Madrugada

1.2K 150 42
                                    

Bajó las escaleras hasta llegar a la sala, iba por un vaso con agua como todas las madrugadas, casi eran las 03:00Am.
Un poco antes de dirigir su paso a la cocina, pudo notar una tenue luz sobresaliente desde donde estaba, provenía del taller de arte de Edd.

- Agh... no otra vez.- se dijo para sí mismo, lo masculló.

Hacía días que su novio no dormía bien, solo por amanecerse en esos cómics e ilustraciones. Vaya que si lo había regañado bastante, pero no hacía caso; Era terco como una mula.

Una vez llegar y estar frente a la puerta, dio suaves golpes en ella avisando su presencia.
- Edd, soy yo, Matt.- dice con voz ronca, se notaba que recién había despertado.

- ¿Qué pasó? ¿Y qué haces despierto? Es tarde, ve a dormir.-

En ese momento pudo notarlo, el cansancio en los ojos del pobre chico, ya ni sabía cómo es que se mantenía en pie por las mañanas, o con energías para animarlos a todos, si se la pasaba trabajando.

- Dios... mira tus ojeras. Vamos a la cama, ahora, podrás acabar eso mañana, pero no seguirás con este horario.-

- Matt, ya te he dicho que no puedo... siento que no lo acabaré y me distraeré, te lo había explicado antes. No puedo dejar para mañana lo que puedo hacer hoy.-

- Escucha Edd, tú hoy se está interponiendo con tu descanso, así que será mejor que no lo uses para tapar un agotamiento excesivo, pareces un jodido zombi. A dormir, ahora.-

El peli naranja se acercó al castaño, encendiendo la luz del taller; Edd solo tenía encendida la del escritorio.

- Ya te he dicho que n...-

Antes de que pudiera seguir absteniéndose y continuando con sus rotundas negaciones, Matt ya lo estaba cargando de vuelta a la habitación que solían compartir; Solían porque Edd casi no pasaba ahí, su nueva cama era el escritorio del taller o la incómoda silla del mismo.

- Maaaatt, sueeeeltame, ya no soy un niño.-

- Prométeme que no volverás a amanecerte mañana.- dijo con seriedad, el sueño le ganaba así que no tenía ánimos ni mucho menos paciencia para lidiar con el reproche de su pareja.

- Pero...-

- Promételo o me enojaré contigo.-

El dibujante lo pensó mientras analizaba la postura de su novio desde la cama una vez llegaron al cuarto, estaba siendo acurrucado por él, y eso se sentía relajante y bien. No le gustaba esa expresión sobre los finos rasgos de Matt, era extraño mirarle enfadado, mucho más cuando acostumbraba a verle comportándose infantil o extremadamente cariñoso, casi como un cachorro.
Suspiró y acabó cediendo, asintiendo con la cabeza.
- Bien, lo prometo.-

El pecoso sonrió, besando la frente del artista.
- Entonces a dormir, aunque me quede sin mi vaso con agua.-

No lo pensó dos veces antes de cerrar la puerta de la habitación y recostarse junto al de verde, a quién abrazó al deslizar uno de sus brazos sobre su cintura.

- Matt, te quiero.-

- Yo también.-

- Perdón por ser tan pesado aveces pero es que ya sabes que yo...-

- Shhh, duérmete, mañana nos ponemos profundos. Quiero abrazarte toda la noche y no hasta la mitad de ella, así que cierra el hocico.-

Edd rió, bastante suave. A él no le quedó de otra que encogerse de hombros y devolverle el abrazo a su novio, besando su frente mientras acariciaba sus cabellos anaranjados al estar este acurrucado en su pecho.

Tomar un buen descanso de vez en cuando no era mala idea.

_____
Homosexuales por doquier
- perreo intenso-

¡Edd! ¡La zanahoria se está incendiando!|MattEdd One-ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora