©¿Alfa Romeo?

🌸Capítulo 22🌸

Pov. Omnisciente.
[...]

— bienvenidos a Mcdonald's, mi nombre es Pamela Chu, ¿qué gustan ordenar?.

— "vamos Eren, no te rías. –pensaba el castaño mientras su cara se ponía poco a poco de color rojo debido a la contención de la risa.

— "te das cuenta de que si la dices seguido dice chupamela".– le comentó el león y Levi tuvo que morderse la lengua para no reír.— me da una hamburguesa sin papas, pero con Nuggets. ¿Y tú conejito?.

Eren en este preciso momento estaba en su lucha interna.— "¿porqué le pusieron ese nombre?".

— "Porque yisus así lo quiso"

— Eren.– llamó el mayor a su distraída pareja.

— oh, a mi una hamburguesa chica con mucha lechuga y con papas fritas.

— muy bien, su orden tardará máximo 15 minutos, si gustan pueden sentarse.– terminó de decir con una radiante sonrisa.

Alfa y Omega se fueron a sentar
algo retirados de la señorita que atendía, y cuando Eren se aseguró de que no estaba siendo visto, soltó la risa.— oh Dios, sé que está mal, jajaja, pero no lo puedo evitar.– comentó el ojijade, con una lagrimita en el rabillo de su ojo izquierdo.

Levi le sonríe, tratando de comportarse.— imagina a la pobre, seguramente a tenido muchas burlas, que hasta ya se acostumbró.

Eren deja de reír y mejor se pone a pensar en que regalo le daría a su León, pues en dos días más sería su segundo mes de noviazgo, y siete meses de conocerse.

El primer mes, le regaló un paquete de condones que estrenaron la misma noche.

Sip, eso se lo sugirió Armin y ni loco volvía a pedir su ayuda, duró casi una semana sin poder sentarse sin que le doliera el culo.

Y cabe decir, que Levi parecía un niño muy feliz, un niño muy caliente y con el líbido al cien.

En cambio, él le regaló un par de botas de color marrón y tacón pequeño, con la ayuda y supervisión de sus dos hermanas.
Las cuales, adoraban su relación y querían al conejito.

Eren olfatea el ambiente, dándose cuenta de que había mucho Omega soltando feromonas para atraer a su macho.

Una omega muy bonita y de buen cuerpo iba pasando por el lado de su alfa con una bebida en mano y "accidentalmente" se tropezó y le cayó a la camiseta gris de manga larga de su alfa.

— ¡perdón! me resbalé.– se excusa, sacando un pañuelo de su bolso dorado.

— "noo pues que resbalosa".– bufó el conejito en su mente.

— "Esta es la tercera vez en mi jodida Vida, que me pasa ésto".– pensó a sus adentros un molesto pelinegro, preparando su mejor sonrisa fingida.— no te preocupes, así déjalo.

— claro que no, es mi culpa de que estés empapado.

Y antes de osar tocar un sólo músculo del hombre, Eren le arrebata el pañuelo y le sonríe.— en serio, no te preocupes, que tiene un Omega que lo haga por éL Adios~.– le hizo un gesto con la mano y la otra chista enfadada , y se fué echando humo por las orejas, solamente volteó una vez, y el conejito aprovechó enseñándole el dedo medio mientras a la chica se le salían los ojos por tal acto sinvergüenza, finalmente se da la vuelta marchandose.

— "Que perra, que perra. Que perra es mi amiga".

— oye, bombón.

— shh.– se sienta en sus piernas y comenzó a secarlo.— ¿siempre te pasa ésto?.

— es la tercera vez.– admite, observando como todo un depredador a su conejito, quien tocaba con sus manos tibias su pecho y torso.

— se me quitó el apetito.– admitio con un puchero y Levi besa esa trompita de pato, provocándole unas suaves risitas.— no hagas eso~

— por?.– le sonríe con picardía, esa sonrisa que le hacía a Eren babear y quedarse como idiota.

Levi comenzó a dejar pequeños besos en su cuello, provocando que Eren riera.— ñoo~

— maldita sea, eres tan tierno y apetecible, me vuelves loco.

— lo sé~.

— "¿comemos en mi casa?".– sugirió indecente el mayor.

— comamos en tu casa.