Capitulo 4

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A eso de medianoche llegó la hora de retirarse, mañana el plan era ir a montar a caballo por la mañana y no convenía tampoco trasnochar mucho. Amaia no había cruzado palabra con Alfred desde el "malentendido", el había estado todo el rato hablando con unos y con otros y riendo y dando coba a las "damas" que lo miraban embobadas. Amaia por su parte no estaba tan divertida y solo respondía con monosilabos si en algún momento le preguntaban a ella directamente.

Entraron en la habitación sin dirigirse la palabra y Alfred se fue al baño a cambiarse - raro en el -. En ese momento el móvil de Amaia empezó a sonar. Era Maddi.

- Hola Maddi

- Ya era hora tia, llevo llamándote toda la noche y no ha habido manera ¿que estas muy entretenida????

- Que va tia, si es que me deje el movil en la habitación

- Bueno cuenta, ¿que tal? ¿como es?

- Para paraaaaa, pues el tema trabajo creo que va por muy buen camino, el otro tema está increiblemente bueno.

- ¿si??? joder tia aprovechaaaaa

- ¿que aproveche????, si me ha costado su compañía 4000€ diarios no te digo lo que me puede costar follarmelo

- ¿y para que coño quieres el dinero???, tienes semejante bombon al lado y ¿no vas a hacer nada??, tu no estas bien de la cabeza. Tia, deja la cordura por una vez y disfruta

- Que no Maddi, que no se ni como actuar ¿que le digo? ¿Y tu cuanto cobras por un completo?

- Jajajajajajjaa, que burra eres. Pues no se, nunca me he visto en esos menesteres pero digo yo que a lo mejor si te le insinuas el mismo te dice algo ¿no?

- Mirara ella que lista, que no, que me da mucho corte.

- Mira Amaia, como el Lunes no me cuentes detalladamente lo bien que te lo has pasado con semejante monumento en la cama a mi no me vuelvas a dirigir la palabra. Y si te hace falta dinero no te preocupes, que yo te lo presto, todo sea por la causa.

- Eres una capulla, tia en serio, que no es tan fácil. Te dejo que esta en el baño y creo que ya sale.

- OK, y ya sabes, al ataqueeeeee.

Alfred salió con un pantalón como de lino blanco, a modo de pijama, y una camiseta blanca. Definitivamente estaba mosqueado porque sino no saldría tan tapadito, penso Amaia. Ella también se había puesto su pijama mientras estaba hablando con su amiga, pantalón largo rosa y camisa a juego blanca y rosa, osea, lo que era un pijama.

- Alfred, lo siento, de verdad, perdóname. Esto para mi es nuevo y siento si te di a entender algo que no pretendía. Lo único que yo pensaba es que Esther es muy atractiva y sabe como seducir a un hombre, creo que es dificil resistirse a ella, pero te juro que no lo decia por tu trabajo - Amaia se acercó a el timidamente. Alfred la miró y de repente sonrió -

- Perdonada. No te preocupes, realmente en otras circunstancias reconozco que muy probablemente no me hubiera negado eh?????. - Amaia le tiró un almohadon -

- Serás cabrón.

- Nenaaaaa, toda una abogada y con ese vocabulario, creo que tu y yo vamos a tener una larga conversación - Le dijo el devolviendole el golpe con el otro almohadon -

- ¿Quieres guerra nene???, Pues mira que la vas a tener. - Y dicho esto se lanzo a por el, tirándole del empujón en la cama y quedando encima de el. Continuaron riendo un buen rato hasta que quedaron rendidos uno al lado del otro boca arriba en la cama y con dolor de costillas de tanto reir.

- Amaia, háblame de ti. Pero en serio, no lo que me he aprendido en el guión de esta historia. - Alfred se giró en la cama y la miró apoyando la barbilla en uno de sus brazos. Amaia hizo lo mismo girándose hacia el.

A GOLPE DE TALONARIOWhere stories live. Discover now