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busancorea del sur. 3 años atrás

un jungkook de dieciocho años se encontraba reposado en la pared de la sala en donde se suponía que recibía tutorías particulares de piano por parte de su hyung favorito; yoongi. desde que llegó, sus piernas y manos no habían parado de temblar, pues el día anterior, el mismo jungkook fue un poco directo con su mayor, unas palabras no habían dejado de resonar en su interior.

"— puede que me asuste un poco el amor, ¿sabe?— brotó de los labios del castaño menor hacia el pálido azabache que presionaba algunas teclas del piano al azar, el cual dejó su acción en cuánto escuchó aquello.puede que me dé miedo darle un 'sí' a hobi hyung, pero al pensar que el amor me lo brinda usted, deja de asustarme."

y eso fue lo que bastó para que min tragara saliva, mirara por unos segundos expectantes a kook para levantarse tan sigilosa y desconcertadamente que jeon no se diera cuenta de qué era lo que había ocurrido y ahora por consecuente un apenado jungkook estaba tapando sus orejas al sentirlas tan calientes tanto como sus mejillas, escondía su cabeza entre sus muslos sentado en el suelo frío del lugar reclamándose internamente el hecho de que nunca debió decir eso, tal vez la relación de ambos no sería igual por la imprudencia de jungkook.

y luego cayó una lágrima, seguida de otra... y de otra.

estaba dispuesto a irse, porque sabía que yoongi ya no iría ese día a instruirlo con el piano, seguramente ya no querría seguir siendo su tutorallí se intensificó el llanto, pero hizo silencio porque supo que alguien estaba en el lugar. era yoongi. 

— lamento haber tardado... mi hermana amaneció con algunos dolores y tuve que llevarla al doctor, hasta ahora, ¿has practicado el solfeo que te dejé ayer?— despreocupado preguntó el mayor aún viendo como jeon tenía lágrimas por todo el rostro y su cuerpo temblaba con sollozos.

— hyung... ¿puedo explicarle lo de ayer? es que... me siento muy culpable de que usted...— cerró muy bien su boca porque no encontraba las palabras, estaba tan nervioso, lo estuvo más cuando el bajito se fue acercando más con un gran ceño fruncido.

—¿que yo qué, jungkook? explícate mejor.— lo odiaba, el menor odiaba el hecho de que yoongi fuera tan miserable de hacerlo poner tan nervioso, no era justo. había practicado frente al espejo y las palabras salieron mejor de lo que esperaba pero ahora no hacía más que temblar mientras min relamía sus labios esperando a que hablara.

— de que usted me guste...— listo, ahora venía lo peor, esperar un respuesta por parte del contrario. jungkook tenía la cabeza baja y no se dio cuenta pero las manos de yoongi se encontraban detrás de su espalda y las palmas de éstas estaban siendo lastimadas por la fuerza con la que clavaba sus uñas por culpa de la ansiedad. yoongi suspiró e hizo una mueca que kook no pudo descifrar.

— hoseok está loco por ti...

— pero yo estoy loco por usted.— las piernas de yoongi quisieron flaquear pero se mantuvo inerte, casi sin respirar.

— yo no lo estoy por ti... y no puedo ofrecerte un amor que no siento, lo lamento.— el espíritu, corazón y mente de jungkook ese día fueron rotos a pedacitos por una persona que lo amaba con todas sus fuerzas pero que quería, también, el bienestar de su amigo.

lo que nunca supo jungkook es que yoongi estuvo a punto de reponder de la manera más sincera.

"entonces estemos locamente enamorados juntos, por favor."

scary to love (myg + jjg) Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt