Saga Omegaverse Marvel: Ya somos padres

Wolvesilver y Spideypool - Parte I

Peter se estaba llenando la boca con helado y galletas mientras miraba una tonta película romántica, de esas que le gustaban a Rogers, su mejor amigo.

Pero ahí estaba él, mirando la boba película y sufriendo por la estupidez de la protagonista, jamás lo admitiría en voz alta, pero en ese preciso momento sentía cierta parte de su vida reflejada en la pantalla.

Agradecía que sus padres y sus hermanas no estuvieran en casa, pues de otra forma no se dejaría ver de esa forma, ya que era obvio por quien estaba así y definitivamente sería vergonzoso admitirlo en voz alta.

Desbloqueo su teléfono esperando encontrar algún correo, algún mensaje, cualquier cosa de aquel estúpido alfa, al parecer había logrado aburrir a James Howlett porque desde hace algunas semanas no tenía noticias, mucho menos regalos. Eso era lo que quería, pero sinceramente no sabía que tan seguro estaba de esa decisión.

— Te ves patético — Peter dio un salto cuando escuchó la voz de su hermana menor.

— ¿No se supone que pasarías la tarde con Harley? — le gruñó el platinado mientras ponía la televisión en pausa y trataba de actuar dignamente, intentando mantener lo poco de dignidad que le quedaba, si es que le quedaba algo.

— Sip, pero Tony lo llamó para no sé que cosa — Lorna se encogió de hombros — y no tenía ganas de quedarme sola en el centro comercial — le quitó el helado — límpiate los mocos y salgamos juntos, hace tiempo que no tenemos una tarde de hermanos — propuso la muchacha que tenía algunos cabellos pintados de verde.

Así que un par de horas después, Peter y Lorna estaban paseando por las tiendas, estaban por la sección de bebés ya que tenían que buscar algunos regalos para la pequeña May Sarah Wilson Rogers, ya que sería el bautizo de la niña.

Peter realmente no entendía como la gente se enternecía con aquellas ropas tan pequeñas, mucho menos con aquellos inútiles juguetes, realmente ser padre no estaba en sus planes ni en un millón de años. Lorna por su lado no dejaba de chillar cada vez que veía algo lindo, queriéndolo comprar todo para su sobrina política, Peter solo reía explicando que de seguro la nieta de Stark ya lo tendría, por lo tanto, se les estaba haciendo más difícil encontrar algo que la niña no tendría.

Finalmente, luego de encontrar dos regalos perfectos los jóvenes Lehnsherr agotados comenzaron a caminar hacia los restoranes de la zona, Lorna ansiaba una hamburguesa junto a una malteada de chocolate, Peter estaba seguro de que necesitaba al menos tres de cada una para poder palear toda el hambre que tenían.

Pasaron junto a un elegante restorán japonés, de esos que estaban llenos de viejos con elegantes ropas, ambos hermanos hicieron muecas simulando ser personas de alta alcurnia, soltaron una carcajada, pero Peter dejó de reír al ver una imagen que jamás pensó.

Una de las ventanas daba a una mesa con una pareja, lamentablemente, el conocía muy bien al hombre que estaba en el lugar, no era menos que James "Logan" Howlett, y frente a él había una hermosa mujer japonesa, con piel tan blanca como la leche y un hermoso cabello azabache como la noche.

No pudo evitar mirar como ambos tenían las manos tomadas y se miraban con alegría, esbozando cálidas sonrisas. Repentinamente Peter sintió que se le había ido toda el hambre, mientras sus ojos estaban picando.

— Pet... — Lorna lo llamó mientras tomaba su brazo, sólo había visto a Howlett una vez, pero no tenía dudas que el hombre que estaba frente a ellos era él.

— Nada Lorna, no te atrevas a decir nada — susurró Peter con una voz gélida, tal como la que usaba Erik en algunas ocasiones, Lorna se estremeció ante tal actitud y prefirió no seguir molestando a su hermano con el tema, si Peter lo necesitaba, él lo hablaría en su momento.