Un sueño a través de letras

Lo que es...

Es contradicción andante, es impulsividad culpable, es la representación de tentación dominante y más. Es la primera mujer que se molesta tan solo por tenerla como prioridad, por darle la importancia que tiene en mi vida y por no incomodarme complacerle en lo que me pida, incluso cuando me pide que piense primero en mí en lo que necesito, da vueltas alrededor de todo lo anterior y con sutileza pide que no me vaya, que me quede, que no hay necesidad de huir porque no hay medida suficiente de tiempo que tenga el poder de arropar y abarcar todo lo que nos falta. De alguna manera el destino conspira y le da todo lo que quiere, tal vez no se da cuenta, tal vez no lo ve de esa manera, tal vez incluso no se permita percibir que al tenerlo todo no lo hace más fácil para mí. Y pasa, pasa de manera silenciosa, observa de la misma manera, calla cuando deseo escucharla y pregunta en susurros como estoy, porque sabe que me ahogo, que aunque estoy no deseo estar, que aunque la deseo cerca obtengo miseria al tener que ocultar que me muero por tenerla. Y se dan cuenta, me atrapan observándola con impaciencia, me hacen preguntas que opto por evadir y es inevitable volver a verla como polilla al sol, es casi no imposible no preocuparme por su bienestar, es netamente impulsivo callar la respuesta de algo que para mí es evidente y en algún momento palpable mientras me penetra con su mirada conocedora de mi verdad, esa verdad que su mayor secreto y su carga, que espero nunca sea de culpabilidad.