❈10❈

439 38 3
                                    

AU! (no sé cómo clasificar esto ^^').

SeHun cogió todas sus ropas restantes del armario y las tiró de cualquier manera en la maleta encima de la cama, entró al baño, fue al salón y volvió, llevándose todo lo suyo que iba encontrando por el camino.

No seguiría en esta casa ni un minuto más.

Detrás de él, una mujer de pelo azabache iba gritando injurias y golpeándole la espalda, pero SeHun no pensaba hacerle caso, ya no más.

Ya estaba harto de Kim SunHee, su tan sola presencia ya era agobiante y lo ponía enfermo. ¿Dónde estaba con la cabeza para pensar que de verdad ella podría tener futuro? ¿En serio fue tan ingenuo por creer que ella cambiaría con el tiempo? ¿que solo era una mala fase?

—¡PARA YA, MALDITO EXAGERADO! —volvió a gritar detrás de él— ¿QUÉ CREES QUE ESTÁS HACIENDO? ¡NO PUEDES DEJARME, ME LO PROMETISTE! ¡SI SALES POR ESA PUERTA JURO QUE ME MATARÉ!

—No me importa —no era la primera vez que escuchaba estas palabras, así que ya no le afecta como antes. Le daba completamente igual lo que ella hiciera cuando él ya se encontrase lejos.

SeHun conoció a Kim SunHee cuando él trabajaba en un restaurante en el centro de la ciudad, hace unos tres años. En aquel entonces ella tenía tan solo 18 años y SeHun 22, iba todos los lunes al restaurante a preguntar si estaban buscando personal para trabajar, obteniendo siempre una negativa.

A SeHun le daba mucha pena la chica, con sus ropas arrugadas y viejas, profundas ojeras bajo los ojos, el pelo siempre atado en un moño y muy delgada. Pero lo que más le partió el corazón fue ver como arrastraba detrás de ella un chico más joven en las mismas condiciones.

SeHun les dio cobijo en su departamento; su intención era que ellos se quedasen con él hasta que la chica encontrase un trabajo y pudieran mantenerse. SeHun también había prometido que pese a eso, no los dejarían solos jamás.

Pero SunHee fue cambiando mucho conforme pasaba el tiempo, empezó a ser más misteriosa, salía a altas horas de la noche y nunca decía a dónde iba, era más maleducada e irascible, lo que tenía a SeHun de los nervios.

Muchas veces llegaba borracha a casa y oliendo a tabaco, insultando a todos y volviéndose inestable. Cuando estaba sobria decía a SeHun que estaba buscando trabajo, pero él sabía que ella estaba mintiendo.

Y luego estaba su hermano menor, la causa del porqué SeHun había aguantado las mierdas de Kim SunHee durante tantos años.

Kim JongIn.

Era el opuesto de su hermana mayor, era responsable, iba a clases, sacaba notas que aunque no pasaba de la media se podía apreciar su esfuerzo, era simpático y trataba a SeHun con respeto. Y lo más importante, le alegraba los días.

Soportó todo por él, por JongIn. SeHun sabía que por el chico valdría la pena, temía dejarlo solo con la loca de su hermana mayor y que esta llevase al chico por el mal camino.

La relación entre él y SeHun era muy buena, se entendían perfectamente bien, tenían gustos similares y ambos eran odiados por SunHee.

JongIn era bastante atractivo también. Aunque siempre que sus pensamiento iban por esa dirección SeHun se martirizaba.

—¿JongIn? —SeHun lo llamó para posteriormente entrar en la habitación contigua— ¿Ya guardaste todas tus cosas?

—¡NO PODÉIS DEJARME SOLA, MALDITA SEA! —la mujer entró corriendo en la habitación de su hermano, directo hacia él. Agarró al menor por la camisa y intentó tirarlo al suelo, pero este era más fuerte que ella y no lo permitió— ¡NO PUEDES IR CON ÉL! ¡NO PUEDES DEJARME, ERES MI HERMANO! —lloraba con desespero—. SI TU TE MARCHAS CON ÉL CONTARÉ A LA POLICÍA QUE ÉL TE HA SECUESTRADO.

—Noona... —suspiró con cansancio. Toda esta situación lo superaba.

