Capítulo 29: "El poder del cerezo".

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En aquel bosque oscuro, dentro de una cueva se encontraba Emily tendiendo la herida de una jovencita que estaba junto a su madre-Tienen que tener cuidado, Amot me ha dicho que en el bosque hay unas sombras rondando y atacan a seres de luz como ustedes-, le comentó a la elfa que miraba asombrada a esa mujer con unas hermosas facciones, Emily extrañada la mira

-Lo siento, es que nunca pensé que una humana como tu fuese tan poderosa-, exclamó con sorpresa, y ella suspirando, añade

-Digamos que tengo herencia sobrenatural desconocida, quizás heredé ese poder de ellos, sobre todo la capacidad de sanar rápidamente-, dijo Emily con una sonrisa plena, ya hace tiempo que se había acostumbrado a mentir de esa manera-Pues me quedaré con ustedes hasta que amanezca, es peligroso dejarles solas en este estado, al menos hasta que su marido llegue...

Aquella elfa miraba a aquella mujer misteriosa totalmente agradecida-No sé como agradecerle...

-Viviendo por su hija, siendo la buena madre que es y no volver a entrar al bosque hasta que las sombras se vayan...-, y al decir ello, aquella semidiosa volvió a cubrir a la pequeña elfa elben que dormía plácidamente en el regazo de su madre, y se dirigió a la salida

-Eres de buen corazón, yo me hubiese ido o dejado a morir...-, exclamó aquel BlackDog mirándole de soslayo

-No, tu me salvaste una vez, así que lo dudo, pero si las hubiese dejado a su suerte, yo no sería mejor persona, no como él quiere que lo sea y no como yo quiero serlo...-, respondió sintiendo un calor dentro de ella, y sonriendo, añade-, siento que pronto podré estar a su lado...

-Realmente haces bien tu papel de humana, Em...-, respondió él echándose al lado de ella-Duerme, yo vigilaré que nadie pase por aquí...

Emily niega apoyándose en el torso de aquel animal, y sintiendo el calor y respiración de él, cierra los ojos cayendo en un profundo sueño, sin saber qué sucedía a su alrededor, mientras Amot miraba atento a su alrededor, las sombras no se atrevían acercarse a ella, y eso le sorprendía

Finalmente cuando el sol amaneció un gran elfo elben se acercó a la cueva, y su mujer al verle corrió a sus brazos-¿Ella las salvó?-, su mujer asintió tímidamente sosteniendo a su pequeña hija, y aquel noble ser deposita una pequeña bolsita en su brazo junto a una nota, viendo como ella dormía plácidamente y abrió los ojos al verle su maquillaje-Hace tiempo que no veía este maquillaje...

-Sí, me comentó que su madre es fanática de los egipcios, así que aprendió a maquillarse así...-, aquel elfo se rió frente a eso, acariciando las hebras de su pequeña y tomando a su mujer de la espalda, y subiendo a su carroza, aquella familia se marcha

-¿No llevaremos a esa mujer con nosotros?-, el elfo miró a su pequeña con gran pesar, lamentando aquella situación por no poder agradecerle como es debido.

-Lo siento, sabes como es nuestra sociedad con los humanos...-, y tras decir aquello, se marchan de aquella tierra donde se toparon con aquel desastre y salvados por esa mujer, y Amot mirando aquella escena con gran pesar, no lograba entender la naturaleza de esos elfos

-Esos elfos y sus costumbres... son... muy interesantes...-, al escuchar aquello, Emily dio un respingo mirando quien había llegado-Me dan ganas de escribir sobre ellos, pero... va...-, Era Thot que se había manifestado como Branwell a su lado, con su pelo rubio y ojos oscuros escondidos tras unos lentes redondos-Querida, ¿Creías que no sabríamos donde estabas? Pero, tranquila, tu padre no pudo venir...

-¡Tío! Si ha venido para hacerme volver a la cabaña, pierde el tiempo...-, dice Emily con gran resolución, y él riéndose por ello, mira sus manos como si estuviese sacando la cuenta

Crónicas Guardianas: "La mujer bajo el cerezo" [Eldarya]Where stories live. Discover now