Dark sky [Dean Winchester y tu]

Capítulo 26

Cuando los niños ya estaban dentro de la escuela Darla se acercó a nosotros con una gran sonrisa. Yo empecé a preguntarme que quería.

-Hola –saludó con dos besos a mí y a Dean.

-Hola –dijimos a la vez.

-¡Qué bien te veo _____!

-Sí, es que me cuido ¿sabes? –le respondí con una sonrisa.

-No, si lo digo por la compañía que tienes –entonces miró a Dean.

Dean al darse cuenta echó la cabeza atrás y me cogió de la cintura.

-Pensaba que respetarías mas a Bradley, al fin y al cabo era el padre de tu hijo ¿no?

-Tú no sabes nada de mí –dije seria- no llegas a Bradley ni a la suela de los zapatos.

-¿Te pones chula? ¡Qué miedo! Vamos a ver que me haces.

-No me tientes –dije con una sonrisa, aunque estaba cabreada.

-¿Y qué pasa si lo hago? –ella se acercó a mí.

Yo quité la mano de Dean de mi cintura y me acerqué más a ella, total, que nos quedamos a centímetros. Estuvimos así unos segundos, hasta que Dean puso su mano en mi barriga y me fue apartando lentamente de ella. Después se giró y se encaró él.

-Oye Darla, yo de ti no me metería con ella.

-Así que la defiendes.

-Pues claro que lo hago –dijo en tono serio- Ella ya no es la niña con la que os metíais, y créeme cuando te digo que no necesita a nadie para dar una paliza. Pero bueno, si quieres probarlo no voy a detenerte.

Darla le miró, después a ella y sin decir nada se marchó.

-Dean, no tendrías que haberme parado.

-¿Cómo qué no? Ambos sabemos lo que eres capaz de hacer ¿recuerdas que eres Cazadora?

-Por eso, le habría dado una lección.

-Sí, lo habrías hecho. Pero ya sabes quienes son realmente los malos en este juego, y no son los humanos.

-¡Pero ella es una zo**a!

-Hey, tranquilízate. Ya ha pasado.. ya verás que no te dice nada.

Yo respiré y le hice caso.

-Tienes razón, no vale la pena discutir con gente así.

Nos subimos al coche y volvimos a mi casa.

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DOS DIAS DESPUÉS..

Seguíamos sin saber nada de La Muerte ni de Castiel. Dean no paraba de llamarle pero no aparecía, y estábamos algo preocupados. Era Miércoles cuando estábamos todos sentados en los sofás; Yo, Sam, Dean y Bobby. Eric se había quedado a casa de su mejor amigo a dormir.

Nos lo estábamos pasando bien, riéndonos y contando anécdotas sobre cacerías, cuando llamaron al timbre. Dean, que estaba sentado a mi lado dijo que iba a abrir. Vi que tardaba así que le pregunté desde el salón.

-Dean, ¿Quién es?

Entonces le oí hablar.

-No creo que te vaya a gustar.

Me levanté del sofá y caminé hacia el pasillo, entonces desde allí la vi, era Darla. Me acerqué cabreada a la puerta.

-¿Qué? ¿No tuviste suficiente el otro día? –dije.

-No vengo a discutir contigo ______, necesito tu ayuda.

-¿Por qué debería ayudarte?

-Porque eres la única que puede–agachó la cabeza y respiró- te escuché el otro día y sé a qué te dedicas.

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La dejé entrar en casa y se sentó en el sofá, enfrente de mí. Bobby de mientras estaba hablando con Rufus y Sam, Dean y yo oyendo su historia.

-¿Qué ha pasado? –dijo Sam.

Yo pasaba de ella, la oía pero era como si no quisiera tenerla ahí. La odiaba y después de todo viene a mi casa pidiéndome ayuda.

-El otro día volví a casa de hacer la compra, y bueno oí a mi marido gritar.. Fui hacia nuestra habitación y vi alguien que se le llevaba.

-Eso es un secuestro, llama a la policía –dije con una sonrisa.

Ella me miró con cara triste, pero no me daba pena. Dean me miró y me hizo un gesto con los hombros diciéndome ‘¿Qué estás haciendo?’.

-Es que vi a quién se le llevo.. y.. –no podía hablar, quería llorar pero como estaba delante mío no lo hizo- era una chica y su cara.. dios, su cara.

-¿Qué? ¿Cómo era? –dijo Sam.

-Tenía los ojos como si tuviera dos pupilas, una más grande que la otra. También tenía algo parecido a quemaduras, pero no lo eran.. –Darla me miró- Por favor, sois los únicos que podéis ayudarme. 

Espero que os guste:3 ¿Que creeis que hará _____?