—JongIn ya tiene diecinueve años, puede marcharse se quiere, ya no está bajo tu tutela —le recordó SeHun, quien estaba recostado contra la pared, mirando con odio a la loca delante de él.

—Noona, por favor. No hagas que esto sea más difícil.

—¡NO, NO, NO! —se tiró a los pies de su hermano para aferrarse a él— ¿ES QUE NO LO VES, JONGIN? ÉL TE CORROMPIÓ LA CABEZA, QUIERE SEPARARTE DE MÍ PARA ESTAR A SOLAS CONTIGO. ¡ES UN MALDITO DEGENERADO!

—¿Se puede saber de que mierda hablas? —se acercó el mayor hasta ella, haciéndole frente.

—¡Eres un degenerado! ¿Acaso piensas que no sé porque nos acogiste en tu casa? Fue por mí hermano, siempre ha sido él. Lo viste y quisiste tenerlo aunque fuese solo un niño. Yo no soy tonta, me he dado cuenta de cómo lo mirabas.

SeHun la sujetó con fuerza por los hombros y la acercó lo suficiente para tener su rostro cerca del suyo. ¡Esto era el colmo! Siempre ha sido un hombre que sabía mantenerse tranquilo, pero ya estaba harto.

—Escuchame bien —habló despacio. Tenía la mandíbula apretada, luciendo más aterrador que si estuviera gritando—. Yo nunca he pensado en tu hermano de forma sexual, mucho menos cuando era más joven. No veo a JongIn de esa forma, es como un hermano menor para mí. Si te he aguantado durante todo este tiempo fue únicamente porque no quería que JongIn acabase siendo una persona tan despreciable como tú. Le quiero y eso no lo niego, pero es un sentimiento tan puro y bonito que alguien como tú jamás entenderá. Ahora dejarás de comportarte de manera tan ridícula y nos dejarás marcharnos. Te quedarás sola y es únicamente por tu cumpla. ¡Tú te lo buscaste! —la soltó mientras se apartaba—. JongIn, por favor, coge tus cosas y llevalas al auto.

El menor obedeció vacilante al principio, una parte de él seguía sintiéndose culpable por abandonar a su hermana. Quería a SunHee, pero era consciente que estando con ella ninguno terminaría bien. Por más familia que fuese, muchas veces era necesario alejarse por su propio bienestar físico y mental. Y su hermana no le producía ningún bien a nadie, ni a ella misma. SeHun y él habían intentado de todo, pero cuando una persona no quiere ni intenta cambiar, el esfuerzo de los demás es inútil.

Y SeHun... Lo amaba, lo amaba con todo su corazón y sería capaz de ir hasta el fin del mundo con él. Sabía que lo cuidaría y lo mantendría a salvo.

Y si su amistad era el único que recibiría JongIn, lo tomaría sin rechistar.

~

Ambos se subieron al coche luego de guardar todos sus pertenencias. El contrato del departamento pronto se expiraría y SeHun ya había comunicado al dueño que se marchaba y pagado su último mes de alquiler. Habían llevado todas sus demás cosas a un trastero y se habían quedado con lo más importante, al menos de momento. Si SunHee era lista, se iría pronto de allí o sería llevada a los tribunales por ocupa o allanamiento.

Llevaban casi 20 minutos en la carretera en camino a su nuevo hogar y SeHun seguía pensativo. Observó a JongIn cuando paró en un semáforo por un momento, para seguidamente arrancar el coche.

—He mentido, JongIn —confesó sin dirigirle la mirada—. Yo te amo, como hombre. Quizás siempre lo hice, quizás tu hermana tenga razón y desde un principio todo ha sido por ti. No lo sé. Pero en lo que estuvo equivocada fue en la intención de mis actos. Todo lo que hice fue de corazón y sin esperar recibir algo a cambio —suspiró—. Ahora... Simplemente las cosas son distintas y no te quiero mentir, tampoco quiero que pienses que exigiré algo. Lo único que quiero es tu felicidad.

—Yo también te amo, hyung. Siempre lo hice —sonrió con sinceridad.

Quizás todo fuera mejor para ambos a partir de ahora.

✾•✾•✾

❪✧❫ Antología || SeKai/KaiHunWhere stories live. Discover now