Capítulo 0

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Estaba aquella mujer de platinada cabellera herida en el suelo tras esa dolorosa batalla, se podía ver una lluvia de pétalos de cerezo que caía sobre su cuerpo siendo congelados al mínimo contacto con su piel.

Al lado de ella se encontraba un hombre de rubia cabellera que al verla así, la alzó en brazos, y al sentir que el calor de su cuerpo la abandonaba, la apretó contra sí y de esa forma, rogando que no desapareciera de su vida, fue que alzó el vuelo hacia un lugar seguro.

Y sintiendo su corazón contraerse por verla de ese modo, exclama-Lamento todo lo que sucedió, siento mucho lo que hice y por sobre todo, siento haberte quitado tu libertad...

Y de esa forma, colocándola delicadamente en la cama de aquel templo, posó un delicado beso en la frente de ella, y procurando encontrar una manera de traerla de regreso, exclama-No importa cuanto tiempo pase, yo nunca te dejaré sola... encontraré la manera de despertarte...

Y acariciando la mejilla de aquella mujer se aleja hacia sus responsabilidades, dejándola protegida en ese sagrado lugar, mientras su corazón se rompía en mil pedazos.

Empero, el gran anhelo de esa mujer, transmitió a su fiel Sowige que emprendiera el vuelo a un lugar lejano, y de esa forma, aquel blanco familiar atravesó un portal creado por ella, llegando un mundo llamado Tierra.

Tras atravesar un gran prado de aquel lugar, y llegar a una gran mansión, se coloca en una de las ramas cercanas a una ventana que daba a una habitación, esperando pacientemente que aquel bebé creciera para llevársela al lugar indicado.

De ese modo, transcurrieron unos finalmente 25 años, y aquel familiar al ver a esa muchacha de una ondulada y ceniza cabellera sentada en aquella ventana leyendo un libro, empezó a cantar su ululeo característico, emitiendo con él un hechizo para atraer a aquella muchacha donde su ama le había dicho que lo hiciera, y así fue como aquella noche,

"Una bella dama baila en un cerezo

Con su pelo blanco

(...)

Aquella muchacha camina sonámbula descalza al interior del bosque cercano a su mansión, siendo guiada por aquel familiar.

(...)

Bailaba insistentemente, con la música que le acompaña

(...)

El viento soplaba mientras ella alzaba la mano tratando de alcanzar al cerezo que cada vez estaba más cerca de ella.

(...)

La mujer bajo el cerezo, me llama

La mujer bajo el cerezo, llora por mi llegada

Mis piernas se mueven por si sola por su llamado

Mi llegada ella acepta con entusiasmo

Me invita a sentarme donde ella estaba

Y al hacerlo, todo desaparece...

Y todo se vuelve negro

(...)

Y fue así como todo comenzó, pero antes de continuar...

¿Por qué no ver esto desde otra perspectiva?

Crónicas Guardianas: "La mujer bajo el cerezo" [Eldarya]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora