Flores para la Princesa

Tonterías

Entre a mi habitación viendo a Mili sentada a un lado de Becca quien aún duerme con aparente tranquilidad.

¿Pasó algo? -le pregunte a la castaña-

No, supongo que estará dormida hasta tarde -afirmo con un destelló triste en la mirada- ¿Cómo te fue con tus padres?

Me dieron su palabra de que quienes la lastimaron irán a la cárcel...-suspire-

Espero que los encuentren pronto -me abrazó- trata de mantenerte tranquila...cuando ella despierte posiblemente estará asustada y te necesitará para calmarse así que trata de despejarte un poco y de estar en calma ¿De acuerdo?

Si, está bien -sonreí ligeramente-

Bueno, iré a buscar a Jordan y vendré más tarde a ver a Becca -beso mi mejilla-

Está bien -me sonrió una última vez antes de irse-

Decidí hacerle caso y relajarme un poco antes de que la rubia despierte, así que entre a la ducha y abrí el grifo de agua caliente, mientras está salía comencé a quitarme la ropa y momentos después entre bajo el chorro de agua, me permití disfrutar de la sensación del agua recorriendo mi piel aunque no me puedo sentir del todo tranquila...puede que haya logrado que los culpables de que mi novia este así vayan a pagar por lo que hicieron, pero no creo que sean los últimos en tratar de dañar a Becca y no puedo quedarme sin hacer nada al respecto...claramente terminar con ella no está dentro de mis planes a menos que ella lo quiera, así que podría ponerle seguridad...de esa forma cuando no esté cerca de mi podrá estar segura, supongo que sí decide que no quiere alejarse de mi lo hablaré con ella y espero que acepte mi idea. Salí de la ducha, voltee a ver a la rubia notando que sigue durmiendo así que abrí las puertas de mi armario y tome la ropa más cómoda que encontré osea un conjunto deportivo de color morado, cepille mi cabello para después acercarme a mi librero y tomar «Orgullo y Prejuicio, de Jane Austen» el cual es mi libro favorito, me senté en el pequeño sofá de mi habitación y me dispuse a leer un rato; pasó un largo rato en el que avance una cuarta parte de el libro y entonces Becca comenzó a moverse en la cama, me acerqué a ella, parece asustada...quizá está teniendo una pesadilla, la tome de los hombros y la sacudí un poco.

Hey, Becca...-la rubia abrió los ojos de golpe y un intenso miedo fue perceptible en sus orbes azules- tranquila, bonita...estás a salvó

Orianna...-se sentó sobre la cama y me abrazó con fuerza, está temblando y puedo sentir el latir frenético de su corazón-

Tranquila...estás segura -acaricie su cabello con delicadeza-

Me siento impotente al verla así de asustada y no tener mucho que hacer al respecto...en este momento solo puedo tratar de que mi amor la tranquilice y espero hacerlo bien.

¿Estuve dormida mucho tiempo...? -cuestiono sin alejarse de mi-

No tanto como esperaba -suspire- ¿Cómo te sientes?

Me duele un poco la cabeza...-se alejó un poco y me miró con sus cristalinas orbes-

El médico dejo medicamentos para eso -acaricie delicadamente su mejilla tratando de no lastimarla- ¿Quieres que te los traiga? -nego con la cabeza- ¿Quieres dormir un poco más? -pase su cabello detrás de sus orejas-

No...siento que dormí una eternidad -suspiro-

Hmm...¿Quieres comer algo? -pregunte-

No tengo hambre...-sonrió un poco-

Entonces...¿Que quieres hacer? Podemos ver una película o escuchar música...puedo prestarte un libro, puedes tomar una ducha...o no lo sé -rei nerviosa-

No tienes que estar ansiosa por mi...-afirmo mirándome fijamente-

No me siento ansiosa, es solo que...no te cuide como debía y por eso pasó todo esto -suspire- más bien me siento culpable...

No fue tu culpa -acaricio mi mejilla- nada de esto es tu culpa o la mía...-suspiro- la gente no se da cuenta de que lo que tenemos es solo amor...y aunque me frustra, no podemos hacer nada para cambiar su mentalidad si ellos no quieren cambiarla -me abrazó de nuevo-

Me asusta que te des cuenta que estar conmigo mucho problema y te vayas...-dije sería- aunque se que sería mejor para ti que no estuvieras conmigo...

¿Por qué dices eso? -se alejó de golpe-

Te lastimaron, Becca...-una lágrima resbaló por mi mejilla- esto no hubiera pasado si yo no fuera una princesa...y yo solo quiero que estés bien, que seas feliz y tengas una vida tranquila...eso no lo tendrás a mi lado -la rubia me miró con molestia-

Yo sé que esto no será sencillo, Orianna -dijo seria- Lo sé desde que te conozco ¿Y quieres saber algo? No me interesa...estoy dispuesta a todo con tal de estar contigo...ni siquiera me molestaría si tuviera que recibir mil golpes más si con eso logro quedarme a tu lado

No digas eso...-suspire- si te quedas conmigo tu vida será de los medios, todo el mundo te va a exigir que seas perfecta, cada cosa que hagas será juzgada de forma dura y algunas veces cruel...te volverías una reina con responsabilidades y funciones específicas...eso sin contar todo este problema que están haciendo por qué no aceptan tener dos reinas, y yo no tengo otra alternativa más que vivir así y me han educado toda mi vida para todo eso, pero tú no eres como yo, tú tienes la alternativa de no vivir esta vida "perfecta"...

¿¡Por qué no entiendes que no me interesa todo eso!? -grito furiosa, sorprendiendome demasiado- ¡No trates de decidir lo mejor para mí! No me interesa lo que conlleve estar contigo...yo solo quiero estar a tu lado, apoyarte en todo, hacerte sentir mejor cuando las obligaciones te sobrepasen, quiero que seas feliz...solo quiero estar contigo y no me interesa nada más que eso -se levantó de la cama rápidamente-

¿Que haces? No deberías levantarte, Becca -suspire exasperada-

¡Tú no deberías ser una tonta y aún así lo haces! -grito furiosa-

Cálmate, solo te decía lo que pienso no es para que te pongas así...-me acerque a ella lentamente-

Tuve un día muy largo y espantoso, esperaba que mi novia me diera un poco de cariño que de verdad necesito en este momento y lo único que me está dando es un gran "NO DEBERÍAS AMARME" ¿Cómo crees que eso me hace sentir? -su mirada se tornó cristalina-

Entonces un intenso sentimiento de culpa me atravesó...ella tiene razón, yo no debería estar diciendo todo esto, debería estar cuidando de ella por todo lo que pasó hoy y en vez de eso estoy diciendo las tonterías que Milán me pidió que no dijera más.

Yo...lo lamento -la abrace al tiempo que ella se desmoronaba de nuevo-

No pienses que está mal que estemos juntas -sollozo- yo estoy contigo por qué quiero hacerlo aunque se todo lo sé conlleva...

Lo sé...es solo que estoy asustada -las lágrimas también empezaron a bajar incesantes por mis mejillas- temo que te ocurra algo peor a lo que pasó hoy...solo quiero protegerte

Yo estaré bien -se alejó un poco- ambas estaremos bien...

Te prometo que haré lo que pueda para que así sea -deposite un beso en su frente-

Y con ese beso jure hace lo posible para que esté amor no termine en tragedia...al costo que sea.