Capítulo 13

1.3K 169 7
                                    

Capítulo 13

     Para Selena, encontrarse en frente de los padres de Albert, había sido algo incómodo. No tan sólo había tenido que fingir sobre quién era, sino que también los había envuelto en lo que se había convertido su vida: Una total y absoluta mentira para proteger a Nicole. Odiaba mentir, pero había aprendido desde hacía mucho tiempo, que era la única alternativa que le quedaba para no poner en riesgo la vida de la hija de su amiga Emma. El peligro todavía seguía latente y lo había sabido por medio de Albert, quien la había empujado a marcharse por el bien de Nicole y de ella misma.



     El vuelo a Londres, al menos había conseguido tranquilizarla por completo, cuando después de chequearse, pasar por inmigración había sido sencillo. Esos documentos que aún tenía habían sido validos para que ella y Nicole pudiesen salir de Estados Unidos, sin ser retenidas o separadas. Respiró hondo cuando finalmente se había sentado en la puerta de embarque junto a la familia Parker y con Nicole. Y ahora era testigo de cómo en su inocencia Nicole disfrutaba ver las nubes en su ventana.



—¡Mami, estamos volando sobre las nubes!— expresó asombrada, sin dejar de mirar hacia su ventana.

—Sí, mi niña...

—¡Es asombroso!

­—Entonces puedo pensar que te gusta volar...

—Sí... Y me gustaría seguir viajando para poder ver las nubes...



    Selena rozó la mejilla de Nicole y le sonrió con dulzura, sin poder confesarle, que quizás era probable que no pudiesen volverlo hacer juntas más, solo a su regreso. Ella no poseía ingresos para darse el gusto de estar volando cada vez que quisiera, mucho menos podía poner en peligro la vida de Nicole. Sólo esperaba que Albert solucionara su caso y encontrara al culpable y le hiciese pagar por lo que había hecho en el pasado. Nicole merecía recuperar lo que era suyo. Merecía una mejor vida de la que ya tenía con las limitaciones que solo podía darle.



    Miró al frente y dejó que Nicole siguiera mirando a su ventana. Cerró los ojos cuando una lágrima intentó recorrer su rostro sin su permiso, bastaba más que la vieran llorar en ese momento.



    Las horas de vuelo pasaron más rápido de lo que ella había querido, aunque obviamente había sido un largo viaje y había tenido la impresión que solo a los demás se le hacía eterno, mientras que cada hora era un minuto para ella. Cuando finalmente el avión aterrizó en el aeropuerto de Londres, un nudo se le formó en la garganta, sabiendo que era el momento de conocer a las hermanas de Albert, asistir a la boda de una de ellas y quedarse alojada en la casa de la otra. Hacía tanto tiempo que había dejado de socializar con la gente, al tan punto, que la incomodidad se agrandó más de lo que hubiese deseado. Agradeció la distracción de tener a Nicole tomándola de la mano derecha, mientras se dirigían a recoger sus equipajes.



­­—¿Lista para conocer Londres?— le preguntó a Nicole, al arrodillarse y al colocarse en frente de ella cuando ya había recogido sus equipajes, sin darse cuenta que Albert se acercaba para ayudarlas, después de ayudar a sus padres.

—¿Listas? Les confieso que al igual que ustedes, casi soy un turista. Solo estuve en una ocasión para la boda de mi hermana Amy...—se permitió tomar una de las maletas sin consultar antes si podía hacerlo—. Déjenme ayudarles.... Les va a encantar Londres y mis hermanas estarán encantadas de enseñarles la ciudad... Mis padres nos esperan en la salida. Están ansiosos de verlas de nuevo. En especial a Nicole, nos asombro a todos cuando anunció que se casaría con un noble inglés, al igual que, Amy— se rió—. Creo que seré el único que romperé esa regla... No está en mi lista casarme con alguien de la alta sociedad inglesa. — y le guiñó un ojo a Selena, haciéndola sonrojar, al tomarla desprevenida con tal confesión.



    Lejos de allí, sin ambos saberlo, Ralph Brewster se reunía con uno de sus aliados, quien le hacía entrega de un sobre que había estado esperando con ansías.



—¿Han encontrado algo? —preguntó en un tono serio.

—No pudimos hacer mucho, solo fotografiarlo con esta mujer y su hija... Al parecer es amiga de su hermana Nicole, pero se me haría mucho más una coincidencia. ¿Esa niña no se te parece a alguien?



     Ralph miró con determinación aquella fotografía y algo lo golpeó en lo más hondo. No era necesario preguntar por qué le hacían esa pregunta.



—A Emma, a la esposa de mi primo Derek...—la irritación se dibujó en su pálido rostro.

—Es lo mismo que pensé... Por lo que creo que has encontrado tus respuestas. Albert ha estado no tan sólo ocultándolas, sino que sigue detrás de esto mucho más tiempo de lo que lo que hemos pensado.

—Tengo que acabar con él antes de que me descubra... Pero antes, debo ver si nos lleva hacia alguien que he estado buscando desde hacía mucho tiempo. Y que también quiero destruir, pero con mis propias manos...—expresó con un tono malvado y ruin.

********************************************

Hola querido lectores, como les dije, estaré poniendome al día poco a poco con esta novela. Espero que les guste este capítulo. ¿Qué les pareció el capítulo? ¿Qué creen que sucederá? ¿Logrará llegar luego salvo y sano Albert a Toronto? Mientras tanto, ¿surgira el amor en Londres entre Selena y Albert?


Gracias por su paciencia, votos, comentarios y lecturas... Saludos desde Venezuela.

La Razón Para Continuar (4to libro-Serie "Un Cambio Inesperado")Donde viven las historias. Descúbrelo ahora