- Amaiaa, Amaiaaa - Maddi llegó corriendo a su lado - Guauuuuu, ¿ese era Alfred?, Madre mía, que bueno que esta tia. Cuéntamelo todo, sobre todo los detalles porque como no me digas que te lo has tirado yo misma te mataré con mis propias manos. - Maddi seguía hablando sin parar - . Llevo un rato esperando que llegaras pero tiaaaaa, si que habéis tardado y luego media hora para despediros - en ese momento se dio cuenta de que su amiga no respondía - ¿Amaia?
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- ¿Amaia?, ¿Estas bien?
- Eh???, perdona Maddi, si si, estoy bien - le dijo cogiendo sus maletas y abriendo la puerta del portal. - Solo estoy myyy cansada - ¿subimos?
- ¿cansada??, ya ya, y quien no lo estaría, por diossss, espero que estés derrotada eh??? cuenta ..... cuenta.
Amaia acababa de abrir la puerta de su piso y Maddi la cerró detrás suyo, Amaia se dirija a su habitación, sin decir nada, para deshacer su equipaje pero Maddi la cogió y la llevo hasta el sofá del salón, la sentó y ella hizo lo mismo en el salón de enfrente.
- Ni te pienses que te vas a escapar antes de contármelo todo ¿porque hay algo que contar verdad???
Amaia no pudo evitar sonreír ante el interrogatorio de su amiga y la mirada expectante que esta tenía y movió su cabeza en señal de asentimiento.
- Lo sabiaaa, biennnn, por una vez me has hecho caso y te has dejado llevar, ya era hora y ¿que tal en la cama?
- Jajajajajajajaja. pues..... fantástico, increíble, maravilloso.... la mejor noche de mi vida - dijo Amaia reviviendo por unos momentos imágenes de su noche con Alfred -
Maddi hizo el amago de desmayarse y ambas amigas rieron con ganas.
- Nena ¿y cuanto dices que vale???, me da lo mismo arruinarme pero yo quiero uno.
- Pues mira, eso si que no lo se, porque no se lo pregunte, saqué el dinero que yo pensé que podía costar, pero después de la noche que me ofreció el chaval..... estoy esperando que me llamen para reclamarme más pasta. Le di el sobre pero no lo abrió.
- Vaya, encima de estar buenisismo, ser increíble en la cama, es todo un caballero. Ainsssssss. Pero bueno, volviendo a la realidad, ¿y lo tuyo? lo has conseguido ¿verdad?
- Pues si - le dijo ella suspirando - tienes delante de ti a la nueva socia ejecutiva del bufette.
- Maddi la abrazo - Enhorabuena mi niña, si ya sabia yo que esto iba a pasar, te lo mereces. Y encima has echado el polvo de tu vida. ¿que mas puedes pedir?
- Ya, a ver que tal me va mañana - dijo tristemente. Amaia se levanto pero Maddi, mirándola fijamente la obligo a sentarse de nuevo.
- Eyyy, ¿que pasa?
- Nada, de verdad, ye te dije que solo estaba cansada.
- Ayyyy, Noooo, nooooo, no me lo puedo creer
- ¿que estas diciendo? ¿estas loca?
- ¿Loca yo?, conozco esa mirada Amaia, tu te has enamorado de ese tio
- Anda ya, ¿como quieres que me enamore de alguien a quien apenas conozco?, si solo hemos estado juntos 3 días y la mayoría del tiempo acompañados, ademas ¿sabes con quien estas hablando?, que soy yo, toda una mujer independiente y segura de si misma - Amaia lo dijo intentando que sonara convincente pero evidentemente no lo consiguió -
- Ya, ¿Y a quien quieres engañar?, que soy yo, tu mejor amiga y conozco esa mirada.
Amaia puso su cabeza entre las manos y ya no puedo evitar llorar mientras Maddi se sentaba a su lado e intentaba consolarla abrazándola fuerte.
- ¿Y que quieres que haga? si soy una idiota - consiguió decir entre hipido e hipido - una idiota.
