Inocencia Robada (Fanfic 50 Sombras De Grey)

43: Piensa antes de cagarla

POV CHRISTIAN

Me duele la cabeza, me siento como si un camión hubiese pasado por encima mío. Abro los ojos, la luz que entra por la ventana y me molesta de inmediato

¿Quién se atrevió abrir la maldita cortina?

Antes de gritar para llamar a Gail, recuerdo que me sometí a una regresión y... Siento como si me hubieran tirado un balde de agua fría para despertarme. Maté a Ethan Kavanagh.

Maldita sea. ¡Soy un asesino!

Siento cómo el corazón empieza golpear en mi pecho. Soy un maldito asesino. Yo lo maté...

Me levanto de la cama rápidamente y me voy corriendo hacia el salón.

— ¿Hijo...?

— Papá, ¿tú qué haces aquí?— ¿Que hace él aquí...? No importa.

— Buenos días, hijo. ¿Todo bien?

— No.

— Antes que te sigas culpando por la muerte de Ethan Kavanagh, debes ver algo — me dice interrumpiendome.

— No me interesa...

— Ven, hijo.

Lo sigo hasta la oficina de Jason y veo que están en mi estudio, frente a mi computadora mis empleados de seguridad y la señora Jones, y a lado de ella, también está mi hermano. Yo solo quiero saber que hacemos aquí.

— Elliot— ¿Acaso se han puesto de acuerdo para venir a joder?

— Buenos días, hermano— él está parado al lado de Taylor con una taza de café en la mano.

— Buenos días, señor Grey— me dice mi guardaespaldas. 

— ¿Qué hacen ustedes aquí?— les pregunto molesto.

— Papá me dijo lo sucedido, y antes que  sigas pensando estupideces quiero que observes esto— me dice Elliot enseñándome la pantalla del ordenador.

Miro que me muestran las grabaciones de el área de estacionamiento, del ascensor y del vestíbulo de mi departamento. En ellas se ve como Elliot aparca y baja de la Q-7, abre la puerta trasera y me ayuda a bajar. Se acerca Taylor y le ayuda pasando mi brazo por encima de sus hombros y entre los dos me llevan al ascensor.

Dentro del cubículo, me suelto de ellos y con gesto de rendición me sueltan y de pronto me voy de frente, con un rápido movimiento reflejo ellos me detienen y me ayudan de nuevo a incorporarme y después de dos minutos me deslizo apoyado en la pared hasta quedar sentado.

Se abren las puertas y me voy para atrás. Asustados, Taylor y Elliot me levantan y me llevan a mi habitación, se ve que Gail me estaba esperando, porque me ofrece dos pastillas y un vaso grande de algo de beber. Los tomo y tras un rato alegando con Elliot, me desnudo frente a mi hermano y mis empleados y así me tumbo en la cama.

Mierda. Estaba frito.

Mi padre y mi hermano me miran burlones; yo sigo sin comprender qué hacen aquí y porqué me muestran esto. Me avergüenzo de imaginar que mi siempre amable y muy recatada ama de llaves me vió desnudo y apestando a sexo y alcohol...

—¿Notas algo raro?— me pregunta Elliot rompiendo con el silencio incomodo.

—Que aún no me dicen que hacen en mi casa y porqué me muestran esto. Nada más— les respondo con apatía.