Capítulo 20

282 30 1
                                    


-¿Riley?- Pregunte perpleja.

-Es algo loco, lo sé. Pero no puedo evitarlo Edeline. Cada vez que estoy cerca de ella siento que todo mi mundo se derrumba y solo existimos nosotros dos. Es algo que nunca antes había sentido-

Parpadee varias veces buscando las palabras correctas, pero tenía la mente en blanco. Solo quería escapar lo más rápido de allí.

-Edeline di algo- Dijo Jaden trayéndome de nuevo a la realidad.

-¿Qué quieres que diga?- Pregunte.

-Lo que opinas al respecto. Fue realmente difícil contarte esto, quiero que me des tu opinión-

Sentí una punzada de dolor en la garganta, como si alguien oprimiese con fuerza un alambre de púas. Era el mismo dolor que sentía siempre que tenía ganas de llorar y aguantaba por no hacerlo.

-Mi opinión no cuenta-

-Claro que cuenta. Eres mi mejor amiga- Dijo él poniendo una mano en mi hombro.

Sabía que si volvía a decir esas palabras. Todo sería un mar de lágrimas.

-No Jaden, es un tema personal. Mi opinión no cuenta en nada al respecto-

-Lo siento, no quise incomodarte. Solo pensé que tal vez podías ayudarme-

-¿Ayudarte?- Pregunte furiosa- ¿Cómo puedes pedirme semejante cosa?-

-No le veo el problema- Dijo Jaden a la defensiva.

-¡El problema tal vez sea de que si ella no siente lo mismo por ti nuestra amistad no será la misma! ¿No te has puesto a pensar en eso?- Dije alterada.

Sabía perfectamente que no estaba hablando por Riley. Si no que hablaba por mí misma. Jaden no sentía lo mismo por mí, y eso me hacía sentir cada vez más lejos suyo. Había muchísimas personas en el mundo ¿Por qué justamente tenía que enamorarse de quien era mi mejor amiga?

-No, la verdad es que no lo había pensado- Dijo notablemente triste- ¿Sabes qué? Creo que ya te he quitado demasiado tiempo. Será mejor que vuelva a mi habitación- Dijo dando media vuelta para volver.

Y yo pensaba en hacer lo mismo.

Cuando volví a mi habitación, los Lesson dormían profundamente. No los entendía, ya que cuando tuve mi primer entrenamiento tuve fuerzas para hacer todo nuevamente. Claro, yo soy una Evolucionada y ellos solo chicos comunes. No podía juzgarlos.

Me acosté intentado dormir, pero no podía conciliar el sueño. Las palabras de Jaden resonaban en mi cabeza como un martillo sobre el metal. Recién ahora me daba cuenta de lo estúpida que era. Recién ahora notaba que a Jaden le brillaban los ojos cada vez que venía Riley o se ponía nervioso. Mientras que a mí me miraba igual que siempre, con ese amor de mejor amigo; el único amor que podría obtener de él.

Pude dormir solamente un poco. Me había despertado varias veces en la noche sintiéndome incomoda. No tenía sueño, tenía energía suficiente para pelear contra Heather otra vez.

El reloj marcaba las 6am. Por lo que decidí levantarme una hora antes para entrenar un poco. Era una buena forma de empezar la mañana.

Me puse un pantalón y una remera deportiva. Me ate el cabello y fui al gimnasio. No había nadie. Probablemente estaban todos durmiendo y eso me agradaba, no tenía ganas de ver a nadie por ahora.

Me pare frente a un saco de boxeo y di el primer golpe, no sentí absolutamente nada. Tome más fuerza y di otro golpe con la otra mano y luego otro. Hasta que mis golpes se volvieron un ritmo constante. De vez en cuando daba una que otra patada o giro para luego volver a golpear el saco.

La Tormenta AzulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora