¿Que demonios...? (Camila g!p)

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Mire a mi esposo rápidamente, tanto él como yo no despegamos la mirada de la tv, era la película más erótica de la vida, estaba casi segura que esas escenas eran de sexo real.

La película había terminado hace rato y ambos seguíamos viendo la tv.- Wow, eso fue...- dije.- Algunas vez has querido estar con alguien más?.- preguntó y lo miré.- No, y tú.- si lo había imaginado alguna vez.

- Lauren.- él sonrió.- Tal vez, tú?.- dije.- Si, porque no lo hacemos.- dijo, reí, y él dejo de sonreír.- Hablas en serio?.- él asintió mordiéndose el labio.

- Liam!.- grite.- Que, te amo, tu me amas, solo es sexo, dime que no te encantaría, no lo deseas.- eso me estaba poniendo muy nerviosa, lo había deseado hace mucho, amo a mi esposo, pero esto había sido una de mis fantasías.

- Entonces?.- dijo, lo mire.- Todo estará bien?.- pregunté.- Por supuesto.- dijo serio.

Agradecía que él ya no sacara el tema esa noche, pero no había podido sacarlo de mi cabeza en todo el día.

- Amor.- Liam toco mi hombro.- Sí?.- me levanté.- Tenemos que irnos, llegaremos tarde.- tomé mis cosas y salíamos.

Las cenas de beneficencia eran horribles, gente que se cree superior uno de otro, muchas personas con ropa altamente costosa, lo único bueno era el hecho mismo por lo que se hacía, lo demás era asquerosamente pretencioso.

- Solo un rato, quita esa cara.- dijo Liam,  suspiré y bebí vino, mire a las mismas personas de siempre, presumidos, arrogantes, mal educados, ni las escuelas más caras y dinero los hacían cambiar.

Mire alrededor, Liam hablaba con algunos socios, las mujeres de estos hablando entre ellas, yo simplemente me quería ir.

La noche había transcurrido lenta, pero bastante tranquila, a diferencia de años pasados.

Ví a un grupo de mujeres bastante escandalosas, las mire un rato, no entendía que pasaba, hasta que ví el motivo de su intensa forma de llamar la atención, era una mujer delgada, muy bien vestida, su rostro era perfecto, y su cuerpo parecía esculpido a detalle, vaya que tenía a las mujeres emocionadas, ella era magnética, no podía dejar de verla.

- Ella es hermosa, pero si lo que quieres es una mujer, ella no te servirá.- mire a Liam.- Que, de que hablas.- se puso detrás de mi.- Que ella no te servirá si lo que quieres es una mujer.- volvió a decir.

- Ella tiene esto.- tomo mi mano y la puso en su entrepierna, lo empujé y mire a todos lados.- Liam, no hagas eso.- así que ese era uno de los motivos por lo que tenía así a todas.

La seguí mirando.- Es una buena elección, es hermosa, inteligente, sincera, y lo mejor, tiene eso que te encanta.- empujé a Liam y reí.- Como la conoces tan bien?.- pregunté.- Socia mayoritaria de la empresa, e platicado un par de veces con ella, en reuniones tiene así a las mujeres.- volví la vista a ella pero ya no estaba.

-Te dejo, piénsalo.- me guiño y me dejó.

No iría detrás de esa mujer, ya tenía suficientes detrás de ella.

Me acerque a la barra, y pedí otro vino, sin pensarlo me encontraba buscándola de nuevo.- Que suerte tiene la persona que buscas.- dijo alguien detrás de mi, haciandome tirar el vino en mi vestido.

- Mierda, perdón.- se puso frente a mi, y era ella, pasé saliva mientras ella se estiraba por algunas servilletas.- Joder, puedo mandar a lavarlo.- negué, sin poder moverme.

One Shots (Camren G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora