No huyas *1*

"VISITA INESPERADA"

Llegamos todos juntos a la casa. Entre risas y risas no me he dado cuenta de que hay un coche nuevo en el aparcamiento. Cuando descubro de quien es, ya es demasiado tarde, la voz de mi madre resuena por la casa haciendo que todos nosotros nos callemos.

Miro hacia arriba y suspiro al ver a mi madre enfundada en uno de los últimos vestidos que diseñó. La veo bajar viendo como las chicas, excepto Karina, se quedan con la boca abierta y como mis compañeros hacen lo mismo.

Mi madre se acerca y me da un abrazo afectuoso. Se lo devuelvo y me giro hacia mis compañeros.

- Chicos ella es... es mi madre

Me rasco la nuca algo incomodo y veo como mi madre saluda a mis compañeros... pero se queda viendo a alguien de mas haciendo que su cara cambie. Sigo su mirada, y veo que esta está clavada donde Karina.

Veo sus ojos ponerse vidriosos y salir de la casa dejándonos a todos confusos. Voy a ir tras ella cuando mi madre me coge del brazo con una mirada triste y niega con la cabeza.

Mi madre los hace pasar a todos para que tomen asiento mientras ella prepara algo para merendar. La sigo a la cocina y me apoyo en la mesa de madera mirándola, esperando que me explique que demonios ha sido eso de hace un momento.

En ningún momento se gira a mirarme. Suspiro y antes de que pueda hablar mi madre me calla.

- No me corresponde a mi decirte la reacción que hemos tenido ambas... eso depende de ella.

Esta vez se gira y se dirige hacia mi. Su mano se posa en mi mejilla y me mira a los ojos. Cuando veo la sonrisa de su rostro me aparto.

- No es lo que piensas. Solo es una amiga

- Ya claro Stephen, y yo nací ayer... 

Suspiro y me cruzo de hombros evitando mirarla.

- Stephen James, te he criado y te he parido, se perfectamente cuando algo te interesa, y te aseguro jovencito, que con esa niña estas siendo un depredador... aunque no te hayas dado cuenta.

Mi madre me guiña el ojo y se va al salón con mis compañeros a servirles la merienda.

Me quedo mirando al suelo pensativo. Chasqueo la lengua, mi madre tiene razón... me estoy interesando en Karina como si fuera algo personal... como el boxeo o el posar ante una cámara. Algo que necesito en mi vida como el oxigeno.

Cojo mi chaqueta y salgo de la cocina. Miro a mi madre y esta sonríe. 

Salgo de casa y empiezo a correr para ir a buscar a Karina. Espero que no haya ido muy lejos... de noche es peligroso.