Couple Roll

CAPÍTULO 9.

Atsushi terminaba de ponerse un saco largo cuando Akutagawa le miro sonriente ― te vez bien

― Una cita contigo, debo llevar mis más finas ropas

― Pues aun no las veo

― Idiota...

El azabache comenzó a reír, era divertido fastidiarlo. Saco su mano de su largo saco ― ¿comenzamos nuestra cita? – pregunto, el albino sonrió y tomo la mano del mafioso

― Vamos

Atsushi y el mafioso salieron tomados de la mano, el azabache puso llave a la puerta, y llamo a Rashomon, Atsushi lo brazo de su pecho y saltaron entre varios edificios, entre dos edificios bajaron sin ser notados, se asomaron y miraron a los lados, sonrieron y tomando sus manos salieron caminando normalmente por las calles de Yokohama. Atsushi se acurruco ligeramente en el brazo del mayor, amaba pasar tiempo con él

Comenzaron su cita en la plaza, el juego de sugar daddy volvía cada que Atsushi quería un libro aunque esta vez no termino de manera sexual. Llevaban una bolsa con libros y otra con botanas pues planeaban regresar a casa del mafioso para disfrutar de películas. ― Jinko, vamos al arcade

― ¿ha esta hora? Debe estar casi vacío

― Vamos

Atsushi sonrió y le siguió, una vez en el árcade, jugaron poco, en efecto, no tardaba en cerrar todo pero, aprovecharon la poca gente, el mafioso se quitó sus lentes y entraron a la cabina de fotografías, se tomaron fotos sonriendo, abrazados y una besándose. Una vez afuera y con las fotografías bien guardadas, jugaron un rato, Akutagawa consiguió un peluche de camaleón para Atsushi y Atsushi un peluche de oso negro para Akutagawa. ― Atsushi

― ¿si?

― Vayamos a cenar antes de ir a casa

― Claro – sonrió Atsushi

Para cuando los chicos llegaron al restaurante pidiendo un privado, allí el albino miraba cariñoso al mafioso ― ¿Qué pasa?

― No lo sé... ¿acaso podría amarte más? – el azabache se sonrojo con el cuestionamiento de Atsushi

― Jinko...

― Desde que hacemos el amor... - tomo su mano ― me siento más conectado contigo

― Solo es cuerpo Jinko, tus sentimientos iluminan mis días

― Y tú me salvas cada día más

Atsushi aprovecho que estaban en un privado y se sentó al lado del mafioso, disfrutaba de darle de comer en la boca así como el mafioso llego a jugar con la comida y su pareja.

De noche, llegaron a casa. ― ¿Cómo te sientes Jinko?

― Me siento bien, aunque ya con algo de comezón

― ¿quieres quitártelo ya?

― No, lleguemos hasta el final está noche

― Bien, sabes que hacer

Atsushi comenzó por quitarse el saco largo, seguido por su camisa de botones revelando su pecho con ataduras de cuero ― ¿estás sensible?

― Ligeramente, mi piel se adapto

― ¿quieres que lo apriete más?

― Que tal... si mientras yo termino de quitarme la ropa vas por las demás piezas

― ¿quieres ser atado a la mesa o a la sala?

El agente se acercó al mafioso con la camisa de botones a medio brazo, se puso de puntas y hablo al oído del mafioso – usa a Rashomon