EL OMEGA Y EL VAMPIRO//JIMSU//

onceavo

La noche seguía siendo fría.

La tormenta había dejado de rugir en el exterior, había dejado de exclamar su nombre y tratar de derrumbar su cuerpo inestable, el cielo sabía su debilidad y parecía burlarse de su dolor, parecía susurrar el nombre de jimin cada vez que la brisa chocaba su mejilla, haciendo erizar toda su piel en cuestión de segundos, las gotas dulces se habían calmado, pero las saladas eran todo un misterio tratando de salir por su cuenta, cómo si tuvieran mente propia proclamaban su derecho en aquélla helada noche, aunque sólo quedaba la brisa fría correr por todo el lugar burlándose de la luna al no ser detenida, cómo buscando consuelo en algunos brazos calientes luego de un corazón roto.

Yoongi se encontraba mirando vagamente su reflejo en el espejo, sus ojos tenían un brillo, cómo si de una pelea mental se diera y los sentimientos estuvieran luchando por salir, sabía que Jin querría una explicación de su conducta, pero aún su mente se encontraba en conflictos con sus sentimientos, no estaba preparado, pero tenía que hacerlo, tenía qué hacerlo, admirando una vez más su reflejo salió del baño.

Comenzó a bajar las escaleras, sus pálidas piernas le dolían a cada pasó, si jimin no lo hubiera mirado así, quizás, sólo quizás no hubiera corrido como loco, no, sacudió su cabeza haciendo que pequeñas mechas doradas caigan sobre su frente, si no arreglaba sus ideas en orden, luego se saldría todo de control, y aquello era lo que más le atemorizaba, no poder controlar sus acciones futuras.

Al terminar de bajar las escaleras sus pies se detuvieron en el último escalón, su mirada viajo donde Jin quién se encontraba sentado en uno de los sillones de la sala, sus ojos miel estaba concentrados en la acción de sus dedos al batir el chocolate caliente con una cuchara, aquello lo hizo sentir más tímido y nervioso, sabía que el vampiro castaño ya sabía de su presencia, suspirando bajo el último escalón y dándose fuerzas mentalmente se dirigió a uno de los sillones.

Su mirada barrio la sala, inquietó por estar sentado al frente de aquél vampiro de orbes miel.

- nam ¿Puedes subir arriba un momento? Por favor, necesito hablar con yoonie a solas...es algo privado - Jin dijo mientras le ofrecía una taza de chocolate caliente sin dejar de mirarlo, sus dedos inestables agarraron la taza, podía sentir aquéllos orbes miel estudiar todas sus acciones, aquello era inquietante en cierta forma, no la de Jin, si no sus pensamientos, aún no sabía que veredicto dar a sus emociones.

Orbes verdes miraron como aquél moreno vampiro subía por las escaleras, su mirada viajo inevitablemente a aquellos morenos brazos, y su mente recorrió varios sucesos en el pasado, nunca olvidaría lo que hizo aquél moreno vampiro por él, porque Kim namjoon también fue su salvación.

- ahora me dirás Min Yoon Gi ¿Porqué estabas llorando? - suspiró mientras se llevaba una de sus manos a sus frente - y más aún en la lluvia, ¿Quieres que algún día de estos me de un paro cardíaco?, Yoonie un día de estos no podré estar aquí para protegerte.

Suspirando se preparó mentalmente para lo que venía, giro su mirada a la persona delante de él, sus dedos temblaron, la mirada de Jin era intensa como si tuviera un debate mental, abrió sus labios para volverlos a cerrar, era como si su voz se hubiera perdido en algún lugar, dejó la taza que tenía en sus manos en la mesa porqué no se hallaba capaz de sostenerla, no confiaba en su cuerpo, no confiaba en el para mantenerse estable, sabía que otra vez se iba a romper, y las lágrimas harían su aparición.

Era tan detestable la forma que jimin lo ponía en aquél estado depresivo.

- Jin - llamó con voz seca y temblorosa, orbes miel lo miraron atentos, yoongi deseaba que no tuviera tanta atención, no cuándo su cuerpo parecía temblar y desarmarse en cualquier momento - yo...discutí con jimin.