- Amaia, mírame ¿quieres?, no eres idiota, eres mujer y tienes corazón, contra eso no se puede luchar. Pero ahora escúchame - Amaia levanto los ojos y la miró - tienes una estupendisima carrera por delante, ahora si tienes lo que siempre habías deseado, por lo que tanto has luchado. Para el has sido solo un trabajo Amaia, y no dudo que agradable porque eres una mujer increible y no creo que todas sus clientas sean así, pero solo trabajo. El se dedica a esto, ha cumplido y ya está. Punto final, olvídate de el y sigue con tu vida. Lo tienes todo Amaia, o al menos todo lo que siempre has querido tener, mírate, con solo 30 años donde has llegado, a lo más alto.
- Maddi, ¿Y entonces porque me siento tan vacia?
- No digas eso, eso lo ves ahora así porque el te ha deslumbrado, pero Amaia, que se dedica a acostarse con mujeres ¿que pretendes???
- Si eso lo se Maddi, y bien que lo se, además TU me diste la idea. - Amaia continuaba llorando -
- Joder Amaia, pero solo para que te ayudase a conseguir tu sillón en esa sala de juntas. Alfred debe ser para ti solo un medio para conseguir un fin y no es por nada pero además ha sido un medio muyy caro. Y ya ha pasado, se ha acabado ¿vale? OLVIDALO.
Amaia sabía que su amiga tenía razón pero no podiá dejar de llorar. Que ella recordara hacia años que no lloraba por nada ni por nadie. Intentó sobreponerse y poco a poco fue sintiendose mejor.
- ¿te hago una tila?
- Gracias Maddi, no hace falta, ya estoy mejor. Lo que me hace falta es una buena ducha y un buen descanso.
- ¿quieres que me quede?
- Que no, de verdad, ademas hoy me he levantado con un pedazo bombon en mi cama y ¿pretendes que mañana lo primero que vea sea tu cara??, - Le dijo Amaia bromeando - De eso nada.
- Hombreee, pues visto así va a ser que tienes razón. Ya veo que estas mejor, pero ya sabes, si necesitas algo, lo que sea, me llamas ¿vale??
- Que si pesadaaaa, ya sabes que lo haré. Pero no te preocupes, estoy bien - Y acompañó a su amiga a la puerta. Cuando la cerró se sintió aliviada. Maddi era su mejor amiga pero ahora necesitaba estar sola.
Amaia se dió un buen baño caliente, se puso el pijama y se dispuso a meterse en la cama, no quiso ni cenar, no tenía nada de hambre. Cuando estaba a punto de meter ya un pie dentro de su cama se fijo en la maleta que aun no había deshecho.
Bueno, es igual - penso - mañana no se habrá movido de allí y yo no puedo más, asi que Amaia a dormir.
Pero era superior a sus fuerzas el tener algo fuera de sitio, así que se levanto pensando que total en diez minutos la tendría lista. Cuando estaba a punto de acabar vió una punta blanca que asomaba debajo se su jersey, y cuando tiro de ello..... se quedo de piedra.
Pero.... ¿que hace aquí el sobre que to le di a Alfred?.
Tenía el sobre en sus manos, con el nombre de el tachado y en su lugar escrito el suyo. Lo abrió en seguida y vió que estaba todo el dinero y algo más. Un papelito blanco que ella no había dejado por lo que eso significaba que lo había puesto Alfred. Con las manos temblandole por los nervios lo abrió y al leerlo Amaia se derrumbó.
Amaia, cuando me acuesto con una mujer por trabajo acostumbro a cobrar por adelantado y no porque no me fie, sino para evitar precisamente equivocos como este. Que te quede claro que si me acoste contigo fue porque me apetecia hacerlo y no por obligación.
P.D. Por cierto, si alguna vez necesitas de mis servicios te aviso de que con esta cantidad no cubres ni la mitad de la noche.
Alfred.
Amaia no paraba de llorar, la había cagado y bien, pero como iba a saber ella lo que el pensaba - Claro, si es que soy idiota. Si se lo hubiese preguntado como hubiera hecho cualquier mujer normal esto no habría pasado- hablaba en voz alta. - Sabré mucho de negocios pero esta claro que de hombres no se una mierda. Diossss, Alfred, necesito encontrate.
Llamó en seguida a Maddi, le daba igual la hora que fuese. Su amiga le cogio el telefono con voz somnolienta pero en cuanto vió lo alterada que estaba y ella le explicó todo, se desperto de golpe y quedaron en comer al dia siguiente.
