CAPÍTULO 26.

4.2K 252 88
                                    

Era temprano por la mañana, aún tenía tiempo antes de ir a trabajar, Atsushi estaba lavando la ropa, acomodaba la ropa blanca y oscura, y la sangrada de Akutagawa. Mientras lo hacía, sintió algo suave y sedoso, extraño así que busco entre las ropas de su amante y lo que vio le sorprendió – Ryu – le llamo desde la lavandería el azabache solo respondió

― ¿Qué?

― ¿Qué es esto cariño?

― ¿Qué es qué? – pregunto molesto mientras volteo la mirada

Atsushi estaba de frente con una sonrisa y una peluca oscura en su mano - ¿esto cariño?

― Oh eso, había una misión para proteger a mi jefe, así que lo cubrí

― ¿cu-cubriste a tu jefe? ¿estás bien?

― No pasó nada Jinko, tengo a Rashomon

― Pero aun así, poner tu cuerpo para defender a tu jefe

― No te preocupes Jinko

― Pero... - miro al peluca - ¿y si te pareces?

― Si, nadie se dio cuenta

― ¿puedo ver?

― Claro

Akutagawa fue a la habitación y Atsushi le siguió, el mafioso se vistió como su jefe, arreglo la peluca, Atsushi estaba asombrado – realmente eres el jefe de la mafia Ryu

― Bien, pero sabes que no debes decirle a la agencia

― Oh, no, no – sonrió Atsushi – quiero al jefe de la mafia para mi

― ¿perdón?

Atsushi se acercó hasta acariciar su mejilla – pregunto si... El jefe de la mafia ¿no quiere una noche con un tigre agente?

― Aaah esto es enfermo – expreso el azabache y tomo la cintura del albino – no podrás volver con tu amante

― ¿Pero Ryu será protegido?

― Siempre y cuando me cubra

Atsushi tomo del cuello al azabache y ambos se besaron, el azabache estaba dispuesto a quitar la ropa del albino pero Atsushi le detuvo – debo ir a trabajar

― Tendré una sorpresa para ti

― La esperaré

Atsushi se alejó, el mafioso tomo uno de sus glúteos –
¡nyaah! – gimoteo el albino y el azabache sonrió

― Como amo tu traje de trabajo

― Silencio perro mafioso

Más tarde, Atsushi arreglaba unos papeles. Cuando Kunikida volvió con Dazai en sus manos – Atsushi

― ¿si Kunikida-san?

― Necesito que vayas a buscar unos papeles a la bodega, están en cajas. Dazai las perdió

― Está bien – sonrió el albino

― Atsushi-kun, cuando las tengas nos avisas, debemos ir a una misión

― Si Dazai-san

Atsushi fue a la bodega de la agencia, cerró la puerta y lo miro, se puso a la defensiva – e-el jefe la mafia, el presidente no está aquí y

― Oh Jinko, realmente caíste

― ¿Ry-Ryunosuke?

― ¿genial no?

Couple RollWhere stories live. Discover now