Firmando mi propia sentencia

Sensualidad

Omnisciente:

Había tenido éxito. Ese pequeño acto de confianza había bastado para desestabilizarlo. Debía tener esa clase de comportamiento por al menos tres días o hasta que él hiciese su próxima jugada, antes de pasar a mayores. En todo caso, necesitaba más intimidad con él y actualmente el único medio para conseguirlo era por medio de la investigación.

Fue amable con él, crítico, inteligente. Descubrió algunas cosas antes de Ryuzaki y así se ayudaban mutuamente. Se dividían las tareas y aunque para alguien normal puede haber sido extenuante, 8 horas de continuo trabajo se les pasaban a ambos como si nada. (Aunque cabe decir que Light seguía siendo muy estricto con sus tres comidas diarias y de vez en cuando regañaba a Ryuzaki por no comer más verduras).

- Me nutro bien –le decía éste- Watari se encarga de añadir los nutrientes que necesito a todo lo que como.

Light no respondía, pero se quedaba callado con una cara de desaprobación.

Ambos sabían que, para que su plan fuera fructífero, necesitaban un momento de intimidad, en un lugar donde pudiesen estar los dos solos. Por eso en cuanto el padre de Light, Soichiro Yagami, se fue a su casa para descansar, L se puso en acción. Comenzó a revisar el caso de Raye Pember, las grabaciones en la estación y finalmente, se dispuso a ver las grabaciones del interior de la casa de Light.

- Tengo intenciones de mostrarle a Light las grabaciones que hicimos al interior de su casa –anunció a los otros investigadores- como hablamos antes, por respeto a la familia del Jefe Yagami, sólo yo y Light revisaremos las cintas.

Los demás investigadores asintieron y se fueron de la habitación, dejando a L y a Light solos

Justo como había planeado.

Light evidentemente sabía de las grabaciones en su casa, había extorsionado a Ryuk para que le dijera dónde estaban e incluso había preparado un truco con una televisión miniatura y un envase de papitas para pasar desapercibido mientras continuaba matando criminales desde la comodidad de su hogar.

Pero ahora, supuestamente ignorante de la situación, tenía que actuar como si no tuviera idea de lo que estaban hablando.

- Ryuzaki... -dijo con cara de sorpresa y seriedad- ¿Qué significa esto?

- Luego de ver el extraño incidente con el sobre de Raye Pember y su extraña actitud al morir decidimos colocar cámaras en las casas de la gente que tenía a su cargo, y como ya te he dicho, tu familia era parte de ellos.

Light se quedó en silencio atónito, o eso es lo que aparentaba.

- ¡Tengo una hermana pequeña, Ryuzaki! ¿En los baños también...?

- Y cuando mirabas revistas porno, también. Tu padre y yo lo vimos todo.

El castaño se sonrojó y dejó la mirada baja y perdida. Apretó sus puños, como queriendo decir algo pero en realidad sin abrir la boca. Sabía que el caso Kira era mucho más importante que su privacidad, pero aun así la situación lo seguía superando.

O eso es lo que aparentaba.

- Bien, muéstramelas –dijo como si le hubiese costado el sólo decirlo-Pero antes contéstame una cosa. ¿Mi padre estuvo de acuerdo con esto?

- Sí. El señor Yagami es realmente una persona honorable, le fue difícil aceptar.

Se lo dijo en un tono que no solía usar. Uno más reconfortante, amigable y comprensivo.

Light asintió pesadamente y comenzaron a ver las cintas.

Estaban sentados muy juntos, pero las sillar eran molestas para acercarse, por lo que al poco de comenzar Light comenzó a estirarse, cansado de haber estado tanto tiempo en la misma posición. Ryuzaki notó esto de inmediato.