A estas alturas no entiendo o no sé un par de cosas, déjalo en millones mejor, porque son tantas que he perdido la cuenta de varias que surgen cuando estoy por olvidarlas.
No sé cómo tener una mala memoria, para olvidar y no recordar la forma de tu cara y la forma en la que tus ojos se achinan cuando sonríes.
No sé dejar de escribir sobre ti o sobre las cosas que vivimos, incluso sobre las cosas que no pasaron pero que habíamos hablado.
No sé traerte de vuelta, cuando siempre fui consciente que no te quedarías. Que nuestro para siempre era una tempestad efímera y pasajera repleta del desastre de nuestros sentimientos.
No sé si la mejor decisión fue tirar la toalla y hacerme un lado, aunque mi parte lógica me grite que sí lo fue, que es mejor así, mi parte masoquista me mira con mala cara y percibo su molestia y resentimiento.
No sé qué piensas respeto a todo desde que volvimos a esa normalidad que para mí es inquietante y desconocida, no es bien recibida.
No sé detenerme cuando recuerdo y me ahogo.
No sé reprimir mis ganas de ver algo de tu rastro.
No sé y no me permito guardar la esperanza de que vuelvas a llamar con cualquier excusa.
No sé ni que pensar en nuestro inevitable encuentro, mentiría si niego que no me he imaginado todos los escenarios.
No sé desaparecer todo lo que siento por ti, ni puedo arrancarlo de raíz debido a que se adueñó del puesto donde lo coloqué.
No sé liberarme del despertar a media noche y observar el lado vacío de mi cama.
No sé nivelar mis niveles de ansiedad repletas de tu esencia.
No sé detener el flujo frenético y errático de la llovizna que arrastra y azota en mi puerta los residuos que dejó tú desastre.
No sé abrazar la tranquilidad que me arropa al ser consciente de mi posición estable y pacífica.
No sé arrancarme de la mente mi deseo de ser ella, aunque ser ella no es lo que deseo ser.
No sé limitarme después de soltar las cadenas que me ataban y condenaban.
No sé la razón de no llorar tu ausencia, aunque me sienta muy triste y me duela recordarte.
No sé qué hacer cuando deseo gritarlo y soltarlo, pero no deseo que lo estropeen más de lo que ya está.
Lo único que sé es que eras como un mal necesario que llegó para obtener una parte esencial de mí: mi escritura.
DU LIEST GERADE
Un sueño a través de letras
RomantikTengo está loca idea de hacer perdurable, a través de letras, mi historia con ella. Como queriendo que no se pierda entre la neblina del olvido, entre el pasar del tiempo y su enorme despiste; tan solo quiero que no solo viva el recuerdo en mi memor...
