oh, daddy! ❀ jikook.

no, no, no, bueno, sí.

"—¡Oh, no!", niega el menor con su cabeza. "—Tú te quedas, tenemos una exposición y un examen para la última hora. No puedes irte".

"—¡Mierda! Lo había olvidado", gruñe y cierra sus ojos con fuerza, maldiciendo en sus adentros. "—Ya qué, debo quedarme si no quiero reprobar".

El menor asiente y continúa con sus ejercicios. JiMin sólo sacó el móvil y se dedicó a avisarle a su novio que no llegaría pronto.

"—Señor Park, veo que no le interesa mi clase", el profesor habló en voz alta, asustándolo. "—Deje su celular en mi escritorio, se le entregará dentro de una semana".

"—¿Qué? No puede ser posible, profesor. Lo necesito", respondió exaltado. Si le quitaban el móvil en ese momento se muere.

"—Entonces leerá su conversación en voz alta, para toda la clase y se irá con reporte", soltó el viejo maestro, sonriendo con burla.

JiMin, obviamente, ni loco leería aquella conversación delante de todos. No quería que nadie supiera aquella cosa loca que llevaba con su pequeño y adorable novio.

Chasqueó la lengua y bufó con molestia. TaeHyung palmeó su espalda y Park sólo se levantó para dejar su teléfono en el escritorio del Profesor Jung.

"—Eres un idiota", le susurra el menor. "—¿No pudiste esperar a que la clase terminara?", preguntó curioso.

"—Pude pero no lo hice".

[...]

JungKook ya se había desesperado. El mayor llevaba una hora de retraso y no se había dignado a textearle. Suspiró y acomodó su pijama, la calentura se le había bajado y la molestia se le había subido, mejor fue a dormir un poco.

Suspiró e inhaló el delicioso aroma de las sábanas, olían exactamente a su novio y eso le tranquilizaba y relajaba un poco.

Dejó de pensar en lo sucedido y comenzó a caer en un tranquilo sueño en aquella cómoda cama.

[...]

"—¡Ah! Sólo espero que JungKook no esté enfadado".

"—Já. Pues después de cómo lo dejaste seguro que cuando llegues te asesina", se burla el contrario. "—Quizás no te vuelva a ver, amigo. Si éste es tu último día de vida, quiero decirte que siempre te quise".

"—Cállate, idiota." y la carcajada de TaeHyung no tardó en hacerse escuchar.

"—¿Me llevas? Aún así vas tarde, no pasa nada si vas y dejas a tu mejor amigo".

"—¡Pfff! Ya, sube y no molestes".

Después de dejar a TaeHyung en su departamento fue al suyo, algo cansado y con ganas de dormir. Sentía su estómago revuelto, sabía que JungKook se molestaría con él por no llegar, pero no era su culpa, tenía que asistir a esas dos clases.

Tomó las llaves y abrió la puerta una vez estuvo frente a ella. Pasó y arrastro sus pies en el piso, hasta llegar al sofá. Aventó sus cosas y caminó hasta su habitación, supuso que ahí estaba su novio después de no oír ningún ruido.

Y sí, lo encontró ahí. Durmiendo tranquilamente mientras abrazaba una de las almohadas.

Sus ojitos estaban cerrados y sus lindos labios entre abiertos, soltando suaves ronquidos.

Era tan adorable.

JiMin buscó su móvil para poder fotografiar aquella tierna escena.

"—Puta madre, que me lo quitaron", gruñe al no encontrarlo.

Jeon abre sus ojos y mira a su novio delante de él. Frota su ojo derecho y hace un pequeño puchero.

"—Al fin llegas", susurró y bostezó después.

"—Lamento llegar tarde, me han pasado tantas co...".

"—¿Podrías guardar silencio por ahora y venir a dormir conmigo?", pidió el menor después de interrumpirlo.

JiMin asintió y se deshizo de sus pantalones y playera para dormir cómodamente. Se acostó y se acurrucó cerca de su novio, besando su nuca dulcemente.

"—Lo siento".

"—No importa, ya estás aquí".