¡No soy su jeva! »Vene

１；Brasil.

Era un día soleado y fresco, perfecto para salir con amigos a una escapada, un picnic o quizás hasta a algún lago o río, aunque así no pensaba Venezuela, él simplemente quería estar en su casa, en su habitación acostado viendo memes o hundiéndose en sus pensamientos llenos de depresión en lugar que estar en aquella sala de conferencias con las banderas de todos los países, donde la voz de ONU hacía eco en el lugar, hablaba de algún problema actual al que el venezolano no le prestaba ni la más mínima atención, él estaba perdido en sus pensamientos, apoyando su cabeza en sus brazos, casi acostado en la gran mesa.

Pero tuvo que regresar a la realidad al sentir un codazo por parte de su amigo sentado a su lado, Venezuela cansado levantó la cabeza viendo a México frunciendo el ceño, iba a decirle algo pero el mexicano señaló con la mirada hacia la dirección donde se encontraba ONU, él había dejado de hablar, dándole la palabra a Estados Unidos, quien llevaba rato hablando de quién sabe qué, pero al oír lo siguiente Venezuela frunció aún más el ceño.

—And for this reason I think... Venezuela should give me his petroleum and his ores. (Y por esta razón pienso... Venezuela debe darme su petróleo y sus minerales.) —Comentó seriamente viendo a Venezuela detrás de sus gafas de sol—No puede seguir a Rusia y China al asqueroso comunismo. —Agregó con asco cuando nombró aquellos dos países.

El ruso frunció el ceño enojado, mientras que China siguió con su expresión de seriedad, Venezuela bufó enojado levantándose de su asiento con brusquedad y dirigiéndose a la salida, ignorando completamente los gritos de llamado por parte de ONU.

—Venezuela need freedom and...! (¡Venezuela necesita libertad y...!)

—USA, please... (USA, por favor...) —Suspiró con cansancio la organización—Hablábamos acerca de los desastres naturales en algunas de tus provincias, no de... —Volvió a suspirar pasándose una mano por la cara, USA se sentó en su lugar indiferente—Brasil... —Llamó ONU, el nombrado le alzó una ceja dándole a entender que tiene su atención—¿Podrías ir a buscar a Venezuela? La reunión aún no acaba.

El brasileño se vio confundido ante aquella petición puesto a que su relación con el venezolano no era la mejor que digamos, habían tenido una gran pelea por Guyana hacía algunos años, pero sin embargo sabía que Venezuela le tenía rencor sólo porque su gobierno apoyaba a Guyana y no a él, aunque no era su culpa.

Brasil asintió ante la petición de ONU, no pudiendo negarse, se levantó de su asiento y salió de la sala de reunión buscando con la mirada al venezolano sin éxito, comenzó a caminar por las instalaciones hasta que unos pasillos después lo encontró caminando sin rumbo, trotó hasta Venezuela para que no se le perdiera de vista, cuando estuvo lo suficientemente cerca posó su mano en su hombro.

—Vene... —Lo llamó, Venezuela rápidamente se giró al oír esa voz y se quitó la mano de Brasil de encima con brusquedad, el brasileño hizo una mueca—¿Estás bien?

—Como si te importara, coño 'e tu madre. —Se cruzó de brazos—¿Ahora qué quieres? ¿Vienes a restregarme en la cara lo de...?

—No, ya te dije que no es mi culpa que mi gobierno lo apoye a él. —Suspiró Brasil cansado de la situación—Quiero estar bien contigo, Vene. —Hizo una mueca triste.

Venezuela lentamente relajó su expresión, pero no lo tanto como para sonreírle.

—... Ya, habla claro, ¿qué quieres? ¿Zamurear mi petróleo? ¡Te gusta! ¡Mis tierras te gustan! —Iba a comenzar a hacer un escándalo, a gritar o a irse corriendo.

Pero se calló abruptamente ante el agarre del brasileño en sus manos, no las agarró con fuerza, al contrario, fue con delicadeza, subiendo lentamente la manga del suéter que normalmente usa el venezolano, por otra parte el más bajo se encontraba algo desorientado por la acción de Brasil, su cabeza no terminaba de procesar, se quedó simplemente estático.

Brasil hizo una mueca triste al ver tantas grietas y tan grandes que tenía el más bajo, pasó con delicadeza sus dedos por estas, como acariciándolas, Venezuela frunció aún más el ceño y lo empujó, alejándose bruscamente de él.

—ONU quiere que vuelvas. —Dijo con simpleza para darse vuelta y volver a la sala de reuniones.

—Marico, ¿qué coño...? —Murmuró dirigiendo su vista a su brazo y luego a la espalda del brasileño, viéndolo alejarse.

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La reunión había finalizado al cabo de una hora más, el venezolano había entrado pocos minutos después de Brasil y se sentó en su sitio, en medio de México y Chile, aunque él no estuvo del todo tranquilo puesto a que recibía constantes miradas para nada disimuladas de Brasil, lo ponían algo nervioso.

Brasil frunció el ceño al ver que Estados Unidos quería ir y hablarle a Venezuela, así que se adelantó y pronto le sonrió al venezolano, quien se sobresaltó un poco por aparecer tan repentinamente.

—¿Quieres ir por un helado? —Ofreció.

Venezuela pareció dudar unos momentos, hasta que finalmente le sonrió, USA había agregado otro país a su lista negra.

—No. —Respondió Venezuela aún sonriendo, se dio vuelta y empezó a caminar.

Bueno, por lo menos no lo insultó.

Adelantó su paso y se acercó a Venezuela, caminando a su lado y viéndolo.

—Te invito a comer. —Le sonrió.

El venezolano detuvo su caminar junto a Brasil, lo pensó un poco y luego lo miró seriamente.

—Sisa, vamos, pero si empiezas a hablar del marico ese o a zamurear mi petróleo me voy pa'l coño.

—Está bien. —Aceptó sonriendo triunfante el brasileño.

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Para estar tan delgado, comía más que él.

Venezuela ya se había comido dos platos y pidió cuatro más, mientras que Brasil sólo ordenó algo liviano por ahora, estaba confundido, no sabía dónde entraba tanta comida en tan pequeño cuerpo.

—Pa' lleva'. —Le dijo al camarero que traía su pedido, asintió y se dio vuelta a su orden.

—¿Por qué para llevar? —Cuestionó con curiosidad Brasil.

—Pue' pa' mis carajitos, ¿pa' qué más?

Brasil asintió, no se podía quejar, él fue quien lo invitó.

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Venezuela tremendo matón.

Básicamente todos están interesados en Pequeña Venecia, ¿y él? Él sólo se divierte viendo como se matan y pelean entre sí.

No sé cómo me saldrá esto, espero que bien, puede que haga algunas expresiones de Venezuela mal, crecí en Venezuela pero no estoy acostumbrado a utilizar muchas expresiones de Venezuela e incluso mi acento no es venezolano, soy una total desgracia, así que hago lo posible y lo que recuerde de palabras y expresiones que me han enseñado mis queridísimos amigos, los amo mucho. (*˘︶˘*).｡.:*♡

Habrán capítulos largos y cortos, dependiendo de la situación.

Eso, no se olviden de votar.

Los ama, redwings. (๑•ᴗ•๑)♡