Bonito

1.4K 161 199
                                    

Ahí estaba otra vez, mirándose al espejo en su habitación, modelando semidesnudo o con algún conjunto de ropa ligera y casual por encima; como una camiseta o simples pantalones cortos.

Matt observaba desde la cama, fingiendo estar en el celular.

- ¿Crees que me veo bien, Matt?- suspira el castaño. Claro que no estaba muy a gusto con su cuerpo, no era tan lindo como su novio.

El peli naranja por otro lado, veía al castaño casi babeando, lo había estado mirando todo ese tiempo, recorriéndolo de pies a cabeza mientras pensaba: Menudo pedazo de carne.
La voz de su pequeña pareja le hizo reaccionar enseguida, devolviendo la atención hasta la frustrada expresión del dibujante en el reflejo del espejo.- Hey... ¡por supuesto que si! ¿¡Cómo se te ocurre preguntarme algo como eso?! ¡Estás que ardes! ¡Ven acá que te voy a comer entero!.- 

- P-pero... Matt, espera, ¡no! ¡Pff jajaja!.- Ni siquiera le dio tiempo para huir, el pecoso se había levantado del colchón con tal de ir y cargarlo en brazos, los dulces besos que repartía por las mejillas y labios de Edd no le hacían sentir más que feliz, satisfecho y amado.

- ¿Cuántas veces voy a tener que repetirte que te queda todo bien? ¡Eres el chico más lindo del planeta!-

- Antes tú lo eras.-

- Ahora soy el segundo, porque primero estás tú.- sonrió este, rozando su nariz en el cuello del castaño mientras le abrazaba y atraía en un cariñoso acto.-

- Uy, ¡hice magia! ¡Matt ha dejado su narcisismo! ¡Se acabará el mundo, huyan todos!-

- ¡No exageres!-

- No exagero, tú exageras diciéndome el más lindo del mundo cuando no lo soy. Mejor ayúdame a buscar alguna cosa para ponerme porque lo que tengo me hace ver gordo.-

- Pero si te ves bonito...-

- Bonito mis huevos.-

- También.-

- ¡Ash cállate! Tengo una idea, dame tu sudadera.-

- ¿Qué? ¿Ahora? Pero Edd...-

- ¡Tienes abdomen plano y no te da vergüenza mostrar nada! Estás guapo y yo no, ¡desnúdate!.-

- Hubieras empezado por ahí.- comenzó a reír, el tono perverso que había utilizado para molestar un rato a Edd le hizo gracia. Se dejó de tonterías por un rato y optó por quitarse la prenda lila, extendiéndola hacia el dibujante quien casi se la arrebató de las manos.
Cuando el pequeño se la puso encima y la abrochó se tuvo que llevar la mano a la boca para cubrir la boba sonrisa que se había colado por sus labios. Ya está, cómo se nota que estoy enamorado. Pensó.

- ¿Qué tal?-

- Mejor quítatela.-

- ¿Por qué...? ¿M-Me veo mal? Tienes que ser sincero esta vez, no andes con tonterías de que "eres el más lindo"... y esas... esas c-cosas.-

- ¡No! ¡No es por eso, tonto! ¡Si alguien más te ve así le vas a gustar! ¡Estás precioso!.-

- Pero... ¡M-Matt! ¡Espera!- Ya estaba apretujándolo otra vez, la diferencia era que ahora no podía tocar el suelo ni con la punta de los dedos de los pies. La zanahoria era un jodido edificio a comparación suya.

- ¡Noooo! ¡¿Además de quitarme el primer lugar del más guapo ahora quieres que me arrebaten a mi novio?! ¡No lo permitiré! ¡Estás condenado a estar aquí conmigo todo el día hasta que te consiga una sudadera grande!.-

Las carcajadas no se hicieron esperar, ahí Edd se lo comió a besos, era demasiado lindo como para ser verdad, nadie podría resistirse. Así estuvieron el resto de la tarde, y el pelirrojo no lo obligó a quedarse, claro que no, al contrario, acabaron quedándose ahí por cuenta propia. Primero porque son unos pegotes melosos de mierda, y segundo porque hacía frío.

Al final, tuvieron una tarde llena de mimos.

¡Edd! ¡La zanahoria se está incendiando!|MattEdd One-ShotsWhere stories live. Discover now