Preso de tu piel ~ Aitedasquad

CAPÍTULO 31

-X:¿Vosotros quiénes sois?-preguntó aquel hombre con aspecto descuidado y con pinta de llevar varias semanas sin asearse.

-Cepeda:Ella es Aitana y yo Cepeda, venimos a hablar con usted sobre su hijo Adrián.

-X:Anda, pero si sois los inútiles que quieren adoptar a ese mal nacido.

-Aitana:Oiga, le estamos hablando con respeto así que le pido que haga lo mismo eh...

-X:Mario-dijo terminando la frase de la catalana-pasad.

El gallego cogió a la chica de la mano,no sabe si por darle tranquilidad a ella o proporcionársela a él mismo.

-Mario:¿Qué quieren?

-Cepeda:Queremos acogerlo en nuestra casa y tener la custodia.

-Mario:¿Solo eso?-la catalana asintió- os arrepentiréis.

-Aitana:Adrián es un pequeño estupendo,que con sólo una mirada y su diminuta sonrisa es capaz de alegrarte el día y si usted no ha sido capaz de ver eso no es nuestra culpa- dijo la catalana ya con los ojos cristalizados.

-Mario:Que sí, venga, ¿dónde hay que firmar? Haced lo que os de la gana con la mierda del niño.

Aitana le entregó los papeles ya firmados por ellos.El hombre firmó y los echó de su casa diciéndoles que no quería verles más por allí.

Fueron directos a comisaría, deseando tener entre sus brazos a aquel pequeño terremoto que tenía la capacidad de descolocarlos con sólo una sonrisa. Pero sabían que eso no iba a ser tan rápido como ellos querían.

-Comisario:Bueno, pues parece que está todo correcto- dijo echándole el último vistazo a aquellos papeles firmados.

-Aitana:¿Entonces podemos llevárnoslo?

-Comisario:Mañana,hoy tenemos que arreglar unos cuantos papeles. A partir de mañana podéis recogerle cuando queráis.

-Cepeda:De verdad muchísimas gracias  por todo -dijo estrujándole la mano al comisario.

-Aitana:Luisinnn...-dijo ya en casa de la catalana.

-Cepeda:Dime amor.

-Aitana:¿Qué te parece si vamos preparando su habitación?

-Cepeda:Me parece buena idea pero, ¿porque no lo hacemos con él? Y así que decida el color de su habitación y todo.

-Aitana:Vale,pero esque sino,¿dónde dormirá?,porque  mientras que la terminamos...

-Cepeda:Siempre habrá un hueco para él en nuestra cama.

-Aitana:Luis te quiero muchísimo.

-Cepeda:Yo te cuero más-dijo rodeando a la chica por su cintura.

La catalana despertó por el frío del aire acondicionado que sintió sobre su espalda desnuda debido a su noche anterior con el gallego. Lo cierto que no había dormido mucho de lo nerviosa que estaba por abrazar a su pequeño.

-Aitana:Luis...-le susurró.

Al no obtener respuesta decidió que iba a despertarlo de otra manera.Dejó besos por su cuello,por su pecho,bajó hasta su ombligo,y llegó a tirar del elástico de los calzoncillos del gallego para colar su mano por ellos.

-Cepeda:Aitana...-gimió al notar las manos de la catalana moviéndose  en su centro.

-Aitana:Hombre,buenos días,ya estás despierto- dijo reincorporarse hasta llegar a tumbarse sobre el pecho desnudo del gallego.

-Cepeda:La madre que te parió.

-Aitana:Yo también te quiero.

-Cepeda:Prepárate para la venganza.

-Aitana:Sabes que luego no puedes resistirte a mí.

-Cepeda:Lo sé,quien se resistiría a ti- dijo atrapando sus labios, intensificando cada vez más el beso.

-Aitana:Luis Luis,para,venga,que hay que ir a por Adri.

-Cepeda:Es que me pones mucho.

-Aitana:Idiota.

-Cepeda:Voy a hacer el desayuno.

-Aitana:No, mejor date una ducha fría que creo que te hará más falta.

Veinte minutos después se encontraban en frente del centro de acogidas.

-Secretaria:¿Puedo ayudarles en algo?

-Cepeda:Venimos a por Adrián.

-Secretaria:¿Apellidos?

-Aitana:Bueno,antes no lo sabemos,pero ahora Cepeda Ocaña.

-Secretaria:¿Sois Aitana y Luís?

-Cepeda:Los mismos.

-Secretaria:Está desayunando pasad.

-Adrián:Mamá- dijo tirándose al cuello de la chica.

-Aitana:Amor...

-Adrián:Os he echado muchisisimo de menos- dijo esta vez en brazos  del gallego.

-Cepeda:Y nosotros a ti pequeño.

-Aitana:¿Has terminado de desayunar?- el pequeño asintió- pues venga vámonos.

-Adrián:¿A dónde?

-Cepeda:¿A comprar cosas para decorar tu habitación?

-Adrián:¿Eso es que puedo vivir con vosotros y que ya si sois mi papis cien por cien?

-Aitana:Si cielo.

Ya en el coche solo escuchaban al pequeño discutiendo el solo cómo iba a ser su habitación,lo que ya tenía asegurado era que quería que fuera verde, el color de la esperanza. Porque como él mismo explicó a los dos adultos,ese día en aquel centro no perdió la esperanza en verlos aparecer por la puerta y al fin se cumplió,a lo que ellos se quedaron mirándose intentando entender cómo podían salir aquellas palabras de un niño tan pequeño.