganada la batalla y sentía que ya no tenía sentido seguir con ella si ella tenía un novio, pero cuando me dijo que se llamaba Derek lo supe todo.

Cuando éramos pequeños ellos dos eran inseparable y Derek también era humillado por estar con ella, decían que le pasaría la mala suerte y que debía alejarse de ella pero ahora veo que el jamás lo hizo.

Spencer me había gustado un poco en primaria, me había gustado mucho, pero por pena a que me vean con ella nunca estuve con ella.

Ya en secundaria nos toco separados y nunca tuve la oportunidad de hablarle, aparte de que ella era muy cerrada y tímida por que tenía miedo de hacer algo mal.

Recuerdo también que en la graduación de Secundaria ella estuvo sentada toda la fiesta, junto con Derek quién la abrazaba a el.

Esa escena en ese entonces no causaba nada en mi, pero ahora tendría que dejar de pensar en ella si Alice no quería ser empujada.

-¿Me escuchaste Justin? -Chillo Alice.

-Estoy trabajando. -dije frío y tecleando.

Ay, gordo! -se quejó u se sentó en el sillón de afrente. -Haz me caso que no vez que te estoy hablando, a pero no fuera la nana por que hasta se te cae la baba y ni parpadeas.

«Así es Alice, así es, si Spencer estuviera aquí de empalagosa yo moriría en ese instante, me trae loco Dios mío.»

-La nana esto, la nana lo otro, la nana si, la nana hermosa, la nana bonita.

«La nana Perfecta, la nana única, la nana de mi corazón, Spencer, dios, mierda!»

La empece a ignorar, mi cabeza solo recordaba los hoyuelos de Spencer y sus ojos grises mirándome con un brillo especial.

«¿qué sentirá Spencer por mi?»

Habia estado ya más de dos veces cerca de sus labios, apunto de besarlos y con todas las ganas pero siempre pasaba algo y nos separa.

Tenía tanta curiosidad de saber que tan suaves y dulces eran sus labios.

Estaba pensando en lo hermoso de sus ojos cuando alguien toca la puerta y me saca de mi hermoso trance con Spencer.

-Pase. -dije mirando la puerta.

De repente entra Spencer y yo inconcientemente sonrió.

-Señor Bieber, ya tenemos las cosas listas para mañana, los niños llegarán a la 1 de la tarde. Usted no se preocupe, los voy a mantener muy ocupados. -sonrió tierna, me derretí- Bueno, ahora sólo le daré de cenar a los niños y subiré a acostarlos.

-Sólo hazlo y ya nana -dijo Alice de mala gana, yo la mire mal.

-Esta bien Spencer, muchas gracias -le sonreí pero ella sólo soltó un suspiro.

-Con permiso.

Y desapareció por la puerta, maldecía a Alice en voz baja y ella seguía hable y hable y hable.

(......)

-Los niños ya están dormidos señor Bieber -me dijo Spencer cuando nos topamos en un pasillo.

-Spencer... No me digas así.-le dije mirándola a los ojos.

-Usted es mi jefe, ¿como quiere que le hable entonces? -me miro

Igual a los ojos y yo sólo quería tomarle la cara y besarla con mucho cariño.

-Háblame de tu, tenemos casi la misma edad, éramos compañeros antes...

-No, no éramos compañeros, nunca me hablaste por que De seguro te daba asco como los demás.

-No, eso eliminalo de tu cabeza Spencer, nunca me darías asco -le susurre lo último a centímetros de ella.

Ella mordió su labio nerviosa y bajo la mirada, yo tome su mentón y le alce lentamente la mirada hasta que sus ojos quedaron con los míos.

-¿Cómo es que me darías asco Spencer? ¿que no vez que eres la mujer más hermosa? Eres tierna, eres divertida -reí un poco y acaricie la mejilla rosada de Spencer- es enserio Spencer, nunca, ni en mil años podrías darme asco. No me dabas, no me das y no me darás.

Spencer me miro totalmente roja y me dio un abrazo de esos que me encantaba, inesperados.

Oculto su rostro en mi cuello y soltó un suspiro tierno, yo voltee mi cabeza y le di un beso en la comisura de sus labios, sin querer... Queriendo.

Ella sonrió sonrojada y se apegó aún más a mi.

Esto es el paraíso.

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OH MAY GOOOOOOOO SALSEOOOO EXTREMOOOOOO ESPERO Y LES GUSTÉ HERMOSAS LAS AMO❤️

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