Preso de tu piel ~ Aitedasquad

CAPÍTULO 39

Tras tanto tiempo separados, tanto tiempo lejos de lo que se llama hogar, cuando vuelves a casa, asusta el pensar que puede que sea la última vez, o que te puedas alejar tanto que no sepas cómo volver.
Quizás fue eso lo que le pasó a Aitana.
Ansiaba tanto regresar a su hogar, que cuando volvió tan de repente, se asustó y se alejó sin pensar, causando una mirada confusa por parte de su acompañante, aquel que le había salvado la vida.
-Lo siento mucho, de verdad- dijo Aitana, volviendo a echarse a llorar.
- No sientas nada peque, de verdad que te entiendo. Es normal que te asuste la idea de volver, pero...
- No, no eso eso.
- Entonces, ¿qué pasa?- Luís cada vez estaba más confundido.
- ¿Y si no sale bien, Luís?
- Aitana, volvería contigo mil y una vez más, porque tú eres mi hogar. Muchas veces nos alejamos de casa para conocer sitios nuevos, culturas nuevas, experiencias nuevas, pero siempre acabamos volviendo a casa, siempre nos refugiamos en nuestro hogar, en el que nos sentimos seguros y cómodos. Pero yo sé que tú eres más que mi hogar.
Tú eres mi corazón, eres algo esencial en mi vida, y en estos cinco años en los que me he alejado de ti, he estado tan ciego, intentando olvidarte, que no me he dado cuenta de que me estaba asfixiando. Aitana, si te pasa algo me muero, ¿lo entiendes ahora?
-Luís, yo no soportaría que me rompiesen una vez más el corazón.
- Aitana, no te voy a prometer nada, porque ya vimos que eso no sirve para nada. Pero estate segura, que yo soy el que menos quiere hacerlo del mundo. No quiero que te pase nada Aitana. Cuando me enteré de lo que estuviste a punto de hacer, me odiaba  a mí mismo por ser el causante de ello.
- Yo tampoco quiero que te pase nada Luís, pero me veía en un pozo del que no salía luz cuando miraba hacia arriba. Adrián ha sido lo único por lo que he seguido luchando. Quiero volver a intentarlo contigo, pero quiero ir despacio, asegurándome de que hacemos las cosas bien, con calma.
- Jamás te metería prisa Aitana, pero que sepas que estaría dispuesto a que me rompieses el corazón un millón de veces si supiese que acabaría volviendo a ti.
- Te quiero mucho, Luís.
- Yo más a ti, Aitana. ¿Vamos a buscar a Adrián?
- Vale, pero, ¿paramos antes a por unas palomitas y cuando volvamos nos las comemos entre los tres y vemos una peli?
- Es el mejor plan que oigo desde hace cinco años- dijo Luís, haciéndose ilusiones por el principio tan bonito que estaban empezando a construir.
- Jo, yo también echaba de menos esto, no te imaginas cuánto.
- Creetelo si te digo que sí lo sé- Luís sabía más que nadie, aparte de Aitana, lo que era estar con alguien a quien no quieres y no poder estar con la persona de la que en verdad estás enamorado.
Y así, volviendo a ser la familia que eran, montaron en el coche y unieron sus voces creando una melodía acorde a la del cantante de la canción, aunque en verdad esa sobraba, pues eran sus voces las que mejor se complementaban.
Tras recoger a Adrián de la casa de los yayos, se apoderaron del sofá en el que más de una vez habían compartido risas, llantos y conversaciones, y pusieron cualquier película que hubiese por Netflix, pues eso era lo de menos. Volvían a estar unidos, volvían a ser tres en el sitio de uno, y volvían a reír sin saber por qué, porque sí, así eran ellos, y así seguirían siendo, porque a la familia nada la separa, porque juntos, son imparables.
Bueno, esto puede que esté llegando a su fin, aún no sabemos cuánto queda exactamente, pero queremos disfrutarlo y exprimirlo lo máximo posible, tanto nosotras como tod@s vosotr@s.
Os queremos mucho y que sepáis que intentamos subir lo máximo que podemos. Espero que os guste y que la espera haya merecido la pena. Os repito, os queremos mucho, mucho.
Por cierto, espero que tod@s vosotr@s y todas vuestras familias estén bien, lo digo por esto del COVID-19.
Ahora más que nunca tenemos que luchar juntos contra este virus, porque es así la única forma de ganar. No olvidéis que todo saldrá bien, y que después de la lluvia sale el arcoiris. Nos tenemos que quedar en casa, por el bien de todos, sobre todo de los más débiles.
Os deseamos lo mejor, mucha fuerza y a seguir luchando.