CORAZÓN.

2.1K 160 74
                                    


Rayita.

En algún momento escuché que cada vez que te da hipo, tu corazón se detiene una milésima de segundo. Mi madre me dijo que eso era solo un mito. Pero si es verdad o no, creo que el hipo no es lo único que puede detener tu corazón y, aun así, seguir viviendo. Las palabras también tienen ese efecto. Puedo contar varios momentos en los que mi corazón se detuvo al recibir una noticia.

Mi corazón no solo se detuvo, sino que una parte de este murió al recibir los féretros por la puerta. Tres veces. O dejarlos ir siendo cargados por extraños. Ver esas cajas bajar en la tierra, para volver sola a casa. Yo puedo dar catedra de lo que es un corazón detenido, un corazón sin propósito.

Pero tengo poca experiencia sobre los corazones que vuelven a latir y tornarse rojo, llenos de sangre y vida, después de que estos han estado grises y pudriéndose un poco. Sientes como se repara desde dentro. Pica, duele, pero en una buena forma. Viene lleno de regocijo. Y sientes, como si lo que estuvieses viviendo fuese solo un sueño.

Ninguno de mis sueños tiene un final, siempre se quedan a la mitad de algo. He intentado demasiadas veces volver a dormirme para terminar lo que estaba soñando, pero no resulta como estaba antes. Pero cuando despiertas, estando en la conciencia, tienes el poder de crear en tu mente el final que tanto deseabas para ese sueño.

Y desde hace semanas, me dispuse a terminar esos sueños y ponerlos en práctica. Solo se deben aplicar las palabras correctas para darles rumbo.

—¿Por qué? —le pregunté.

—solo hay que verme para entender. Mírame. ¿de qué me sirvió? Yo quería darle todo. —da un gran trago a su copa y se sirve más. —siento como si estuviera teniendo un deja vu.

Se a lo que se refiere. Y se parecería más si repito lo que hice aquella vez, así que mantengo las cosas dispares para que su memoria no se vuelva lucida.

Aunque me duela con toda el alma, debo preguntar. Porque me veré demasiado indiferente sino.

—¿Qué piensas hacer ahora Harry? —

—¿hablas sobre perder la virginidad? —me dice jugando.

Trato de no ponerme nerviosa, pero se me ha quedado mirando fijamente, como analizándome.

—no. hablaba de ¿que piensas hacer cuando sea momento de volver?—

—hablábamos de perder la virginidad y ahora me dices que tal vez sea mejor que me vaya—

—yo nunca dije eso. Sabes que eres bienvenido para quedarte el tiempo que gustes. —

—lo sé. —de repente ríe un poco—me lo has hecho saber muchas veces. Y sabes que te lo agradezco... —se quedó pensativo un rato antes de continuar —a veces creo que quieres mantenerme aquí prisionero.

Mueve la boca y se humedece los labios. Intenta sonar serio pero una diminuta sonrisa lo delata.

—así es. —le contesté —y no te voy a dejar ir—le dije lentamente.

Entre risas todo parece una broma. Así que puedes soltar de esa forma un poco de verdad. Es bueno el desahogo, más si viene acompañado del descaro.

Se acerca hacia mí y me jala consigo. Intenta darme cosquillas, pero yo soy más rápida. Ahí mismo, tirados en el suelo, nos juntamos un poco. El invierno de este año ha llegado muy seco. No ha nevado, pero corre un viento que cala hondo. Así que solo mantenemos el calor como podemos. Y parece que hemos encontrado una buena forma de hacerlo.

Descubro, para mi suerte, que él tiene su brazo alrededor de mi hombro y juega con mi flequillo.

—esto te hace lucir como una niña—me dice.

Escrito Con Magia {Harry Potter Y Tu}Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin